Resumen Lección 3 «Tzimtzum y Masaj»

Repaso de la clase «Cuatro fases de Luz directa»

  • Fase Shores Luz Simple. (Yesh mi Yesh) (Hay de Hay) Placer absoluto e ilimitado. De su interior un punto potencial que es la semilla del deseo.
  • Fase Alef. Jojma. Luz de Jojma. Deseo de recibir que contiene todo el placer de la fase anterior (Yesh mi Ain) (Hay de no Hay) La criatura no existe ya que esta anulada por la Luz como una “vela dentro de una antorcha”. Embrión en el Útero. Comienza la sensación del dador
  • Fase Bet. Bina. Luz de Jasadim. El deseo descubre la cualidad de otorgamiento. Pero descubre también las dificultades para ello
    • No tiene lo que dar
    • No puede crear de la nada lo que dar.
    • No puede dar como el Shoresh.
    • No tiene a quien dar.
  • Fase Guimel. Zeir Anpin. Luz de jasadim con la iluminación de Jojma. Deseo de recibir para otorgar. Descubre que todo es un proceso de definición a sí mismo en relación a la Luz y por primera vez empieza a sentir que el Creador le desarrolla todos estos discernimientos no por la sensación misma, sino para SER EL CREADOR.
  • Fase Dalet. Maljut de ain Sof. Luz de Jojma completa. En esta fase, el Deseo quiere disfrutar de la conexión con el dador de placer. El placer que recibe de Él es solamente el medio para conectarse a Él. Esto significa que el deseo descubre en acción, cual es el estado de ser otorgante como el Creador y quiere disfrutar de ello. Lo absolutamente especial de este momento es que este es un deseo que nace del CREADO.

Cuadro de relaciones

Equivalencia de forma

Leer los puntos Puntos 12 y 13 de la Apertura de la Sabiduría de la Cabalá

Pregunta de Baal HaSulam al final del punto 12

¿por qué distinguimos este deseo de recibir como Aviut y turbiedad, y por qué debemos purificarlo a través de Torá y Mitzvot, al punto que sin esto no podremos alcanzar la meta sublime del Pensamiento de la Creación?

  • La meta es llegar a la equivalencia de forma con el Creador que es la cualidad de otorgamiento
  • Este deseo creado en la primera fase, para alcanzar la meta de la Creación, tiene que sentir que es opuesto a la cualidad de otorgamiento, a eso se le llama Aviut. Y para ello pasa tres fases más hasta llegar a la cuarta.
  • En ese momento comienza a descubrir que no esta en equivalencia de forma con dicha cualidad. A eso se refiere Baal HaSulam con el aviut o turbiedad.
  • Estudiamos anteriormente la equivalencia de forma con respecto a la percepción. Ahora lo haremos con respecto al acercamiento o alejamiento en espiritualidad. Esto quiere decir que estamos más o menos cerca del Creador en la medida que vamos incluyendo en nosotros la cualidad de otorgamiento.
  • La distancia en la espiritualidad no se mide de acuerdo al lugar. No existe el lugar en la espiritualidad, sino por medio de cualidades: otorgamiento y recibimiento. Cuanto más otorgo, más cerca al Creador estoy, el cual es 100% otorgamiento, y viceversa, cuanto más recibo más lejos estoy de Él.
  • El proceso de acercamiento a esta cualidad de otorgamiento a través de la equivalencia de forma se llama corrección de deseo. Veremos en esta clase que se trata del cambio de la intención de recibir en intención de otorgar y eso se realiza a través de Tora (Luz que reforma) y Mitzvot. (acciones que cambian la intención)

Cinco niveles en Maljut de Ein Sof

  • Según las leyes, la totalidad y el individual son iguales y no hay ausencia en la espiritualidad, Maljut que salió después de las 4 fases de Luz directa anteriores, se reparte en 5 niveles por si misma según los niveles que le precedieron y su mismo nivel.
  • En la fase 4 están las fases anteriores, llamadas 9 primeras. (TaR) (acrónimo de Tet Ratzonot) Representan las nueve Sefirot de Keter hasta Yesod.(KHB-HGT-NHY)(son las iniciales de los sefirots Keter Jojmá Biná – Jesed Guevurá Tiferet – Netzaj, Hod, Yesod.
  • Cada una de las fases tiene nombre. Sus nombres se llaman “Sefirot” – “Sefir”, del verbo “iluminar”, puesto a que el deseo que tiene luz en su interior, ilumina gracias a la Luz que lo llena.
  • Las Sefirot se llaman “Keter”, “Jojmá”, “Biná”, “Zeir Anpin” (ZA) y “Maljut”.
  • La Sefira ZA incluye seis Sefirot (Jesed, Guevurá, Tiferet, Netzaj, Hod, Yesod)
  • A partir de aquí se trata únicamente de la parte llamada Maljut de Ein-Sof. Aquí el creado no hace ninguna limitación sobre la grandeza del recibimiento – sino que quiere todo para sí.
  • Esta parte de la fase 4 llamada Dalet de Dalet (4 de 4) es la que va a sentir esta imposibilidad de ser como la cualidad de otorgamiento y es la que va a dar a lugar a las próximas acciones de la vasija: Vergüenza, Tzimtzum y Masaj.

Vergüenza

La vergüenza y el Masaj

  • Si bien las acciones son del Creador, el creado que quiere alcanzarle las investiga y asciende hasta llegar a Shoresh. (“Por tus acciones te conoceremos”)
  • Alli descubre que es completamente opuesto a El y siente la falta de equivalencia de forma con el Dador.
  • Recordar la diferencia entre el deseo de adquirir el estado del Dador en las fases 1, 3 y 4. En la 4 el deseo procede de su interior y no puede reemplazarlo.
  • Entonces siente la vergüenza de recibir sin posibilidad de cambiar su naturaleza, sintiéndose en un estado inferior al Creador.

ClipVergüenza

Tzimtzum

Punto 14 de la Apertura de la Sabiduría de la Cabalá (primera parte)

14) El Tzimtzum Alef (Primera restricción) ocurrió para salvar a las criaturas de esta titánica separación. Esencialmente, separó a Bjiná Dálet del resto de los Partzufim de Kdushá, de forma tal que esa gran medida de recepción permaneció como un hueco vacío; como un punto privado de Luz.

  • Como vimos, el deseo de la fase 4 “de recibir”, nace de sí misma, como resultado de las acciones que la precedieron, por eso en este punto, se requiere una acción especial.
  • Todo lo que la fase 4 puede hacer por ahora es no estar de acuerdo con su deseo, no querer permanecer en su propio deseo. Tal actitud de parte de la fase 4 respecto a su propio deseo es denominada «Tzimtzum Alef» por ser la primera vez que siente esta diferencia de forma.
  • El Creado no puede deshacerse del deseo ya que es algo natural en el, pero es posible tener una actitud distinta hacia el.
  • El Tzimtzum se convierte en una ley  – es imposible recibir con el fin de recibir –, es la raíz del problema del llenado que aprendimos en el semestre anterior. (En cuanto el placer llena el deseo, este desaparece)
  • El Tzimtzum se realiza por lo tanto sobre la intención y no sobre el deseo.
  •  Baal HaSulam define el término “Tzimtzum” como “aquel que restringe su deseo aunque anhele muchísimo recibir”.
  • En Tzimtzum Alef, el deseo no se aminora ni es oprimido, sino lo contrario, el deseo sigue queriendo e incluso más que antes.
  • Repetimos, el Tzimtzum se produce sobre la intención de recibir. O sea, según el Tzimtzum Alef, se puede continuar trabajando con el deseo, pero con la intención correcta  y así realmente ocurre. Pronto aprenderemos cómo Maljut trabaja con el deseo con la intención de otorgar.

Retirada de la Luz y creación del Mundo del Tzimtzum

  • Fruto de esta sensación de vergüenza, la Luz se aleja de las cuatro fases. (como vimos se aleja quiere decir que pierde las cualidades de otorgamiento)
  • Pero ¿es verdad que se aleja? Esta escrito “la Luz está en descanso absoluto”, “Yo HaVaYaH, no varío”. Todos los cambios ocurren en las vasijas y no en la Luz; todo ocurre en la sensación e investigación de la Luz simple e inmutable sobre las vasijas.
  • En el mundo del Tzimtzum la vasija crea limitaciones sobre la intención de recibir, no quiere sentir que recibe si es opuesto al Creador.

Masaj

Clip TzimTzum y Masaj

Punto 14 de la Apertura de la Sabiduría de la Cabalá (primer párrafo completo)

14) «El Tzimtzum Alef (Primera restricción) ocurrió para salvar a las criaturas de esta titánica separación. Esencialmente, separó a Bjiná Dálet del resto de los Partzufim de Kdushá, de forma tal que esa gran medida de recepción permaneció como un hueco vacío; como un punto privado de Luz. Esto se debe a que todos los Partzufim de Kdushá surgieron con un Masaj erigido en su Kli de Maljut, para que no pudieran recibir dentro de su Bjiná Dálet.

Entonces, cuando la Luz Superior fue atraída y se extendió al ser emanado, este Masaj la rechazó. Esto es referido como un choque entre la Luz Superior y el Masaj, el cual eleva Or Jozer hacia Arriba, vistiendo a las diez Sfirot de la Luz Superior.»

  1. Una vez que la vasija se vacía la Luz Directa o Superior llega a la vasija. (Or Yasar)
  2. Como resultado de la vergüenza (Busha) hizo la primera restricción (Tzimtzum alef)
  3. Entonces crea una pantalla (Masaj) y rechaza la luz. (Or Jozer) Es decir que manifiesta su deseo de no recibir la Luz como la recibió antes del Tzimtzum, sino recibirla con la intención de otorgar.
  4. Fruto de ello realiza un cálculo y recibe la luz interior (Or Pnimit) con la intención de otorgar. (Or Jozer que se viste de Luz Superior= Or Pnimit)

Los cálculos de la intención se realizan según los discernimientos que hay en la vasija – y siente que en cada fase es capaz de recibir con el fin de otorgar, excepto como ya dijimos en la fase Dalet de Dalet, porque se trata de su deseo, que la separa del Creador, y es a este al que tiene que restringir. (Esta parte del deseo nos dicen los cabalistas que es la última fase de la corrección del deseo en la que precisamente nos encontramos ahora)

  • Luz directa – Luz atraída del Creador a los creados, de Arriba hacia abajo.
  • Luz retornante o reflejada – Luz atraída de abajo hacia Arriba, la intención del creado.
  • Masaj – la intención del otorgamiento al prójimo que monta sobre el deseo de recibir en el creado.
  • Luz interior – la Luz retornante que se viste en el Kli de Luz Superior

Clip Masaj es un conjunto de cualidades

Resumen Lección 2 «Cuatro Fases de Luz Directa»

Orden descendente

Apertura a la sabiduría de la Cabalá, item 3

3) «El orden gradual descendente a modo de cascada, que trae al deseo de recibir a su forma final en este mundo, sigue una secuencia de cuatro fases que también se encuentra en las cuatro letras del nombre HaVaYaH. Esto se debe a que las cuatro letras, HaVaYaH (Yud, Hei, Vav, Hei), en Su Nombre, abarcan la realidad entera, sin excluir nada.  En general están descritas en las diez Sfirot: Jojmá, Biná, Tifféret, Maljut, y su Shóresh (Raíz).»        

Como ya sabemos el orden descendente del desarrollo es el alejamiento del Creador…. más y más ocultamiento… mas y mas espesor ( intensidad del deseo de recibir placer)

Una pregunta surge siempre en este punto ¿Cuál es el propósito de el orden descendente del desarrollo de este mayor ocultamiento gradual? 

  • La apertura nos ofrece los componentes básicos de la creación, del deseo. Veremos por qué las cosas suceden como suceden – veremos las leyes de la realidad, las mismas leyes y raíces mencionadas por el BaHal HaSulam en su definición a la Sabiduría de la Cábala.
  • El deseo debe llegar a un nivel de creado. Esto supone que para  alcanzar el Creador y que el alcance sea por el creado mismo independientemente del Creador, primero tenemos que alcanzar el estado de oscuridad y anhelar el estado de adhesión al creador, para después como vimos en la lección anterior, pedir la Luz que reforme mi condición de receptor (la Torá)

Apertura a la sabiduría de la Cabalá, item 4

 4) «La razón por la cual el deseo de recibir debe descender gradualmente a través de las cuatro Bjinot (fases) mencionadas más arriba en ABYA (Atzilut, Briá, Yetzirá, Asiyá) es que existe una gran regla en lo referente a los Kelim (pl. de Kli): la expansión de la Luz y su partida, volvieron al Kli apto para su función. Esto significa que en la medida que el Kli no haya sido separado de la Luz, está incluido en la Luz, y está anulado dentro de sí mismo como una vela dentro de una antorcha.»

Esta es la razón por la que  la luz fue expulsada  de la vasija: si no hay una separación del Kli de la luz, este permanece anulado dentro de ella como una vela dentro de una antorcha.

En general sabemos muy bien que para sentir el deseo de algo tenemos que saborearlo por  primera vez [una nueva y maravillosa fruta por ejemplo] y sólo después de que su sabor desaparece se puede despertar en nosotros un deseo de querer tomar de nuevo la fruta).

Todo el proceso es dirigido por la luz, hasta que el Pensamiento de la Creación no llegue a su finalización, la luz no dejara de trabajar en la vasija

Cuatro Fases de Luz directa

Clip: Sobre la 4 Fases [6:03 min] – Recomendación de dibujar en los cuadernos mientras ven el clip

1. Bjinat shoresh. Fase Raíz

Es la Luz pura y simple, el placer absoluto, el deseo de otorgar todo lo bueno y maravilloso que hay en ella. (Hay de Hay)

A esta fase se le llama Keter y es pura luz

Aunque la fase shoresh aparentemente es pura Luz, en ella el deseo ya existe como un punto potencial, como un material amorfo (Hay de no hay) que aún no se ha revelado como deseo. Es la base del deseo sin ninguna sensación o desarrollo. Así como una semilla. Recordemos que «No hay Luz sin vasija».

Es decir que El pensamiento de beneficiar a Sus creaciones debe contener en sí mismo el deseo, al cual quiere beneficiar. Pero en potencial y no en accion.

Por ejemplo: Si quiero construir una casa, comienzo a pensar en la casa, a continuación, diseño un plano para construir la casa según lo que pensé, después se traen los materiales y se comienza a construir de acuerdo al plano.

En esta fase la casa (el deseo) todavía se encuentra en el pensamiento inicial como al oculto y potencial. Es ahora cuando empieza el desarrollo de los planos.

Una conclusión lógica de esta fase es que la materia de la creación no proviene de deseo, no por cuenta de el. Todo lo que hay en el deseo proviene directamente de la luz y por lo tanto se encuentra en total dominio de la luz.

2. Bjinat alef. Fase 1

Apertura a la sabiduría de la Cabalá, item 5

5) «Por lo tanto, se requieren las cuatro fases del nombre HaVaYaH, llamados Jojmá, Biná, Tifféret y, Maljut. Bjiná Alef (primera fase) corresponde con Jojmá, y consiste ciertamente del ser emanado en su totalidad: La Luz y el Kli. En ella se encuentra el gran deseo de recibir con toda la Luz incluida adentro, llamada Or Jojmá (Luz de Sabiduría) u Or Jayiá (Luz de Vida), pues comprende toda la Jaim (Vida) dentro del ser creado, revestida dentro de su Kli. Sin embargo, esta fase es considerada Luz por entero; y el Kli es apenas distinguible, puesto que se encuentra mezclado con la Luz, y de este modo está anulado cual una vela dentro de una antorcha.”

Como anteriormente dijimos el deseo de otorgar placer y beneficiar, necesita de un deseo que quiera recibir dicho placer y beneficio. De esta forma,  en esta fase la luz extrae de si misma este punto oscuro (hay de no hay) y crea el deseo de recibir toda la abundancia que contiene esta luz infinita, exactamente en la misma medida que lluz quiere otorgar.

Podría considerarse que en este punto la Creación ya ha termnado, pero como dice el texto en esta fase no existe todavía la vasija, (deseo y kli aluden al mismo concepto) ya que esta esta anulada por completo por la Luz.

Para que exista el Creado tiene que nacer de el mismo una carencia por la Luz, una voluntad propia de recibir la Luz.

Este estado se asemeja al del embrión en el vientre de su madre – apenas es  consciente de su realidad.

Poniendo un ejemplo un poco más forzado, el estado de la Fase 1 es similar a un niño que su madre quiere darle algo de comer. Para ello le abre la boca sin que él quiera, le introduce todo el alimento que quiere darle y le cierra la boca.

A esta fase se le llama Jojmá y la luz que se siente en su interior es la Luz de Jojma. (luz de sabiduría)

En esta fase en la vasija existe toda la luz de la sabiduría, todo el placer incluido en el pensamiento de la creación, pero sin embargo no se siente porque no hay carencia. Por lo tanto a esta fase no se le pude llamar creado.

  • Sobre la carencia: Nos parece que el propósito de la vida es el llenado. Sin embargo, el propósito de la creación es el desarrollo de la carencia ya que toda la creación es una carencia, y todo lo que se desarrolla en ella es una carencia. Toda la sensación de la realidad se basó en la carencia, es la fuerza que impulsa la creación [todo lo que hacemos viene de una carencia, incluso una ameba, un organismo unicelular movido por una carencia].

Podemos dar una cita del Dr. Laitman aquñi que dice:

«Este mundo lo que se necesita es llenado. En la espiritualidad lo que nos falta es la carencia.»

Para finalizar con la fase 1 observaremos en su desarrollo un echo extremadamente importante.

Cuando la luz actúa sobre el deseo, esta le aporta sensaciones:

  1. El Llenado, la sensación del placer y la luz. Pero como vimos, en esta fase el creado no percibe esta sensación  pues no tiene un deseo independiente de la luz antes de recibirla.  La expansión de la Luz en el deseo como vimos anula la sensación como una vela dentro de la antorcha. si quiero conseguir la un deseo independiente de la luz, necesito otro tipo de sensación que pueda desarrollar la carencia por la luz.
  2. Sensación del dador – En el momento que la Luz entra en el kli comienza a sentir no solo lo que recibe directamente de la Luz sino también la sensación de que «alguien» le está otorgando. Y comienza a desarrollar la carencia por ese alguien.  Esto es similar al Padre que le da a un hijo un dulce. Inicialmente el hijo sólo se ocupa del chocolate. Pero más tarde comienza a reconocer que viene del padre y le da las gracias. Es decir que comienza a verlo como una fuente de llenado.

En este momento se puede decir que la vasija comienza a tener una acción por si misma. Siente que no es el dador, el otorgante y quiere alcanzarlo, conocerlo, saber quién es, por qué le ama, por qué me le quiere dar todo y lo más fundamental, qué se siente siendo Él. Todas estas preguntas van a impulsar las siguientes fases del desarrollo del deseo.

3. Bejinat Bet. Fase 2

Apertura a la sabiduría de la Cabalá,  item 5

“Le sigue Bjiná Bet (segunda fase), puesto que al final el Kli de Jojmá prevalece en equi­valencia de forma con la Luz Superior dentro de sí. Esto significa que surge dentro de sí un deseo de otorgar al Emanador, de acuerdo con la naturaleza de la Luz que se encuentra adentro, y que representa por completo la cualidad de otorgamiento. Entonces, utilizando este deseo que se ha despertado dentro, se extiende una nueva Luz hacia él desde el Emanador, llamada Or Jasadim (Luz de Misericordia). Como resultado de esto, se separa casi completamente de Or Jojmá que el Creador le había impreso, ya que Or Jojmá puede ser recibida sólo dentro de su Kli, el cual consiste de un deseo de recibir que ha crecido hasta su máxima expresión.

De este modo, la Luz y el Kli en Bjiná Bet terminan difiriendo de aquéllos en Bjiná Alef, ya que aquí el Kli consiste del deseo de otorgar. La Luz que está adentro es considerada Or Jasadim; ésta es una Luz que viene de la fuerza del Dvekut (adhesión) del ser emanado dentro de su Emanador, pues su deseo le guía hacia la equivalencia de forma con éste. Además, en la espiritualidad la equivalencia de forma es Dvekut.”

Como vimos al final de la fase 1, la Luz desarrolla en el deseo la importancia de la equivalencia de forma con el emanador (Luz, Creador). Es la sensación que existe un factor superior del que dependo absolutamente. Esta la carencia le lleva a la sensación de placer vendrá por la adhesión a él – El creado siente placer de ser como el superior – placer de otorgamiento.

A esta fase se le llama Biná y la luz que se siente en su interior es la Luz de Jasadim.

Este es el primer deseo el primer movimiento hacia el Creador: El deseo de parecerse a Él- de estar en equivalencia de forma. Este deseo es muy especial- es una adición para ¡la carencia original!

Así pues en esta fase la vasija descubre la propiedad de otorgamiento y su desarrollo llega del deseo de querer conocer al Creador.

Si pensamos en el desarrollo psicológico en nuestro mundo, veremos que en una primera fase todo nos llega por la carencia natural original de ser llenados. Pero si realmente queremos desarrollarnos, para tener algo propio, necesitamos una conexión con el Creador, con la cualidad de otorgamiento. En ese momento se comienzan a revelarse las dificultades que supone ese conocimiento. Aparecen las confusiones, malas sensaciones, falta de entendimiento…. No importa lo que la persona sienta, Lo único importante en esta fase es mantenerse siempre en conexión con la fuente, (no hay nadie aparte de Él) que todas las sensaciones  que vienen (buenas o malas) sean para conocer precisamente esa fuente de otorgamiento.

Algo importante que hay que explicar en este momento es que el desarrollo de las fases aunque lo hacemos linealmente, se parece más a un desarrollo concéntrico en el que cada fase va añadiendo cualidades sin que se pierdan las anteriores. Las formas se desarrollan unas sobre otras y nada se pierde en el desarrollo espiritual.

Esto es una ley : «No hay nada superfluo en la espiritualidad» – todos los discernimientos internos que hace el deseo se guardan, y precisamente  gracias a ellos y sobre ellos aparece un nuevo desarrollo.

Para finalizar esta fase, varios problemas surgen en ella durante su desarrollo al querer  parecerse a la raíz y ser otorgante:

  1. No tiene lo que dar
  2. No puede crear de la nada lo que dar.
  3. No puede dar como el Shoresh.
  4. No tiene a quien dar.

4. Bejinat guimel. Fase 3

Apertura a la sabiduría de la Cabalá, item 5

«Luego le sigue Bjiná Guimel (tercera fase). Una vez que la Luz se hubo disminuido y convertido en Or Jasadim dentro del ser emanado, sin nada de Jojmá, sabiéndose que Or Jojmá es la esencia del ser Creado, al final de Bjiná Bet despierta y arrastra dentro de sí cier­to grado de Or Jojmá, para que ésta brille dentro de su Or Jasadim. Este “despertar” volvió a extender una cierta medida del deseo de recibir, que forma un nuevo Kli llamado Bjiná Guimel o Tifféret. Y la Luz que se encuentra dentro se llama “Luz de Jasadim en iluminación de Jojmá”, ya que la mayor parte de esa Luz es Or Jasadim, y una parte menor es Or Jojmá

En la fase 3 el Deseo que quiere asemejarse al Creador como en la Fase 2 y recibe la luz del Creador de nuevo, como en la fase 1.

Esto quiere decir que de nuevo tenemos llenado como en la fase 1 pero a diferencia de esta, aquí este llenado tiene el objetivo de ser otorgado al Creador. Este realmente es un nuevo estado cuya cualidad es la de recibir con la intención de otorgar.

A este fase se le llama Zeir Anpin o Tiferet- y la luz que se siente en ella es la Luz de Jasidim en la iluminación de Jojma, es decir que la intención es otorgar, disfrutar del otorgamiento al superior, por medio de la  recepción.

Al final del desarrollo en la fase 3 – una vez más el deseo se examina en su interior y revisa quien es. 

Podemos decir que todo lo que el deseo realiza es un proceso de definición a si mismo, de entendimiento sobre quien es en relación al Creador.

Nuevas preguntas surgen aquí:

  • ¿Quién es el creado? ¿es independiente? ¿qué le pertenece? ¿dónde esta su yo?
  • En este momento, el deseo siente que a pesar de todos los esfuerzos, el no ha decidido nada. El recibió, sintió que quería ser como el dador, sintió que quiere actuar como el dador pero todo esto fue inducido por la Luz
  • Aquí por primera vez empieza a sentir que el creador le desarrolla todos estos discernimientos no por la sensación misma, sino para SER EL CREADOR. Esta sensación no viene del Creador sino que tiene que crearla y sentirla dentro el CREADO.
  • Y esto es lo que hace la fase 4

Bejina Dalet. Fase 4

Apertura a la sabiduría de la Cabalá, item 5

“Por último llegó Bjiná Dálet (cuarta fase), ya que el Kli de Bjiná Guimel, al final, también “despertó” para atraer Or Jojmá completa, tal como ocurrió en Bjiná Alef. De este modo, este “despertar” se considera “anhelo” al grado del deseo de recibir en Bjiná Alef; e incluso sobrepasándolo, pues ahora ya ha sido separado de la Luz, puesto que la Luz de Jojmá ya no está revestida dentro de él (pero aspira a esta Or Jojmá). Así, la forma del deseo de recibir ha sido determinada por completo, ya que el Kli se determina siguiendo la expansión de la Luz, y la partida (de la Luz) de allí. Luego, cuando retorne, recibirá la Luz nuevamente. De esto se desprende que el Kli precede a la Luz. Y ésta es la razón por la cual esta Bjiná Dálet es considerada la conclusión del Kli, y se llama Maljut (Reino).”

En esta fase, el Deseo quiere disfrutar de la conexión con el dador de placer. Su placer propio que recibe de Él es solamente el medio para conectarse a Él. Esto significa que el deseo descubre en acción, cual es el estado de ser otorgante como el Creador y quiere disfrutar de ello.

Lo absolutamente especial de este momento es que este es un deseo que nace del CREADO.

Hasta aqui todos los deseos llegaron de una u otra manera, directos o circundantes del Creador. En la fase 4 el Creado definió su deseo mismo, independiente, y por es por eso que solo en esta Fase es llamado CREADO.

A esta Fase se le llama Maljut de ain sof (reino) 

 

Cuadro de relaciones de las fases:

 

Fases

Sefirots Mundos Partzufim Luces HaVaYa Creados
Shoresh 0 Keter Adam Kadmon Galgalta Yehidá Punto de la Yud

Raíz

Alef 1

Jojma Atzilut Ab Jaiá Yud Inanimado
Bet 2 Biná Beriá Zag Neshamá Hey

Vegetativo

Guimel 3

Zeir Anpin Yetzirá Ma Ruaj Vav Animado
Dalet 4 Maljut Asiá Bon Nefesh Hey

Hablante

La retirada de las luces del Partzuf y el mundo de AK

TaNTA (Taamim, Nekudot, Tagin, Otiot)  

Ahora estudiaremos el proceso de expansión de la Luz dentro del Partzuf y su retirada.  TaNTA es una abreviatura que usan los cabalistas para expresar las impresiones del Kli (vasija), el deseo de recibir, desde la entrada de la Luz hasta su salida.

Apertura a la sabiduría de la Cabalá,  punto 48

48)  “Esta es la razón por la cual distinguimos dos tipos de niveles en cada Partzuf: Teamim y Nekudot. Esto se debe a que las primeras diez Sfirot de Guf que emergen en cada Partzuf se llaman Teamim; en tanto que los niveles que emergen en el Partzuf a medida que éste se purifica, luego de que el Masaj ha comenzado a purificarse, y hasta que alcanza el Pe de Rosh, se denominan Nekudot.”

Las Luces ingresan dentro del Partzuf una por una, y de la misma manera se van. Las Luces que llenan el interior del Partzuf, desde el Pe hasta el Tabur, se llaman “Teamim” (sabores), en tanto que las Luces que salen del Guf del Partzuf son llamadas “Nekudot” (puntos) (Ver Diagrama No 11). Estas Luces son llamadas así porque al salir del Guf descubren la oscuridad, “el punto negro”.

Apertura a la sabiduría de la Cabalá   ,  punto 49

“49) Los Reshimot que quedan abajo, en el Guf, luego de la partida de las Luces de Teamim, se llaman Taguín; y las Reshimot que quedan de los niveles de Nekudot se llaman Otiot, las cuales son Kelim. Además, los Taguín que son los Reshimot de las Luces de Teamim, se amurallan encima de las Otiot y de los Kelim, y los sustentan.”

Cada Luz que estuvo en el interior del Partzuf y no está más, deja tras de sí una impresión. La impresión de la Luz de Teamim es llamada “Taguín” (Coronas), y la impresión de la Luz de Nekudot es llamada “Otiot” (Letras). Estas impresiones son carencias nuevas que son sentidas en el Guf añadidas sobre su carencia general.

En el Guf existe un deseo general que nunca desaparece y las impresiones de la Luz que se retiraron son percibidas en él como una adición de carencia la cual proviene de la sensación, por cuanto antes tuvo placer – tuvo la posibilidad de ser el otorgante – y ahora no es capaz de serlo.

Así, además de la Luz directa, la Luz retornante, la Luz interna y la Luz circundante, discernimos la existencia de la Luz de “Teamim” y la Luz de “Nekudot”. A la Luz que se extiende y que es recibida en el interior del Guf se la llama “Teamim”; en tanto que a la Luz que sale del Guf, dentro de la restricción, se la llama “Nekudot”.

Leeamos ahora este fragmento de los Grados de la escalera, TaNTA de Rabash

«y el consejo es que eleves la importancia y será tan importante como Tagín. O sea como «marca (tag) en su cabeza». Es decir en el lugar en donde anteriormente estaba como aspecto de polvo, eleva su importancia como una corona en su cabeza. Entonces el Nefesh DeKdusha se expande en las Otiot, osea en el Guf, que el Guf se llama «Otiot», como ya es sabido. O sea que la santidad se expande desde un aspecto de fuerza a uno de hecho, que se llama «Otiot y Guf»».  [Rabash, Grados de la escalera,   TaNTA]

las Otiot son Kelim: justamente cuando la Luz se retira hay lugar para renovación y trabajo.

«Hay un mandato que dice que cada individuo debe escribir la Torá para sí mismo. Con respecto a la interioridad de la Torá, el objetivo es que el individuo debe pasar en su interioridad todos los estados escritos en la Torá de Moisés. Hablamos de niveles espirituales, que debemos activar mediante la corrección de nuestra naturaleza egoísta y descubrir qué sucede en ellos. La escritura de la Torá se lleva a cabo en el corazón, en nuestros deseos. En cada eslabón descubrimos nuevos deseos y en ellos debemos escribir «Teamim, Nekudot, Taguín y Otiot» (TaNTA). Después de haber terminado de escribir TaNTA en todos nuestros deseos, llegamos a la plena adhesión al Creador.»(Rav Laitman, Sabor de la Luz, la interioridad de la Torá).

Reshimot De Aviut (Reminiscencia de espesor) y Reshimot De Itlabshut  (Reminiscencia de vestidura)

Después de la purificación del Masaj (pantalla) se elevan al Rosh del Partzuf, dos Reshimot (unidades de información):

a) la Luz que alumbro el eslabón anterior

b) un nuevo espesor que sobre él se puede hacer un nuevo cálculo con respecto al otorgamiento. 

  • Reshimo De Itlabshut: Reshimot de la Luz que había en la vasija y salió.
  • Reshimo De Aviut: Reshimot de la vasija, en la pantalla que quedo para usarla.

¿En general, que es el Reshimo? (¿Cómo está relacionado conmigo?)

  • El Reshimo del próximo nivel, nos atrae al siguiente estado, de hecho, es el principio de la vasija. Todo lo que me falta ahora es agregar otro deseo, anhelo. 
  • El concepto «Reshimo» deriva de la palabra «Roshem» (impresión) y nos provee información sobre los estados del creado.
  • Los cabalistas nos explican que lo único que existe es el deseo de recibir que es la materia de la Creación, y la forma en la que se debe vestir ese material que es el Reshimo.
    • El creador creó el deseo de recibir por medio de la Luz, que influyo al deseo y creo en él distintas formas de placer, las cuales se imprimieron en el interior del deseo y se llaman «Reshimo».
    • Si es así, «Reshimo» es una forma de placer que imprimió la Luz en el deseo.  Estas formas existen en nosotros y se revelan progresivamente, una tras otra. El Reshimo que se revela, nos hace querer volver a esa forma de placer de la Luz que se imprimió dentro del deseo en un principio. Cuando realizamos el «Reshimo» y se revela su placer, inmediatamente se despierta el próximo Reshimo y nuevamente buscamos el camino para realizarlo.
    • La Sabiduría de la Cabalá nos explica cómo realizar estas Reshimot que se sellaron en nosotros en el proceso de secuencia desde el infinito hasta nuestro mundo, y subir de esta forma de nuevo a la escalera que ya esta lista y definida ante nosotros.
    • Entonces, ¿Cómo avanzamos y subimos a la escalera? Sobre esto hablaremos en la próxima parte.

Formación de los 5 Partzufim de Adam Kadmón

Hasta ahora hemos aprendido acerca del primer Partzuf que salió luego del Olam HaTzimtzum (mundo de la restricción). El total de todos los actos en el Partzuf con los Reshimot 4/4 – el ingreso de las Luces al Partzuf, la partida y la purificación del Partzuf en los Reshimot 4/3, se llaman Partzuf Galgalta”.

La palabra “Galgalta” se deriva de la palabra Gulgolet (cráneo). Este nombre alude a que este es el Partzuf de Kéter, el Partzuf más alto. Galgalta es la medida de la primera porción de Luz, la acción del primer otorgamiento que llevó a cabo Maljut de Ein Sof luego del Tzimtzum Álef a partir de la decisión de asemejarse al Creador

Maljut de Ein Sof puede trabajar con cada una de sus  fases: Dálet, Guimel, Bet, Álef y Shóresh. En ella existen cinco Reshimot y, al trabajar con cada uno de ellos, salen cinco Partzufim. En el Partzuf Galgalta, Maljut de Ein Sof recibió con la intención con el fin de otorgar hasta Tabur, el Partzuf se purificó como resultado del “Bitush Pnim uMakif”, en tanto que el Masaj regresó al Pe de Rosh de Galgalta, que por su parte trabajó de acuerdo a los Reshimot 4/4 y luego de su purificación se quedaron en ella los Reshimot 4/3. Sobre estos Reshimot salió un Partzuf nuevo llamado AB

En el Partzuf AB, Maljut de Ein Sof trabaja con tres fases y no con cuatro de acuerdo a como era antes. Por lo tanto, si en Galgalta el Zivug se hizo en Pe de Rosh, en el Partzuf AB el Zivug se hizo en un grado por debajo de Pe, de manera que en relación a Galgalta se llama “Jazé” (pecho)

También en Rosh del Partzuf AB se hizo un Zivug de Akaá sobre la Luz directa, solo que a diferencia del Partzuf Galgalta, la Luz llega a AB a través de Galgalta.

El Masaj que se detiene en el nuevo Pe, hace un Zivug de Akaá sobre la Luz  directa  recibiendo  la Luz  con  el propósito  de otorgar  (sobre  los Reshimot 4/3). Luego de la recepción de la Luz, se hace un Bitush Panim uMakif. Como resultado de este Bitush las Luces abandonan el Partzuf, el Masaj se purifica desde el Tabur hasta el Pe y se recibe la decisión de continuar trabajando con los Reshimot en un grado menor al estado previo, con los Reshimot Guimel (3) de Hitlabshut y Bet (2) de Aviut [3/2] (Ver  Diagrama No 15).

 

Ahora explicaremos por qué el Reshimó de Hitlabshut del Partzuf de AB reconoció el Reshimó de Hitlabshut del Partzuf Galgalta (Dálet de Hitlabshut en los dos casos), sin embargo el Reshimó de Hitlabshut del tercer Partzuf cambia a Guimel de Hitlabshut.

La Luz de Ein-Sof se extiende hacia el Toj de Galgalta; un Reshimó que se desprende de este (Dálet de Hitlabshut) llega al Partzuf AB. Este Partzuf  trabaja con el Reshimó Guimel de Aviut y de acuerdo con el nuevo deseo que se encuentra en él, la Luz que atrae hacia su interior es distinta a la Luz que está en el Partzuf de Galgalta. La Luz siempre es atraída de acuerdo al deseo. Es por eso que la Luz que se extiende en el Partzuf AB es menor a la Luz que está en Galgalta, en tanto que la Luz que se extiende en el tercer Partzuf, la cual es llamada SaG, es mucho menor. La Luz que es atraída hacia el Partzuf de SaG llega a través de dos Partzufim previos; esa es la Luz de Guimel de Hitlabshut y Bet de Aviut.

En el Partzuf de SaG, Maljut trabaja con Aviut Shóresh, Álef y Bet. De la misma manera SaG, en semejanza a los Partzufim que le preceden,   se expande en “Toj”; partiendo de su Pe, colocado  en contraste  al Jazé del Partzuf de AB, hasta el Tabur (Ver Diagrama No 15). Luego de la expansión de la Luz en el Partzuf de SaG también se hace en él un Bitush Panim uMakif, dando como resultado que SaG se purifique y decida descender un grado en la recepción de la Luz. Por ende, los Reshimot que quedaron luego del Partzuf de SaG, son los Reshimot Bet de Hitlabshut y Álef de Aviut (2/1).

El Partzuf siguiente, el Partzuf de MA, concreta los Reshimot 2/1, también él se extiende desde su Pe, el cual viene en contraste al Jazé del Partzuf anterior, y también se hace en él un Bitush Panim uMakif y este también se purifica. Similarmente al resto de los Partzufim, MA desciende luego de su purificación al lugar de su Jazé donde da origen al último Partzuf llamado “Partzuf de Bon”. Este Partzuf sale sobre los Reshimot Álef de Hitlabshut y Shóresh de Aviut (1/Shóresh); es decir que trabaja con el Aviut Shóresh que es la última Aviut.

En la salida de los cinco Partzufim: Galgalta, AB, SaG, MA y Bon, Maljut de Ein-Sof termina su trabajo con todos los grados que la preceden. Aquellos cinco Partzufim son cinco medidas de la Luz que Maljut de Ein Sof recibió con el propósito de otorgar al Creador. De esta forma es como Maljut de Ein Sof concretó toda la posibilidad de recibir con el fin de otorgar. Estos cinco Partzufim son llamados en conjunto: el “mundo de Adam Kadmón

A continuación del proceso, el mundo de Adam Kadmón servirá como modelo para la construcción de un sistema espiritual diferente en un mundo diferente, el mundo de Atzilut, un sistema llamado “Adam”. El sistema de “Adam” será construido según la estructura y forma del mundo de Adam Kadmón, y de aquí es de donde deriva el nombre del mundo de Adam Kadmón.

El Sof del Partzuf

Luego de la salida de los cinco Partzufim del mundo de Adam Kadmón toda la parte que va desde el Pe de Galgalta hasta su Tabur se llenó completamente, más una parte del “Sof”, la cual es la Maljut misma, quedó vacía por completo de la Luz de Jojmá. No obstante, en el Sof del Partzuf había Luz de Jasadim que fue la que causó un poco de satisfacción por el hecho de que Maljut no utiliza su deseo, sino que quiere asemejarse al Creador, pero aparte de esta pequeña satisfacción no hubo nada en el “Sof”. Así que lo importante de la recepción de la Luz es precisamente el “Sof” del Partzuf, en Maljut misma; es decir, precisamente en esta parte se encuentra lo principal de la posibilidad de complacer al Creador y de equipararse con Él. La cumbre de la equivalencia de forma, la cual es llamada “Dvekut” (adhesión), será adquirida solamente cuando el “Sof” de Galgalta pueda recibir con el fin de otorgar, pero en el mundo de AK aun no  existe un Masaj  que posibilite recibir con el fin de otorgar también en el Sof del Partzuf.

La potencia del Masaj en el mundo de Adam Kadmón permite solamente el rechazo de la Luz y  no  su  penetración directamente en el “Sof”. De todos los Partzufim de Adam Kadmón solamente Galgalta pudo llenar el “Sof” con la Luz de Jasadim. El resto de los Partzufim, las porciones más débiles del otorgamiento, no pudieron  trabajar  con  él  en absoluto.

El “Sof” de Galgalta representa toda la parte que quedó vacía en Maljut de Ein-Sof sin ninguna acción de otorgamiento. Cuando esta parte pueda pasar de un estado de vacío a un estado de llenado, esto será “Gmar HaTikún” (fin de la corrección); es decir, el fin de la corrección de Maljut de Ein-Sof en su semejanza al Creador.

En la siguiente presentación podréis ver la formación de los 5 partzufim de AK:

https://kabacademy.eu/es/content/uploads/sites/10/2018/01/5-Partzufim-de-AK.pdf

Camino de la Torá y  camino de sufrimientos

Leer del Artículo “La esencia de la religión y su propósito” de Baal HaSulam el punto: «Dos caminos: El camino del sufrimiento y el camino de la Torá».

  • Explicación sobre » El camino del sufrimiento y el camino de la Torá»
    • camino del sufrimiento – largo camino y lleno de sufrimientos y dolores, hasta que lleguemos a tener conciencia de la elección hacia el bien y detestar el mal. En el los reshimo se van revelando y presionan para su revelación. Si el trabajo para esa revelación no se realiza dicha presión se siente como mal. Beitó (A su tiempo)
    • camino de la Torá y mitzvot – camino placentero y bueno, capaz de capacitarnos a nuestro propósito en un corto plazo y sin sufrimientos. Los reshimo son revelados en su momento acelerando los tiempos (Ajishena)
    • Hay que decir que en la práctica, la revelación nos llegará de todas maneras de una u otra forma.

Fases de desarrollo

  1. El mal como fuerza motriz
    • El ego, la Inclinación malvada es lo único que se creó.
    • El ego empujó a la humanidad y fue la causa de su desarrollo.
    • En un cierto nivel de su desarrollo, el ego empieza a destrozar en vez de construir. Es el nivel de desarrollo en el que comienza a sentir la interdependencia absoluta y global de las partes de un sistema
  2. Conocimiento del mal – avance consiente e inconsciente

Leer del Artículo “La esencia de la religión y su propósito” de Baal HaSulam el punto: «Desarrollo consciente y desarrollo inconsciente».

La diferencia entre los dos métodos de desarrollo es muy visible. En el desarrollo consciente, el que se desarrolla sabe a dónde va, lo hace voluntariamente, y vive las dificultades en el camino como desafíos que hay que superar. En el desarrollo inconsciente, el que se desarrolla no entiende que es lo que debe hacer, odia las dificultades del camino, e incluso puede sentir dolor y frustración. El desarrollo inconsciente a veces puede ser  muy largo, si el que se desarrolla se niega a realizar el plan para el que fue creado.

Clip  percepción del trabajo al Creador  (2:01)

Resumen Lección 1 Curso «El encuentro entre los mundos»: Luz y Vasija»

Apertura de la Sabiduría de la Cabalá

Vídeo Clip :Sobre la importancia del estudio de la Apertura.

  • Es una de las 4 Introducciones al libro del Zóhar.
  • Contiene la descripción del desprendimiento de los mundos de arriba hacia abajo, con todos sus detalles.
  • Conoceremos un nuevo lenguaje (lenguaje de la Cabalá) . Al igual que cualquier ciencia tiene su lenguaje técnico. Aunque es más parecido al lenguaje musical que para conocerlo necesitas sentirlo primero e interpretarlo después.
  • Pero ¿Cómo debemos referirnos al estudio en común de la “Apertura a la sabiduría de la Cabalá”? Se puede entender solamente corrigiendo la intención, haciendo un cambio interior. No tenemos la posibilidad de entender el material con nuestro intelecto. Solo si el estudio se hace con el anhelo de comprender las cosas en su interpretación interna. El intelecto es solo como un medio para llegar a la sensación.
  • La verdad es que nosotros como Creados no somos conscientes que nos encontramos en realidad, que se describe en la Apertura SC

Descubrir la realidad superior

  • La sabiduría de la Cabalá es una Ciencia: La sabiduría de lo oculto ¿por qué de lo oculto? (alama)
  • La percepción es de acuerdo a la equivalencia entre atributos.
  • Para desarrollar esa parte oculta necesitamos un nuevo sentido adicional que desarrolle esos atributos en nosotros. 
  • Lo que descubrimos en este sentido es el Mundo Superior.
  • Bo-re. (Ven y ve) El Creador es una experiencia en el Creado. El ha creado la totalidad de la existencia: inanimado, vegetal, animado y hablante. Dirige, controla y domina cada detalle con una única fuerza, un solo propósito y pensamiento. Esta fuerza es Buena y benefactora.

Equivalencia de forma

  • La semejanza entre dos cuerpos se conoce en Cabalá como “equivalencia de forma”. Esta equivalencia describe el estado en el que dos cuerpos, dos deseos, dos personas, o el Creador y una persona, permanecen  cada uno acorde a su naturaleza, sin hacer ningún cambio,  pero con  atributos  e  intenciones similares.
  • Equivalentes en el atributo de otorgamiento.
  • Anhelar el estado de perfección que se encuentra en la cualidad de otorgamiento.
  • En  el  hombre  está  impreso  un  impulso  interminable de alcanzar la perfección del Creador. Este impulso proviene del pensamiento del Creador hacia nosotros – pensamiento llamado “el Plan de la Creación el cual es beneficiar a Sus creados”.

El Pensamiento de la Creación

Apertura SC punto 1

“la Idea (o Pensamiento) de la Creación consistía en deleitar a las criaturas de acuerdo con Su abundante generosidad. Por esta razón se imprimió en las almas un gran anhelo, un gran deseo de recibir Su abundancia.

Esto se debe a que el deseo de recibir es el Kli para la medida del deleite en esta abundancia, ya que la medida y fuerza del deseo de recibir la abundancia, corresponde precisamente con la medida de placer y deleite en la abundancia. Y están tan interconectadas, que son indivisibles excepto en cuanto a que el placer se relaciona con la abundancia, y el gran deseo de recibir la abundancia se relaciona con el receptor.”

El plan de la Creación y su desarrollo en tres Estados:

Estado 1: De arriba hacia abajo. La caída de los mundos hacia el ocultamiento en este mundo

Estado 2: El desarrollo del Deseo a través de la historia de la humanidad.

Estado 3: De abajo hacia arriba. La revelación de la fuerza Superior en el creado .

Algunos conceptos y su definición

  • Luz – todo lo que se recibe en el creado.
  • Kli – el deseo de recibir en el emanado.
  • Mundo (Olám) – Eelém (ocultamiento) sobre la Luz Superior.
  • Creador – Boré – Bo y Re, el grado al cual hay que llegar.
  • Torá – La Luz que reforma.
  • Mitzvot (preceptos) – corrección de los deseos.
  • Zaj (zakut) – cercano en sus cualidades a la Luz.
  • AV (aviut) – lejano en sus cualidades de la Luz.

El final de la acción se encuentra en el pensamiento inicial

La forma final existe desde el comienzo como la meta, y es la que determina lo que sucede en cada una de las fases. Por lo tanto, si logramos conocer el comienzo de la creación, podremos comprender mejor la realidad y evitaremos errores.

Podremos observar cualquier situación desde la perspectiva del Plan de la Creación y verlas como lo haría el Creador. Así lograremos avanzar correctamente, y pasaremos cada vez de un estado de carencia a otro mejor y más completo.

Luz y Kli

Vídeo Clip La importancia de la preparación de la vasija

Apertura SC punto 2

2) “Como ya hemos dicho, el deseo de recibir está innatamente incluido en el Pensamiento de la Creación, con todas sus denominaciones, a lo largo de la gran abundancia que Él había planeado impartirles. Y sabe que esto es lo que discernimos como Or (Luz) y Kli (vasija) en los Mundos Superiores. Necesariamente vienen entrelazados y descienden nivel por nivel.  Y el punto hasta el cual descienden los grados de la Luz de Su Rostro, saliendo de Él, es el punto de materialización del deseo de recibir contenido en la abundancia.”

  • No hay Luz sin Kli (no hay Creador sin creado)
  • La Luz y el Kli están incluidos siempre juntos y unidos entre sí. No se puede hablar de la Luz sin el Kli y viceversa.
  • En la sabiduría de la Cabalá siempre se habla sobre el Creador y el creado juntos, o sea, que el Creador es cómo el creado consigue al Creador. La sabiduría de la Cabalá no trata del Creador mismo, el cual se denomina “Atzmutó” (Su esencia).
  • Rabí Zusha dijo – “cada día tengo un nuevo Creador”, o sea, con la revelación de una nueva parte del deseo y su corrección se me revela el Creador de otra forma, más profunda.
  • En esto hay una gran diferencia entre la sabiduría de la Cabalá y la filosofía. Esta última habla sobre la espiritualidad, pero no llega al alcance propio, mientras que la Cabalá trata solo de lo que alcanza el individuo.

La Luz precede al Kli, el Kli precede a la Luz:

  • En el desprendimiento del Kli y la Luz juntos, la Luz actúa sobre el Kli y como resultado de ello lo transforma. La Luz es el que desarrolla al Kli. Este discernimiento con el nombre “la Luz precede al Kli”. Es decir que en toda fase de desarrollo del deseo en el desprendimiento de los mundos y en el desarrollo de nuestro mundo: la Luz precede al Kli, la Luz actúa sobre el Kli sin preguntar su deseo, estando el Kli completamente inconsciente, y lo desarrolla. De aquí resulta que en toda nuestra evolución durante miles de años en este mundo, no teníamos alternativa, a pesar de que no lo sentíamos así. Todos los estados que hemos pasado estaban predeterminados y nosotros no pasamos por ellos sino que hemos sido traspasados por ellos. 
  • En el ascenso de abajo hacia arriba se invierte el orden, el Kli precede a la Luz. ¿Qué significa esto? También en el ascenso de abajo hacia arriba todos los actos están predeterminados y es la Luz la que hace los cambios en nosotros, hay un solo propósito y todo llegará al mismo fin, pero la diferencia está en que en el ascenso de abajo hacia arriba, la Luz no hará acción ninguna sobre el deseo, a no ser que el deseo se lo pida.
  • Esto es lo que se denomina “medio shekel”.

Clip: “¿Por qué no pediste?”

 

Vídeo Clip Lección 1 Curso Intermedios «El encuentro entre los mundos»: Luz y Vasija

Bitush (Impacto) de la Luz interior con la circundante

El Bitush (Impacto) y la Purificación del Masaj

El encuentro de la Luz circundante con el Tabur del Partzuf se llama “Bitush Pnim uMakif” (impacto frontal y circundante). Estas dos Luces, interna y circundante, presionan sobre el Tabur queriendo continuar extendiéndose al Sof del Partzuf. A fin de esclarecer el asunto del “Bitush” ampliaremos un poco el tema de la recepción de la Luz dentro del Partzuf.

La Luz directa llega al Partzuf (Ver Diagrama No 12, 1ª etapa) y es rechazada por el Masaj (2ª etapa). Luego de la expulsión de la Luz, el Masaj realiza un cálculo (3ª etapa), y la Luz empieza a expandirse gradualmente dentro del Partzuf. De hecho, el Partzuf tiene dos tipos de Masajim (pantallas).

  1. El Masaj ubicado en el Pe que rechaza la Luz sin cesar (4ª etapa). Este Masaj cuida que el Tzimtzum Álef no reciba con la intención con el fin de
  2. El Masaj que recibe la Luz con el fin de Este Masaj comienza a descender gradualmente del Pe hacia abajo. En principio desciende a la fase de Shóresh al interior del Partzuf, la cual es la Sfirá de Kéter. Desde allí desciende hasta la fase 1;  es decir, la Sfirá de Jojmá; de allí continúa descendiendo hasta    la fase 2; o sea, la Sfirá de Biná; y desde allí hasta la fase 3 que  es la Sfirá de Zeir Anpin; y desde ZA el Masaj desciende hacia la fase 4 del Toj del Partzuf, hacia Maljut hasta el Tabur, y allí se  detiene (5ª  etapa).

Cuando el Masaj desciende desde el Pe hasta  el  Tabur todas las Sfirot del Toj del Partzuf se llenan con las Luces de NaRaNJaY. La suma de todas las Luces que llenan el Toj del Partzuf es prácticamente Luz interior, los Teamim, la impresión de la recepción.

Luego de que el Masaj se detiene en el Tabur, la Luz circundante llega para presionar sobre él  en lo que llamamos “Bitush Panim  u Makif”. Dicho Bitush (impacto) hace que el Masaj se quede en el Tabur “para purificarse”, y de la misma forma gradual en que recibió las Luces, así empieza a expulsarlas. Primero abandona la Luz de la fase 4, luego de esto la de la fase 3, y así sucesivamente, hasta la fase Shóresh (Ver Diagrama No 13). El Masaj sube nuevamente al Pe y “echa” a toda la Luz del Partzuf. Las Luces que salen del Guf son llamadas “Nekudot” (puntos).

Después de la purificación del Masaj y su ascensión de Tabur a Pe, se unen los dos Masajim (pantallas), el que rechaza y el que recibe, juntos en Pe de Rosh. El primer Masaj es el que se encuentra en Pe de Rosh y evita que el Guf reciba la Luz con el fin de recibir. El segundo Masaj es el que calcula y posibilita la recepción de la Luz con el fin de otorgar.

Antes de la purificación del Masaj el Kli estaba en el estado cuatro de Hitlabshut (vestidura) y cuatro de Aviut (Espesor). La intención del Masaj era trabajar con las cuatro fases de Aviut del Kli a fin de recibir cuanto más fuera posible con el propósito de otorgar. Ahora, con su regreso al Pe de Rosh, el Masaj ya piensa distinto; este siente que nuevamente es incapaz de trabajar con la fase 4 decidiendo trabajar con una fase diferente, menor que ella. En el lugar del Reshimó cuatro de Hitlabshut y cuatro de Aviut, con el cual trabajó antes, se descubrió el Reshimó cuarto de Hitlabshut y tercero de Aviut (Ver Diagrama No 13).

Tal como se dijo anteriormente, en el Kli existen dos impresiones: la impresión de la Luz; y la impresión del Kli; es decir, el “Reshimó de Hitlabshut” y el “Reshimó de Aviut” correspondientemente. Luego de la purificación del Masaj y su ascenso a Pe de Rosh, en el Kli quedó un recuerdo de la Luz que estuvo en el estado previo. Este recuerdo es el Reshimó de la Luz, el cual permanece sin cambio – cuatro de Hitlabshut. En contraste conesto, el Reshimó del Kli se ha disminuido. El Kli siente que no puede quedarse en su estado precedente porque le toca trabajar en un nivel menor a él, en el grado tres de Aviut. Si Maljut de Ein Sof, situada debajo de la fase de Shóresh, Álef, Bet y Guimel, al comienzo quiso trabajar con toda su Aviut para recibir todo lo que llega a ella, ahora tendría que trabajar en un nivel de Aviut menor, en el grado tres de Aviut. La Aviut, el deseo de Maljut de Ein Sof, es el resultado de las fases anteriores a ella: Guimel, Bet, Álef, Shóresh. Por lo tanto ahora, luego de la purificación de la fase 4, del uso de la mayor parte de la Aviut que se encuentra en ella, Maljut de Ein Sof decide trabajar con la fase 3 lo cual significa, que la impresión de la fase 4 de las tres fases precedentes a ella, de la Luz, es ahora como la fase 3 en contraste con la 4.

Con esto, el primer Partzuf finalizó su trabajo. Este recibió con el fin de otorgar en todo lo posible, se purificó y regresó a su estado anterior con los Reshimot 4/3, antes de su expansión.

Cinco Partzufim en el mundo de Adam Kadmón

Hasta ahora hemos aprendido acerca del primer Partzuf que salió luego del Olam HaTzimtzum (mundo de la restricción). El total de todos los actos en el Partzuf con los Reshimot 4/4 – el ingreso de las Luces al Partzuf, la partida y la purificación del Partzuf en los Reshimot 4/3, se llaman Partzuf Galgalta”.

La palabra “Galgalta” se deriva de la palabra Gulgolet (cráneo). Este nombre alude a que este es el Partzuf de Kéter, el Partzuf más alto. Galgalta es la medida de la primera porción de Luz, la acción del primer otorgamiento que llevó a cabo Maljut de Ein Sof luego del Tzimtzum Álef a partir de la decisión de asemejarse al Creador

Maljut de Ein Sof puede trabajar con cada una de sus  fases: Dálet, Guimel, Bet, Álef y Shóresh. En ella existen cinco Reshimot y, al trabajar con cada uno de ellos, salen cinco Partzufim. En el Partzuf Galgalta, Maljut de Ein Sof recibió con la intención con el fin de otorgar hasta Tabur, el Partzuf se purificó como resultado del “Bitush Pnim uMakif”, en tanto que el Masaj regresó al Pe de Rosh de Galgalta, que por su parte trabajó de acuerdo a los Reshimot 4/4 y luego de su purificación se quedaron en ella los Reshimot 4/3. Sobre estos Reshimot salió un Partzuf nuevo llamado AB

En el Partzuf AB, Maljut de Ein Sof trabaja con tres fases y no con cuatro de acuerdo a como era antes. Por lo tanto, si en Galgalta el Zivug se hizo en Pe de Rosh, en el Partzuf AB el Zivug se hizo en un grado por debajo de Pe, de manera que en relación a Galgalta se llama “Jazé” (pecho) (Ver Diagrama No  14).

También en Rosh del Partzuf AB se hizo un Zivug de Akaá sobre la Luz directa, solo que a diferencia del Partzuf Galgalta, la Luz llega a AB a través de Galgalta.

El Masaj que se detiene en el nuevo Pe, hace un Zivug de Akaá sobre la Luz  directa  recibiendo  la Luz  con  el propósito  de otorgar  (sobre  los Reshimot 4/3). Luego de la recepción de la Luz, se hace un Bitush Panim uMakif. Como resultado de este Bitush las Luces abandonan el Partzuf, el Masaj se purifica desde el Tabur hasta el Pe y se recibe la decisión de continuar trabajando con los Reshimot en un grado menor al estado previo, con los Reshimot Guimel (3) de Hitlabshut y Bet (2) de Aviut [3/2] (Ver  Diagrama No 15).

Ahora explicaremos por qué el Reshimó de Hitlabshut del Partzuf de AB reconoció el Reshimó de Hitlabshut del Partzuf Galgalta (Dálet de Hitlabshut en los dos casos), sin embargo el Reshimó de Hitlabshut del tercer Partzuf cambia a Guimel de Hitlabshut.

La Luz de Ein-Sof se extiende hacia el Toj de Galgalta; un Reshimó que se desprende de este (Dálet de Hitlabshut) llega al Partzuf AB. Este Partzuf trabaja con el Reshimó Guimel de Aviut y de acuerdo con el nuevo deseo que se encuentra en él, la Luz que atrae hacia su interior es distinta a la Luz que está en el Partzuf de Galgalta. La Luz siempre es atraída de acuerdo al deseo. Es por eso que la Luz que se extiende en el Partzuf AB es menor a la Luz que está en Galgalta, en tanto que la Luz que se extiende en el tercer Partzuf, la cual es llamada SaG, es mucho menor. La Luz que es atraída hacia el Partzuf de SaG llega a través de dos Partzufim previos; esa es la Luz de Guimel de Hitlabshut y Bet de Aviut.

En el Partzuf de SaG, Maljut trabaja con Aviut Shóresh, Álef y Bet. De la misma manera SaG, en semejanza a los Partzufim que le preceden,   se expande en “Toj”; partiendo de su Pe, colocado  en contraste  al Jazé del Partzuf de AB, hasta el Tabur (Ver Diagrama No 15). Luego de la expansión de la Luz en el Partzuf de SaG también se hace en él un Bitush Panim uMakif, dando como resultado que SaG se purifique y decida descender un grado en la recepción de la Luz. Por ende, los Reshimot que quedaron luego del Partzuf de SaG, son los Reshimot Bet de Hitlabshut y Álef de Aviut (2/1).

El Partzuf siguiente, el Partzuf de MA, concreta los Reshimot 2/1, también él se extiende desde su Pe, el cual viene en contraste al Jazé del Partzuf anterior, y también se hace en él un Bitush Panim uMakif y este también se purifica. Similarmente al resto de los Partzufim, MA desciende luego de su purificación al lugar de su Jazé donde da origen al último Partzuf llamado “Partzuf de Bon”. Este Partzuf sale sobre los Reshimot Álef de Hitlabshut y Shóresh de Aviut (1/Shóresh); es decir que trabaja con el Aviut Shóresh que es lal última Aviut.

En la salida de los cinco Partzufim: Galgalta, AB, SaG, MA y Bon, Maljut de Ein-Sof termina su trabajo con todos los grados que la preceden. Aquellos cinco Partzufim son cinco medidas de la Luz que Maljut de Ein Sof recibió con el propósito de otorgar al Creador. De esta forma es como Maljut de Ein Sof concretó toda la posibilidad de recibir con el fin de otorgar. Estos cinco Partzufim son llamados en conjunto: el “mundo de Adam Kadmón

A continuación del proceso, el mundo de Adam Kadmón servirá como modelo para la construcción de un sistema espiritual diferente en un mundo diferente, el mundo de Atzilut, un sistema llamado “Adam”. El sistema de “Adam” será construido según la estructura y forma del mundo de Adam Kadmón, y de aquí es de donde deriva el nombre del mundo de Adam Kadmón.

 

El Sof del Partzuf

Luego de la salida de los cinco Partzufim del mundo de Adam Kadmón toda la parte que va desde el Pe de Galgalta hasta su Tabur se llenó completamente, más una parte del “Sof”, la cual es la Maljut misma, quedó vacía por completo de la Luz de Jojmá. No obstante, en el Sof del Partzuf había Luz de Jasadim que fue la que causó un poco de satisfacción por el hecho de que Maljut no utiliza su deseo, sino que quiere asemejarse al Creador, pero aparte de esta pequeña satisfacción no hubo nada en el “Sof”. Así que lo importante de la recepción de la Luz es precisamente el “Sof” del Partzuf, en Maljut misma; es decir, precisamente en esta parte se encuentra lo principal de la posibilidad de complacer al Creador y de equipararse con Él. La cumbre de la equivalencia de forma, la cual es llamada “Dvekut” (adhesión), será adquirida solamente cuando el “Sof” de Galgalta pueda recibir con el fin de otorgar, pero en el mundo de AK aun no  existe un Masaj  que posibilite recibir con el fin de otorgar también en el Sof del Partzuf.

La potencia del Masaj en el mundo de Adam Kadmón permite solamente el rechazo de la Luz y  no  su  penetración directamente en el “Sof”. De todos los Partzufim de Adam Kadmón solamente Galgalta pudo llenar el “Sof” con la Luz de Jasadim. El resto de los Partzufim, las porciones más débiles del otorgamiento, no pudieron  trabajar  con  él  en absoluto.

El “Sof” de Galgalta representa toda la parte que quedó vacía en Maljut de Ein-Sof sin ninguna acción de otorgamiento. Cuando esta parte pueda pasar de un estado de vacío a un estado de llenado, esto será “Gmar HaTikún” (fin de la corrección); es decir, el fin de la corrección de Maljut de Ein-Sof en su semejanza al Creador.

 

Valor inverso de las Luces y las Vasijas

Teamim y Nekudot

Las Luces ingresan dentro del Partzuf una por una, y de la misma manera se van. Las Luces que llenan el interior del Partzuf, desde el Pe hasta el Tabur, se llaman “Teamim” (sabores), en tanto que las Luces que salen del Guf del Partzuf son llamadas “Nekudot” (puntos) (Ver Diagrama No 11). Estas Luces son llamadas así porque al salir del Guf descubren la oscuridad, “el punto negro”.

Cada Luz que estuvo en el interior del Partzuf y no está más, deja tras de sí una impresión. La impresión de la Luz de Teamim es llamada “Taguín” (Coronas), y la impresión de la Luz de Nekudot es llamada “Otiot” (Letras). Estas impresiones son carencias nuevas que son sentidas en el Guf añadidas sobre su carencia general.

En el Guf existe un deseo general que nunca desaparece y las impresiones de la Luz que se retiraron son percibidas en él como una adición de carencia la cual proviene de la sensación, por cuanto antes tuvo placer – tuvo la posibilidad de ser el otorgante – y ahora no es capaz de serlo.

Así, además de la Luz directa, la Luz retornante, la Luz interna y la Luz circundante, discernimos la existencia de la Luz de “Teamim” y la Luz de “Nekudot”. A la Luz que se extiende y que es recibida en el interior del Guf se la llama “Teamim”; en tanto que a la Luz que sale del Guf, dentro de la restricción, se la llama “Nekudot”.

Zivug de Akaa

Otro concepto que debemos conocer en este contexto es “Zivug de Akaá” (Acoplamiento de Golpe), que es la acción que ha sido realizada en Pe de Rosh del Partzuf. El Masaj que se ubica en el Pe es donde se produce el “golpe” en la Luz. El Masaj no quiere recibir la Luz y la devuelve a su parte trasera, solo luego de esto es que calcula en qué medida puede recibir la Luz; es decir, el Masaj golpea en la Luz y la rechaza y a pesar de esto, luego se lleva a cabo entre ellos un “Zivug” (acoplamiento), dando como resultado la siguiente relación: la Luz directa se viste dentro de la Luz retornante, y estas son recibidas en el interior del Partzuf. El término “Zivug de Akaá” consecuentemente indica la unión y la relación que se produce por medio del golpe. Ver Diagrama No 11

Por qué la acción del Masaj se llama Zivug de Akaa

El desarrollo y la adhesión al Creador viene precisamente de estos dos términos Zivug (acoplamiento) y Akaa (por golpe) que parecen contradecirse el uno al otro. Por un lado el creado rechaza la Luz  y por el otro la recibe de acuerdo al calculo que realiza el Rosh de recibir con el fin de otorgar.

De esta forma aunque existe la decisión de no recibir de acuerdo al Tzim tzum Alef, el creado al recibir el golpe de la luz directa que viene del Creador (Akaa) en el Masaj del Partzuf, rechaza esta hasta el punto que no puede otorgarle al Creador. Entonces, al mismo tiempo se produce el acoplamiento con la Luz directa que si puede recibirla con el propósito de otorgar al Creador (Zivug) que se convierte en Luz interna dentro del Toj. Por eso esta acción crucial del Partzuf  se denomina Zivug (acoplamiento) que viene gracias a la Akaa (golpe). 

Así pues en la acción del Masaj tenemos dos acciones que se contraponen: 

  • Por una parte el Creador: Quiere que el creado reciba, por que su deseo es beneficiar a su criatura con toda la abundancia . Esto es el golpe (Akaa)
  • Por otra parte el creado quiere recibir todo según su deseo 4 pero rechaza la Luz porque siente que realizando esto se separa del Creador. (Recordar que en el deseo 4 el creado desea recibir toda la Luz pero además quier ser otorgante como el  Creador). Así que hace un cálculo de acuerdo a su intención de otrogar. Esto es el acoplamiento (Zivug)

Clip – Nuevo Zivug  

5 Zivugim en el Masaj

Después de describir como trabaja el Zivug de Akaa sobre el Masaj, vamos a ver esta acción con todo detalle de acuerdo a las distintas fases del deseo que se encunetran en el interior del Guf del Partzuf.  Vamos que la Luz no golpea una vez en el Masaj y el este eleva Luz que retorna- si no que en la misma acción del Zivug identificaremos varias Sub-acciones que a continuación vamos a aprender.

Ahora vamos a ver cómo se produce la recepción de la Luz interior dentro del Partzuf, y veremos como el creado mide, siente y recibe con el propósito de otorgar cada una de las Luces, en cada uno de sus deseos, y así llegar al completo otorgamiento con el anfitrión.

Recordemos que anteriormente al trabajo con la pantalla, teníamos el mundo del Tzimtzum. (restricción) En el Maljut no tenía discernimientos de importancia entre sus deseos, sino que estos se formaban en círculos concéntricos por causa y efecto (Ver el Gráfico) de acuerdo a diferentes grados de placer. (Son las 4 fases de Luz directa). Al realizar la restricción de sí misma y decidir recibir solo según su equivalencia de forma con el Creador,  en el lugar de círculos, se crea una línea o escalera en la que el creado está abajo (inferior) y el Creador arriba (superior). Desde este momento todas las acciones del creado serán para llegar a la adhesión.

En este momento todas la fases se convierten en grados de la Aviut (espesor) en la utilización del deseo.

Existen dos conceptos en el Masaj que no hemos estudiado:

  1. Dureza (Kashiut) – La dureza es la substancia del Masaj, la medida de fuerza que este opone para recibir la Luz con el proposito de recibir. Según esta dureza, el Partzuf permanecería siempre vacío ya que como dice Baal HaSulam en el punto 21 de Petija: «Y ya supiste que en general la substancia del Masaj se llama Kashiut, y que implica algo muy duro que impide a cualquier cosa atravesar su protección.» Existen 5 niveles de dureza de acuerdo a las 5 fases de Luz directa.
  2. Aviut (Espesor): Es el medida del espesor del deseo con el que este puede recibir con el fin de otorgar. Es el tamiz que se añade a la Kashiut para dependiendo de su grosor dejar pasar una parte de la Luz al interior del Partzuf. Podemos imaginar aquí como un tamiz para tierra tiene distintos grosores que permiten pasar o no las piedras de distintos tamaños. Al igual que el en la dureza,  por lo que existen 5 medidas de aviut en el interior del Partzuf de acuerdo a las 5 fases de luz directa. O sea 5 grados en los que se pueden añadir deseos con diferente espesor en la intención con el fin de otorgar. 
  3. Para que la acción del Zivug se produzca en forma adecuada, la dureza y el Aviut tienen que estar en equivalencia de forma, es decir en la misma fase.

En este momento la Maljut, determina la prevalencia de la intención de otorgar frente al Deseo. Es decir mientras la intención sea de otorgar al Creador, no hay problema par utilizar el deseo. Entonces a la intención de otorgar se le considera como superior.

Imaginemos una película del Oeste en la que el malvado pistolero criminal y el sheriff se enfrentan en un duelo a muerte. La capacidad de utilizar el arma que tienen el malvado pistolero criminal y el sherif, son idénticas. Pero todos sentimos que si el sherif en la medida en que sea más fuerte y sepa utilizar el arma mejor será más honorable y vencerá el duelo. Es decir que los dos tienen el mismo Deseo (disparar) pero su intención es diferente. El primero defiende el mal y el segundo defiende el bien. Pero ¿si el sherif se vuelve en contra de la ley? Entonces todos sentiremos que se transformará en el peor de todos.

Podemos imaginar otra situación en la que llegó a un restaurante y aunque el camarero tiene deseo de servirme y yo tengo deseo de comer, se que si no tengo dinero por más que les suplique no me servirán nada. (esto es Kashiut es una ley de férrea que impone el restaurante) Tampoco me van a dar comida dependiendo del hambre que tenga, sino dependiendo del dinero que tenga a mi disposición. (esto es el Aviut es la posibilidad de entrar en equivalencia de forma dependiendo de mi dinero y la añade el cliente) 

5 Zivugim en el Masaj: Son los diferentes niveles de conexión entre el creado y el Creador (Diagrama – se ilustra en 2 partes – cinco acoplamientos sobre el Masaj que elevan Luz que retorna9

Diagrama

La vasija está formada por 5 partes: Shoresh, 1,2,3,4 – que simbolizan  el grado del deseo- el tamaño de la Aviut:

  1. El deseo en el grado de Shoresh: es puro y cercano en sus características a las propiedades del  otorgamiento. El Masaj en el grado de Shoresh tiene la dureza en el grado de Shoresh, por eso recibirá Luz solo con Aviut en el grado de Shoresh y la Luz que retorna alcanza a vestir únicamente el kli de Maljut
  2. El deseo en el grado 1: El Masaj en el grado 1 tiene la dureza en el grado 1, (y también Shoresh) es decir que tiene la capacidad de oponerse a la intención egoísta del grado 1 (y también en Shoresh), por eso puede recibir luz en Aviut 1 y  Shoresh.  Asi la Luz que retorna se amplia y alcanza a vestir el grado de Maljut y Zeir Anpin y así sucesivamente.
  3. El Deseo en grado 2: Masaj en dureza grado 2 y Aviut en grado 2. La Luz retornante alcanza el Grado de Maljut, Zeir Anpin y Bina.
  4. El Deseo en grado 3: Masaj en dureza grado 3 y Aviut en grado 3. La Luz retornante alcanza el Grado de Maljut, Zeir Anpin, Biná y Jojmá.
  5. El Deseo en grado 4: Masaj en dureza grado 4 y Aviut en grado 4. La Luz retornante alcanza el Grado de Maljut Zeir Anpin, Biná, Jojmá y Keter.

Punto 21 de la Apertura a la Sabiduría de la Cabalá

Complemento del diagrama anterior(contando el grado de Luz que entra en la Partzuf en cada zivug)

 

Valor inverso de las Luces y las Vasijas

Punto 24 de la Apertura a la Sabiduría de la Cabalá

“24) siempre existe una relación inversa entre las Luces y los Kelim. En los Kelim, los de más Arriba surgen antes en el Partzuf: primero Kéter; luego el Kli de Jojmá, etc.; y el Kli de Maljut aparece al último. Por eso denominamos a los Kelim de acuerdo con el orden descendente KaJaB TuM, pues éste es el orden de su manifestación.

Sucede lo contrario con las Luces. En las Luces, las de más abajo son las primeras en entrar al Partzuf.”

Se ve en el diagrama que las vasijas aumentan del más puro al más grueso. (Keter -Jojmá-  Biná- Tiferet – Maljut)  las luces entran de la más pequeña a la más grande (NaRaNJaY)

Esto produce el valor inverso de las Luces y las vasijas – Cuando el Keter crece desde al comienzo no entra en él Yejidá sino Nefesh. Cuando estudiamos las cuatro fases de Luz directa, hubo un ajuste completo entre la vasija y la Luz . Ahora después  de Tzimtzum Alef (primera restricción) y el Masaj, hay un valor inverso.

Del dibujo podemos ver que solo cuando se revela en el Partzuf, el Kli más denso de Maljut, entonces se revela también la Luz más pura de Yejidá. En cambio el kli más sutil de Keter solo me revela la luz mas pequeña de Nefesh. 

Así pues, las Luces que entran en el Partzuf engendran un cambio en las cualidades con respecto a la vasija. Estas cualidades hacen nacer un tipo de deseo completamente nuevo. Es como en el protocolo de las bebidas que utilizamos en este mundo: cada líquido tiene un recipiente distinto donde verterlo. Si tengo vino blanco tendrá un recipiente distinto de un vino tinto o de un cognac. Cada recipiente potencia las cualidades expresivas del líquido que se vierte en el.

Este principio se puede generalizar a todas los niveles de la Creación  y cubre todos los fenómenos que conocemos. Es por esto que el creado siempre trabaja del lado de las vasijas y no de las luces o placeres.

Esto es totalmente al contrario de como el hombre trabaja en la actualidad donde se mueve solo por la búsqueda del placer. Es como el drogadicto que empieza con una dosis pequeña. Después de esta, siente una  carencia mayor que crea una nueva vasija más gruesa. Ya no se conforma con una dosis simple… necesita tener mayor placer, y así sucesivamente. Es por esto que es imposible llenarse; al poner el foco en el placer siempre siente que hay un placer mayor que cuando se obtiene apaga el deseo.

El cabalista al contrario solo busca adaptar su deseo a la luz que el Creador le está enviando en cada momento dentro del ambiente. No quiere por lo tanto obtener el placer sino aumentar el deseo en una forma correcta mediante su esfuerzo.

De esto se deduce el gran dicho cabalista «Haremos y escucharemos». Es decir que en contra de lo que mi sentido común, mi razón propone, escuchar primero y luego actuar, los cabalistas nos proponen lo contrario, actuar primero y escuchar después. Esto quiere decir que debemos hacer un esfuerzo para ir por encima de nuestra razón ya que en mi actual estado no puedo sentir el placer del llenado, el resultado, si no sólo el esfuerzo que va en contra del ego, en contra de la vasija, la vasija que solo quiere llenado. Pero después de esta operación contra el ego, de repente recibo una sensación, un nuevo entendimiento, porque entro en mí una Luz más grande. Después de atraer Luz circundante empiezo a sentir y entender más sobre el estudio, y en algo estoy empezando a identificarme con el estudio.

Por eso dicen los cabalistas ”me  he esforzado y he hallado, créelo”. Pues por un lado tenemos la ambición de avanzar y tener éxito a través de los esfuerzos que hacemos con nuestro deseo, pero esto lo estamos haciendo con nuestras vasijas actuales, muy gruesas y no podemos sentirlo. El resultado lo siento en las vasijas puras, por encima del Majsom (barrera), en las vasijas de otorgamiento. Esto sucede a cada paso en la vasija nueva, de modo recíproco siempre estamos  en confusión  en el camino espiritual, porque siempre llegaremos a un nuevo nivel.

Lo que hace único el estudio de la Cabalá es el constante trabajo con el deseo. Todo el tiempo se añade un deseo de recibir nuevo, y por encima del mismo vamos progresando.  El nuevo deseo de recibir que se revela todo el tiempo es una fuerza vital. Si no existiera este deseo que surge una y otra vez, nos postraríamos en un estado que no cambia. (inanimado)

Clip de Ravcantidad y calidad del trabajo

 

El Partzuf espiritual

El Partzuf espiritual

Tal como se había dicho, el primer paso de la fase 4 es el rechazo de la Luz que llega a ella. De esta manera ella expresa su deseo de no utilizar el deseo de recibir, no recibiendo la Luz tal como la recibía antes del Tzimtzum. Luego del rechazo de la Luz, la fase 4 puede empezar a recibir con el fin de otorgar,  solo que al principio ella  debe examinase a sí misma a fin de medir cuanta intención tiene de asemejarse al otorgante  Creador.

De momento, la fase 4 entiende que en la medida que su deseo sea más grande, así podrá otorgar más, por eso, desde este nivel en adelante se acostumbra ilustrar a la fase 4 en forma de línea y no como círculo. Arriba, a la cabeza de la línea, se encuentra el Creador; el atributo de otorgamiento. En la base de la línea se encuentra el creado; o sea, la cualidad de recepción. La fase 4 por sí misma divide sus deseos en el grado de Shóresh (Raíz), Álef (1), Bet (2), Guimel (3) y Dálet (4). Deseos con los cuales ella es capaz de otorgar, están ubicados más alto, cercanos al Creador y viceversa: deseos con los que solamente puede otorgar un poco o que definitivamente no puede otorgar con ellos al Creador están ubicados lejos del Creador. El creado encuentra su lugar en los peldaños de la escalera que está entre su naturaleza y la naturaleza del Creador, según su capacidad de asemejarse al Creador, así es como la fase 4 se mide a sí misma: según su intención de otorgar y asemejarse al Creador, ella se ve a sí misma más cercana a Él, más elevada (porque así es como ella estima el atributo de otorgamiento como elevado y sublime), o más lejana de Él, baja e inferior.

La fase 4 siempre debe medir su intención, debe realizar Tzimtzum a fin de sopesar exactamente si es capaz o no de otorgar antes de realizar el acto de la recepción. Para ello, se forma en ella un estado nuevo que es llamado “Rosh” (Cabeza). Primero que nada el Rosh rechaza toda la Luz que llega hacia la fase 4 luego de lo cual establece el cálculo de la Luz (Ver Diagrama No. 5).

La Luz que se extiende desde el Creador hacia la fase 4 es llamada “Or Yashar” (Luz directa); en tanto que la Luz que la fase 4 no quiere recibir en forma directa, rechazándola, es llamada “Or Jozer” (Luz retornante).

Por consiguiente, la fase 4 rechaza toda la Luz que llega a ella por parte del Creador, luego de esto ella mide hasta cuánto es capaz de recibir, de forma que la recepción se considere otorgamiento. Esta revisión ella la realiza en relación a los Reshimot (reminiscencias) que quedaron en ella luego del Tzimtzum: 4 de Hitlabshut (vestidura) y 4 de Aviut (espesor) (4/4). Aquellos Reshimot son los registros existentes en ella desde el estado en el Mundo de Ein-Sof (Infinito): las impresiones del placer que hubo en ella son (Dálet de Hitlabshut), y las impresiones del deseo que hubo en ella (Dálet de Aviut). La fase 4 analiza la posibilidad de otorgar en relación a los Reshimot 4/4. Ella siente que la intención de asemejarse al otorgante será posible en fase de Shóresh, Álef (1), Bet (2) y Guimel (3) que están en ella, solo que en la misma fase 4 no podrá recibir con el fin de otorgar, y por eso decide recibir la Luz solamente en parte de sus deseos.

Luego de los cálculos en el Rosh, la fase 4 recibe la Luz en sus deseos Shóresh, Álef, Bet, Guimel, y el deseo de la fase misma; es decir Dálet, permanece vació. El sitio en que la fase 4 recibe el placer es llamado “Toj” (Interior), en tanto que el lugar que no puede recibir placer es llamado “Sof” (Final). El Sof de la fase 4 en su generalidad es llamado “Sium Raglin/Raglaim” (Terminación de las piernas), o abreviando: “Sium” (terminación). El Toj y el Sof juntos son la suma de todos los deseos que se encuentran en ella llamados “Guf” (Cuerpo). El lugar en que a partir de él, finaliza Rosh y empieza el Guf, el deseo, es llamado “Pe” (Boca); el lugar en el que cesa la recepción de la Luz es llamado “Tábur” (Ombligo). La totalidad de los actos de la fase 4, desde el Rosh hasta el Sium es denominada “Partzuf” (Ver Diagrama No. 6)

A continuación, cuando aclaremos los estados de la fase 4, en su camino a la semejanza absoluta a la cualidad de otorgamiento, veremos que unos cuantos de sus estados son las raíces del cuerpo del hombre en éste mundo. De estos estados es que se derivan los nombres de los conceptos de “Partzuf”, “Pe”, Tabur”, “Sium Raglin”, y otros, llamados según las partes del cuerpo material.

El Lenguaje de las ramas

Explicaremos brevemente el lenguaje de la sabiduría de la Cabalá, “el lenguaje de ramas”. Los cabalistas que descubren el Mundo Superior sienten fuerzas; ellos investigan el deseo y los tipos de llenado que existen en él, sin embargo no saben cómo denominar todas las impresiones, los hechos y las relaciones entre los estados que van conociendo, ya que la impresión espiritual es una sensación descubierta, sin ningún tipo de señales exteriores. La revelación espiritual es la revelación del deseo y la clase de llenado en él, y no existe nombre para tales revelaciones. Es por eso que los cabalistas utilizan nombres y apelativos que solemos dar a los resultados corporales de los estados espirituales en nuestro mundo.

Todo lo que existe en nuestro mundo, también existe en el Mundo Superior, pero con otra materia, por eso cuando la persona alcanza el Mundo Superior, lo investiga y quiere nombrar al estado o el acto, llamándolo con el nombre del estado corporal del cual deriva. Cada estado corporal tiene un nombre, y es posible utilizar los nombres corporales para describir los estados, los actos, los fenómenos y las conexiones espirituales.

Nos compete saber, que el cabalista alcanza el mundo espiritual mediante este mundo, y desde su punto de vista, los dos mundos se visten el uno en el otro. Este  mundo  es  considerado a  sus ojos como un diagrama transparente con números y nombres, puesto sobre el diagrama del Mundo Superior. Estos diagramas se revelan a los ojos de los cabalistas exactamente como si estuvieran vestidos el uno en el otro, solamente que los detalles en cada mundo son sentidos por él de forma distinta. A través del diagrama transparente con los números y nombres que el cabalista conoce de este mundo, él ve y siente los fenómenos en el mundo espiritual. Si quisiera precisar mucho más se diría, que a partir   de los fenómenos que son vistos en el diagrama transparente de este mundo, el cabalista discierne las raíces que determinan los acontecimientos en este mundo. “El lenguaje de las ramas” es   un lenguaje que tiene la posibilidad de denominar cada término espiritual con nombres reconocidos por nosotros en este mundo. La mayoría ciertamente están basados en un vocabulario que es familiar para nosotros, pero al igual que cualquier otro lenguaje científico, también en el lenguaje de las ramas hay términos profesionales tal como los nombres de las Sfirot, los mundos y acciones especiales que existen solamente en la espiritualidad. La sabiduría de la Cabalá utiliza el lenguaje de las ramas así como cada una de las otras ciencias utilizan su lenguaje único.

La acción del Partzuf

Volvamos  a  la  descripción  de   los   estados   del   desarrollo del creado. Aprendimos que Maljut de Ein Sof (Fase Dálet) se restringió y decidió recibir en la medida  en  que  ella  pueda  otorgar. Además aprendimos que de todas maneras los actos de Maljut que van desde el “Rosh” (cabeza) hasta el “Sium Raglin” (terminación de las piernas) son llamados “Partzuf”. Este Partzuf incluye tanto al “Rosh” como al “Guf” (cuerpo). El Guf se divide en “Toj” (interior) y “Sof” (final), mientras que Toj se extiende desde “Pe” (boca) hasta el “Tabur” (ombligo), y el “Sof” –desde el Tabur hasta Sium Raglain (Ver Diagrama No.  6).

La Luz que se extiende hacia el Partzuf y se detiene en Pe es llamada “Or Yashar” (Luz directa). El Partzuf rechaza toda la Luz directa, denominando la Luz rechazada con el nombre de “Or Jozer” (Luz retornante). Luego del rechazo de la Luz, el Partzuf calcula cuánto es capaz de recibir con el fin de otorgar, siendo   la medida de la posibilidad del Partzuf para otorgar llamada también “Or Jozer”.

Después del cálculo hecho en el Rosh del Partzuf, el Partzuf recibe el placer que se viste en la Luz retornante, con la intención   de otorgar. Estas dos  luces,  Or Yashar  (Luz  directa) vestida en Or Jozer (Luz retornante), juntas son llamadas “Or Pnimí” (Luz interior). Esta Luz se expande en el “Toj” del  Partzuf. La parte  del Partzuf  que  no  tiene  la  posibilidad  de  recibir  la  Luz  con  la intención de otorgar; es decir, la fase Dálet, es llamada “Sof HaPartzuf”  (Final  del  Partzuf).  Esta  parte  del  Partzuf queda vacía. Para dar un ejemplo, que supongamos que  el  Partzuf  calculó que  tenía la posibilidad de  recibir  con  el  fin de  otorgar 20% por ciento de la Or Yashar que se extiende hacia él. Consecuentemente a la decisión recibida en el Rosh del Partzuf, recibió la Luz que se desprende hasta el Tabur. El 80% de Or Yashar que llegó permanece fuera del Partzuf (Ver  Diagrama No 7). La Luz que queda por fuera del Partzuf es llamada “Or Makif” (Luz circundante). Su nombre  hace  referencia  a  la imposibilidad de ingresar al Toj del Partzuf. El Partzuf la capta, la separa y la rechaza.

La acción del Partzuf es una acción compleja. Tiene más que la Luz que ha sido atraída hacia el Partzuf e ilumina en él. En   la Luz rechazada, a la que se denomina como “Or Makif” (Luz circundante), se encuentra la relación del creado, el cual entiende que el 80% de esta Luz se encuentra opuesta a su fase 4, la cual no puede llenar. Dentro de la Luz circundante se incluye el trabajo, el esfuerzo y el rechazo del creado. Esto se debe a que la Luz circundante es el resultado del rechazo del Masaj (Pantalla); es decir, la Luz que ha sido rechazada por el creado que entiende los grandes placeres existentes en la Luz que él rechaza, sintiéndolos y decidiendo que no es capaz de recibirlos. Aquellos placeres  son demasiado grandes como para recibirlos con el propósito de otorgar.

En este punto es importante indicar, que la fase 4 que se encuentra en el Sof del Partzuf no permanece vacía de forma absoluta como resultado del rechazo de la Luz. La fase 4 rechaza la Luz motivada por su deseo de asemejarse al Creador, de manera que este es su acto de otorgamiento. Ella no es capaz de recibir con la intención de asemejarse al Creador, sin embargo en el rechazo de la Luz, ella expresa su capacidad máxima de estar en otorgamiento.

El vacío de la fase 4 en el Partzuf no se asemeja al vacío de Maljut de Ein Sof restringida. Maljut de Ein Sof solamente se deshizo de todo el llenado, y la fase 4, al contrario, se queda vacía debido a su deseo de asemejarse al Creador. Por eso, la fase 4 siente dentro de sí un llenado denominado como “Or Jasadim” (Luz de la Misericordia), cuyo estado se parece un tanto a la fase 2 luego de que rechazó la Luz que llenaba la fase 1. De la misma manera en la fase 2 fue sentido el placer de cierta semejanza con el Creador; es decir, el placer del deseo por ser como el otorgante. No obstante, ella aun no otorga, prácticamente, sin embargo quiere hacerlo.

La satisfacción sentida como resultado del deseo por asemejarse al Creador es llamada “Or Jasadim” que se extiende al final del Partzuf, desde el Tabur hasta el Sium (Ver Diagrama No 7). Or Jasadim se extiende como resultado del acto de rechazo, dentro del deseo, por estar adherido al acto de otorgamiento a pesar de la imposibilidad de recibir con el propósito de otorgar. La Luz interior es la que se extiende hasta el Tabur del Partzuf llamada “Luz de Jojmá”. Al decir que el Sof del Partzuf permanece vacío, significa que se vacía de la Luz de Jojmá.

Cuando el Partzuf o el creado realizan algún acto, dicho acto se ejecuta siempre en su fase 4, no en la fase 1, 2, o 3, ni en las tres juntas, puesto que es imposible realizar acto alguno que no esté dentro del deseo. De esto surge la pregunta: ¿cómo puede   ser posible que desde el Pe hasta el Tabur el creado actúe en las tres fases precedentes a la misma fase 4 y no en ella misma? (Ver Diagrama No 7).

La respuesta es que también desde el Pe hasta el Tabur el creado actúa en la fase 4, solo que lo hace en la medida que puede trabajar con las fases precedentes a ella. También debajo del Tabur, el trabajo se lleva a cabo con la fase 4, no obstante aquí, a diferencia de lo que ocurre por sobre el Tabur, el creado trabaja no solamente con la fase de Shóresh, 1, 2 y 3, sino también con la misma 4.

Resulta que, el trabajo siempre es con la fase 4. En el “Toj” del Partzuf, la fase 4 está incluida en las fases Shóresh, Álef, Bet y Guimel, en las fases del otorgamiento del Creador, restringiéndose a sí misma. Ella no trabaja con su gran deseo, sino solamente apoyando a las fases que le preceden. El trabajo de la fase 4 en       el “Toj” del Partzuf es llamado “Inclusión de la fase 4 en las tres fases precedentes”. No obstante, en el “Sof” del Partzuf, la fase 4 trabaja también con las fases precedentes y también con su misma fase; por tal razón en el Sof del Partzuf ella no es capaz de recibir. En  cada una  de  las partes del  Partzuf  (Rosh, TojSof)   existen diez Sfirot, y el cálculo siempre se hace sobre el deseo, sobre la décima Sfirá; es decir, sobre la última fase que siente el deseo como propio. Solo ella siente que decide y es independiente. Sin embargo, solamente la última Sfirá se siente a sí misma como creado.

El “Partzuf” es aquella Maljut de Ein-Sof con todos sus deseos. El cálculo es hasta cuanto ella es capaz de trabajar con los deseos que se encuentran en ella con la intención de otorgar llamada “Rosh”. La medida en que ella es capaz de recibir con el fin de otorgar en todos los deseos que se encuentran en ella es llamada “Toj”; en tanto que los deseos restantes que no pueden recibir con el fin de otorgar y que se incorporan al acto de otorgamiento en una forma pasiva por medio del Tzimtzum, son llamados “Sof”.

Es así que la estructura, producto de las treinta Sfirot compuestas de RoshTojSof, es denominada “Partzuf”. No podría ser de otra manera, sino cuando se acepte la decisión de recibir con el fin de otorgar en un 100% con toda la capacidad del Kli, se anulará el “Sof” del Partzuf y toda la Luz se recibirá en el “Toj” (Ver Diagrama No 8). Dicho estado se denomina “Gmar HaTikún” (Final de la corrección), donde Maljut de Ein Sof será llenada tal como lo fue antes del Tzimtzum, solo que su recepción será con el fin de otorgar. En el final de la corrección, Maljut de Ein Sof será complementada por “Rosh”, la intención con el propósito de otorgar, entonces ella recibirá toda la Luz con este fin dentro del Partzuf; es decir, toda ella será como “Toj

El Masaj (Pantalla)

Luego del Tzimtzum Álef (primera restricción), la fase 4 decidió rechazar la Luz, y luego del rechazo de la Luz, ella revisa hasta cuanto puede recibir con el fin de otorgar, recibiendo en la misma medida. Luego de la recepción en la fase 4 queda una parte vacía, en la que no está capacitada para recibir con el fin de otorgar. Es en esta parte en la que ella rechaza la Luz, mediante el “Masaj”. El Guf del Partzuf en su totalidad es, en realidad, “deseo”. El deseo se manifiesta por medio de la atracción de la Luz – placer para sí mismo, debido a que el deseo es atraído hacia el placer, siendo este el lugar del Masaj: el Masaj se coloca entre el placer y el deseo deteniendo el placer. Este no permite que el placer se extienda dentro del deseo en forma directa así como era antes del Tzimtzum.

Cuando la Luz directa llega al Partzuf, el Masaj la rechaza y analiza hasta cuánto puede recibir con el fin de otorgar, la capacidad del Partzuf para recibir con el fin de otorgar se denomina “Or Jozer” (Luz retornante). El Partzuf viste la Luz directa con la Luz retornante, y la Luz se extiende en su interior como Luz interna. Para dar un ejemplo, supongamos  que el Partzuf  tiene la capacidad de recibir el 20% de  la Luz que viene con la intención de otorgar. Luego del análisis y la decisión, el 20% de la Luz directa, vestidos en la Luz retornante dentro del Partzuf a nivel de Luz interior, desde el Pe hasta el Tabur, se expanden. El 80% de Luz directa que han sido rechazados permanecen por fuera del Partzuf y se denominan “Or Makif” (Luz Circundante) (Ver  Diagrama No 9).

LaLuzinteriorseextiendegradualmentedentrodelasdiezSfirotquese encuentran en el “Toj” del Partzuf (según lo mencionado anteriormente, las diez Sfirot pueden ser contadas  como  cinco,  dependiendo  del  tema que se trate). Las Luces que se extienden dentro del Partzuf son llamadas “Néfesh”, “Ruaj”, “Neshamá”, “Jaiá”, “Yejidá”, (NaRaNJaY). El Partzuf se llena de aquellas Luces hasta cierto límite llamado “Tabur”. Este sabe, no tiene la posibilidad de recibir más que esto. Luego de que  el Partzuf se llena con las cinco Luces de NaRaNJaY hasta el Tabur, la Luz circundante queda por fuera del Partzuf presionando sobre el límite donde se encuentra el Tabur. Esta presiona sobre el Tabur debido a que el Creador desea que el creado reciba el placer sin ninguna limitación;   ya que el motivo del Plan de la Creación es hacer el bien a Sus creados,  a fin de llenar la  fase 4 con placeres en forma directa.

Si el objetivo del Plan de la Creación es llenar la fase 4 de placer en forma directa, la respuesta del creado respecto al Plan de la Creación es el resultado de otorgamiento indirecto; es decir, “detrás de los telones”, el Creador le permite al creado sentir cuál es el significado de ser el que otorga, en tanto que el creado, como respuesta, empieza a desear asemejarse a Él. Con esto, debido a que la Luz quiere llenar al Kli en forma directa, la Luz circundante que fue rechazada del Partzuf presiona sobre él queriendo ingresar en su interior (Ver Diagrama No 9).

El Partzuf no puede resistir la presión de la Luz circundante. Él es capaz de enfrentarse con la Luz directa que se encuentra en el Rosh del Partzuf decidiendo recibir cierto porcentaje de la Luz con la intención con el fin de otorgar y la recibe como Luz interior. También puede enfrentarse a la Luz interna del Partzuf. Pero la presión ejercida sobre él por la Luz directa no tiene la capacidad de tolerar.

Para explicar las razones de esto volvamos a la parábola del Dueño de casa y el invitado. El invitado se sienta ante el dueño de casa y se rehúsa a comer, en tanto que el dueño de casa lo presiona rogándole que lo honre, es así que toda su molestia no fue sino para el anfitrión.

Supongamos que el Dueño de casa confiere al anfitrión cinco porciones; es decir, en correspondencia a las cinco Luces de NaRaNJaY que se visten en cinco Kelim (vasijas): Kéter, Jojmá, Biná, Zeir Anpin y Maljut. El invitado hubiese querido recibir del Anfitrión todas las Luces a fin de llenar su Kli, siendo esto un acto esperado.

Pero por cuanto además de las Luces él también siente la esencia del Dueño de casa, es decir al Dador,  siente vergüenza. Él se siente   a sí mismo como el que recibe y al Dueño de casa como el que da, siendo incapaz de resistir la diferencia. Por lo tanto se restringe a sí mismo y coloca un Masaj (pantalla) sobre su Kli de recepción (Ver Diagrama  No 10).

El invitado decide no recibir nada, sin embargo el Dueño de casa insiste. Él continúa insistiendo al invitado para que reciba, y como resultado de esto en el Dueño de casa se descubre una carencia; o sea que Él sufre porque el invitado no disfruta. La revelación de  la carencia del Dueño de casa provoca que el invitado se sienta más grande, ya que de momento es él, supuestamente, quien domina al Dueño de casa determinando Su estado. Luego de que el invitado siente que el Dueño de casa sufre y Su sufrimiento le produce dolor; el  que es  denominado como  “El sufrimiento de  la Shejiná (Divinidad)”; el invitado puede empezar a recibir. Este recibe el placer solamente con el fin de beneficiar al Dueño de casa y complacerlo. (Diagrama No 10)

Sin embargo el Kli calcula la medida en la que puede recibir con el fin de otorgar. Él recibe; por ejemplo: un 20% de la Luz y el 80% restante lo rechaza, llenándose parcialmente con el 20% de cada uno de los deseos: Kéter, Jojmá, Biná, Zeir Anpin y Maljut, asemejándose al Dueño de Casa en un 20%.La recepción del placer debilita a los deseos, ya que ahora cada uno de ellos conoce cuál es su propio placer y el del otorgamiento del Anfitrión. Ellos conocen aquellos grandes placeres que se revelan dentro del deseo de recibir. Después de la recepción del placer, el 80% de la Luz circundante continúa presionando sobre el “Tabur” (Ver Diagrama No 9). No obstante la Luz circundante solamente constituye el 80% de la Luz directa que llega al Partzuf, pero al Kli le es muy difícil soportarla. La Luz directa constata la falta de capacidad del Kli de ejecutar el Plan de la Creación y el dolor del Anfitrión. Entonces despierta al creado para que sienta cuán bueno es recibir el placer dentro del Kli impulsándolo para que continúe recibiendo.

Resulta que después de la recepción de una parte de la Luz que va hasta el Tabur, el Kli se encuentra en una duda difícil, ya que sobre él recae el decidir si continúa recibiendo o no. El Kli siente que no tiene la capacidad de continuar recibiendo, ya que si fuese a recibir más, debajo del Tabur, esto sería una recepción con la intención por el fin de recibir y así él no podría estar de acuerdo, por cuanto no es capaz de infringir la ley del Tzimtzum Álef (primera restricción) de no recibir placer para sí de ninguna manera. Por ende, todo lo que se puede hacer es partir de su estado actual, para expulsar de él todas las Luces tal como el Tzimtzum Álef.

Consecuentemente el Kli aparta todas las Luces de NaRaNJaY, puesto que lo llenaron desde el Pe hasta el Tabur, permaneciendo vacío. Es así que él vuelve a su estado anterior, previo al acto de recepción. En este estado tiene Rosh y todo el Guf del Partzuf está vacío.

Tzim Tzum y Masaj

Registro de la investigación cabalística 

Al igual que las demás ciencias, la investigación cabalística de los estados del creado  requiere  de una definición  de gran dimensión,  de manera que con la ayuda de diagramas y análisis podamos medir el objeto a investigar. Las definiciones exactas posibilitan a los investigadores el poder documentar dichos estados, a fin de pasarlos a los demás adecuadamente. Deben verificar que aquel que haga uso de sus descubrimientos, pueda apoyar sus estudios describiendo con exactitud los estados de acuerdo a lo que le fue entregado. Por tal razón, ahora conoceremos algunos lineamientos sobre los estados del creado según los cuales se conduce la sabiduría de la Cabalá. Sin el entendimiento y conocimiento del formato adecuado de su registro no será posible continuar con la descripción del desarrollo del creado.

Cada estado incluye dentro de sí al creado, el cual es denominado como “Kli” (Vasija) o “Ratzón” (Deseo), en tanto que al llenado que es recibido en el deseo se le describe como placer. El llenado se denomina “Or” (Luz) siendo posible denominarlo también con el nombre de “Boré” (Creador). Cada estado en la realidad está constituido de dos discernimientos: 1) El deseo; y, 2) el placer. Siendo los deseos creados para ser distintos; vimos esto en las cuatro etapas que salieron de Shóresh (fase de Raíz). Conforme a esto, en cada discernimiento existe un llenado singular de la Luz.

De acuerdo a lo mencionado anteriormente, es posible dibujar las cuatro fases también como círculos; cada círculo indica una fase distinta. La forma del círculo indica que no hay discernimiento de abajo y arriba o de grande y pequeño. Es decir, los círculos no muestran las diferencias de las medidas de las respectivas fases, sino el orden de la salida de estas una después de la otra. Así, por ejemplo, fase 1 antecede a fase 2, solamente que no tiene la misma altura (ver Diagrama No. 1).

Todos los círculos tienen un centro común y por eso esta representación describe la relación de causa y efecto. Si nuestro deseo fuese describir lo contrario en las medidas del nivel, dibujaríamos las fases una debajo de la otra, desde Shóresh hasta la fase 4, o de derecha a izquierda, una junto a la otra.

El Reshimó

Ahora explicaremos las formas de registro de los dos fundamentos que existen en cada estado: El Kli y la Luz. El llenado del Kli está condicionado al deseo. El deseo que fue creado desde la fase de Shóresh se creó como deseo de disfrutar sintiendo tanto la Luz como el placer. No obstante, aún no se trata de un deseo independiente, puesto que el deseo en la fase 1 no antecede a la Luz, sino que nace por medio de la Luz misma. De todas maneras, la Luz es sentida por él como un placer de recepción. La Luz que llena el deseo en la fase 1 se denomina “Luz de Jojmá”, en tanto que el deseo de la fase 1 es llamado “deseo de recibir“. Estos dos fundamentos, la Luz que es la fase 1 y el Kli que es la fase 2, son llamados en el lenguaje de la Cabalá como “Reshimó” (reminiscencias) – (ver Diagrama No. 2). El significado de la palabra “Reshimó” se deriva de la palabra “Roshem” (impresión, huella) la cual nos provee de conocimiento acerca del estado del creado.

El signo del Reshimó del Kli y de la Luz en la fase 1 es 1/1. De acuerdo a esto, el signo del Reshimó en la fase 2 es 2/2; en tanto que el signo del Reshimó en la fase 3 es 3/3, y en la fase 4 es 4/4. Con la ayuda del Reshimó es posible describir cada uno de los muchos estados del creado, a pesar de que en la realidad no existe más que Kli y Luz los cuales lo llenan en relación a su deseo.

¿Por qué depende el llenado del deseo? Esto se debe a que existe una ley cuyo origen se encuentra en el Creador, que dice: “No hay coerción en la espiritualidad”. Por tal razón, si el Creador desea hacer el bien a Sus criaturas, forma en ellas un gran deseo, el cual es adaptado exactamente al beneficio que desea otorgarle. Dado a que este beneficio existe desde un principio, el interés del Creador es el deseo que se encuentra en el creado. Cuanto  más se intensifica el deseo del creado más sentirá el placer mismo y a quién da el placer.

Las cuatro fases en la fase 4

Volvemos al tema de los estados del creado según los hemos descrito hasta aquí en las clases anteriores. Desde la fase de Shóresh, el creado llega a la fase 1, de la fase 1 hasta la fase 2, de 2 a 3 y de 3 a 4. Cada uno de los estados incluye en su interior los estados anteriores. Cada una de las fases sale sintiendo las fases precedentes a ella: la fase 1 siente la fase de Shóresh que quiere otorgarle; en tanto que la fase 2 siente la fase de Shóresh y la fase 1; y la fase 3 siente el Plan de la Creación que se extiende desde la fase de Shóresh, a través de la fase 1 y la fase 2 hasta que llega a ella.

De la misma manera, la fase 4 siente todas las fases anteriores. Esta siente que está incluyéndolas. A fin de llegar a su  deseo, la fase 4 debe sentir los deseos anteriores a ella y sus maneras de actuar en relación a la Luz Superior (ver Diagrama No. 3). Se puede decir que en la fase 4 existen cinco partes desde Shóresh hasta 4.

Finalmente, la fase 4 siente que quiere recibir y que recibe del estado que se encuentra en la etapa 3; en tanto que ésta fase recibe para otorgar al Creador. Ella hace esto con la ayuda del deseo de recibir que está incluido en ella desde la fase 1 y con la ayuda del deseo de otorgar que se encuentra presente en ella desde la fase 2. En cambio, la etapa 4 quiere disfrutar del estado que ha sido formado en la etapa 3, volviendo sobre todos los estados que  se encuentran presentes en la etapa 3 añadiendo sobre ella un nuevo deseo. Este nuevo deseo es la fase 4, o más precisamente, la cuarta fase que se encuentra en su cuarto aspecto. Todo lo que resta de esta fase está incluida de las fases anteriores.

El Tzimtzum (Restricción)

La etapa 4 siente tanto el placer del Creador así como las acciones del que otorga, y desea disfrutar de ambos. Luego sucede un desarrollo adicional: como resultado de la sensación de su deseo de disfrutar, la etapa 4 se siente a sí misma como opuesta al que otorga en relación a su deseo de disfrutar. A través de todos los discernimientos que existen en ella, esta alcanza la cualidad de otorgamiento (fase de Shóresh) sintiendo que es contraria a dicha cualidad.

La sensación de oposición en la fase 4 se asemeja al estado del creado al final de la fase 1. También entonces el creado recibió placer y sintió dentro del placer la oposición entre su estado y la fase de Shóresh. La fase de Shóresh es más elevada en relación a la fase 1, por eso ésta sintió que su estado es menor en relación a Shóresh. Como resultado de esto se despertó en ella la aspiración de reemplazar su deseo a fin de asemejarlo a Shóresh. De esta forma se produce en ella el deseo de otorgar, el cual es llamado “fase 2”.

Solo que la reacción en la fase 2 proviene del deseo que llega desde Arriba – en el proceso de la creación de la fase 1 se creó primero el deseo y solo después llegó el llenado. Por eso, dado a que tanto el deseo como el llenado que se encuentran en la fase 1 no son de esta fase, ella es capaz de sustituir su deseo fácilmente luego de sentir que le favorece asemejarse a Shóresh. Sin embargo, la fase 4 siente su deseo como propio, como un deseo que nace en su interior, “desde abajo”. Como resultado de la semejanza entre el Creador y la fase 3, la fase 4 decide recibir todo el estado del Creador como placer. En la fase 4 nace por primera vez un deseo independiente. Ella siente que este es su deseo y que es opuesto al Creador. Por tal razón no tiene la posibilidad de sustituirla tal como hizo con la fase 2. La sensación de contraste entre el estado de la fase 4 y el estado del Creador se denomina “Vergüenza” (Bushá).

El deseo en la fase 4 le pertenece a la fase 4, siendo éste su propio deseo. Precisamente con respecto a este es que siente la oposición entre ella y el Creador. A diferencia de la fase 2 que quiso asemejarse al Creador y lo llevó a cabo sin ningún esfuerzo, la fase 4 no tiene la posibilidad de preferir un deseo distinto al suyo propio; en tanto que la fase 2 siente el deseo del Creador y se adhiere a Él, ya que lo adquirió por encima del deseo de recibir de la fase 1. Sin embargo, la fase 4 no puede realizar dicha acción, la fase 4 no quiere permanecer en su nuevo deseo, en el deseo de recibir del creado- más bien prefiere prescindir de él, pero no tiene la posibilidad de hacerlo, puesto que este deseo nace en su interior. El deseo de la fase 4 “de recibir”, nace de sí misma, como resultado de las acciones que la precedieron, por eso en este punto, se requiere una acción especial. Todo lo que la fase 4 puede hacer por ahora es no estar de acuerdo con su deseo, no querer permanecer en su propio deseo. Tal actitud de parte de la fase 4 respecto a su propio deseo es denominada “Tzimtzum” (restricción). Debido a que esta es la primera vez que en ella se siente tal Tzimtzum, este se denomina “Tzimtzum Álef” (primera restricción).

El deseo que nace en el creado es un deseo natural; es decir, un deseo que ha sido recibido en su interior y es percibido como propio, como natural, y por eso no puede deshacerse de él. El creado solamente puede no desear el deseo forzado condicionado por     la naturaleza, pero no existe la posibilidad de sustituirlo por otro. Luego de la salida de la fase 4 no puede llegar otro deseo a cambio, pero es posible una actitud distinta hacia el deseo en ella, y con el Tzimtzum Álef (primera restricción) se revela esta actitud.

El deseo de recibir siempre existe ocasionando que el creado se sienta a sí mismo como quien quiere disfrutar del placer que llega del Creador, y de la presencia del Creador que es sentida por él. La naturaleza del creado es el deseo de recibir y dicha naturaleza antecede a todo. El deseo de recibir es un dato constante. El creado quiere disfrutar de aquello que ha sido revelado en la fase 3, tanto de la entrega como del dador y solamente en relación al deseo de recibir es que el creado puede decidir una actitud tal o distinta a su naturaleza: estar o no de acuerdo con él, determinar la manera en que lo va a usar.

Luego de que el creado decide no utilizar su deseo, expulsa la Luz fuera de las cuatro fases, de lo cual quedan como remanentes vacíos de Luz. En su estado colmado de Luz, las cuatro fases son llamadas “Olam Ein-Sof” (Mundo Infinito). En tanto que, ahora, en su estado vacío, son llamadas “Olam HaTzimtzum” (Mundo de la Restricción).

Resumen: Volveremos a explicar brevemente la cadena de desarrollo por medio de causa y efecto desde el principio. El Plan    de la Creación es hacer el bien a Sus creados, lo cual es la fase de Shóresh (raíz), de la cual salen la primera, segunda, tercer y cuarta fase; la fase 4 es la que se llena con la Luz y es llamada “Olam Ein-Sof”(Infinito). Luego de la salida del Olam Ein Sof la fase 4 se restringe a sí misma en el Tzimtzum Álef (Primera Restricción). En tanto que la fase 4 restringida se denomina “Olam HaTzimtzum” (Ver Diagrama No. 4). El Reshimó de la fase 4 en el mundo de Ein- Sof se determina por el factor 4/4. El primer 4 indica el estado de la Luz, llamado “Reshimó de Hitlabshut” (Reshimó de Vestidura), y el segundo 4 indica el estado del Kli llamado “Reshimó de Aviut” (Reshimó de Espesor). El Kli es medido de acuerdo a su Aviut, el cual representa el tamaño del deseo de recibir que está en él, en tanto que la Luz es medida de acuerdo a su propia intensidad. La intensidad de la Luz depende de la Aviut (espesor) del Kli.

Resumen: Volveremos a explicar brevemente la cadena de desarrollo por medio de causa y  efecto desde el  principio.  El Plan de la Creación es hacer el bien  a  Sus  creados, lo  cual es  la fase  de Shóresh (raíz), de la cual salen la primera, segunda, tercer y cuarta fase; la fase 4 es la que se llena con la Luz y es llamada “Olam Ein-Sof”(Infinito). Luego de la salida del Olam Ein Sof   la fase 4 se restringe a sí misma en el Tzimtzum Álef (Primera Restricción). En tanto que la fase 4  restringida  se  denomina  “Olam HaTzimtzum” (Ver Diagrama No. 4). El Reshimó de la fase 4 en el mundo de Ein-Sof se determina por el factor 4/4. El primer

4 indica el estado de la Luz, llamado “Reshimó de Hitlabshut” (Reshimó de Vestidura), y el segundo 4 indica el estado del Kli llamado “Reshimó de Aviut” (Reshimó de Espesor). El Kli es medido de acuerdo a su Aviut, el cual representa el tamaño del deseo de recibir que está en él, en tanto que la Luz es medida de acuerdo a su propia intensidad. La intensidad de  la Luz  depende  de la Aviut (espesor) del Kli.

En el mundo de la Restricción, los Reshimot (reminiscencias) también se representan como 4/4, excepto que estos son Reshimot de la Luz y del Kli en su estado restringido. En el mundo de restricción no hay Luz, pero está el Reshimó de la Luz que llenó el Kli antes del Tzimtzum. Luego del Tzimtzum, el Kli es el deseo de no utilizar el deseo. En el mundo de la restricción, el Kli es la reacción al estado de la fase 4 que está llena en Ein-Sof.

El Anfitrión y el Invitado – Recibir con el fin de otorgar (MASAJ)

Debido a que el deseo de la fase 4 es para disfrutar del placer y del Dador del placer, despierta en ella un deseo de no utilizar su deseo. La fase 4 se reduce luego de lo cual el Tzimtzum continúa su desarrollo con el fin de asemejarse al Otorgante. Entonces luego que la fase 4 no tiene posibilidad de modificar su deseo natural, lo único que puede hacer es adherir una intención al deseo. Ella lo hace tal como la fase 3. La fase 4 entiende que el Creador ama al creado, ya que todo se extiende de Él, desde la fase de Shóresh (Raíz), ella revela que puede utilizar el amor del Creador con la ayuda de su deseo de recibir, entonces decide que si la Luz va a llegar a ella desde el Creador, ella no la recibiría por causa del deseo de recibir “que está encendido” en ella; puesto que si lo hiciera, sentiría la sensación de vergüenza, por lo tanto se restringe y luego del Tzimtzum decide nuevamente poner en funcionamiento su deseo a fin de recibir el placer, y esto lo hace solamente debido a que el Creador quiere otorgarle, pues solo del resultado de esta acción es que el Creador disfrutará. Resulta, que al final de cuentas, la fase 4 recibe pero al hacerlo, realiza un acto de otorgamiento.

El asunto de la recepción de la Luz desde la intención de satisfacer al Creador es explicado por Baal HaSulam a través de la parábola sobre el anfitrión y el invitado (Preámbulo a la Sabiduría de la Cabalá, punto 15). El dueño de casa (el anfitrión) desea causar placer al invitado, solo que este lo rechaza y no consiente en recibirlo. El rechazo del placer de parte del invitado entristece al dueño de casa.

En nuestro caso el “Dueño de casa” creó al creado con el fin de proveerle placer, solo que el creado rechaza este llenado, desecha el placer. El deseo del Dueño de casa es hacer el bien, y por lo tanto se puede decir, que el Dueño de casa tiene una “carencia”. Si el invitado; es decir, el creado, no recibe este beneficio, el Dueño de casa queda angustiado. El invitado, el creado, decide utilizarel deseodebeneficiar del Dueño de Casa, el amor hacia él por parte del Dueño de casa. El invitado no tiene la posibilidad de detener el placer que llega del Dueño de casa, sin embargo el placer depende del deseo, y es por eso que el invitado restringe el deseo que se encuentra en él, a fin de que este deseo no disfrute del placer otorgado por parte del Dueño de casa, a pesar que él lo desea. El invitado restringe su deseo debido a que conoce la grandeza del Dueño de casa distinguiendo la forma de su otorgamiento (la revelación del Dueño de casa es semejante a la revelación del atributo de otorgamiento en el paso entre la fase 2 y la fase 1). Así, a pesar de que el invitado desea disfrutar por naturaleza, no utiliza su naturaleza de  recibir.

Al comienzo, el invitado tiene un deseo natural – disfrutar- y luego se restringe. En el siguiente nivel, él entiende que le es posible utilizar su deseo de recibir para otorgar, entonces lo lleva a cabo, recibiendo en el mismo deseo con la intención de otorgar, utilizando el deseo que creó en él el Dueño de casa en las tres fases anteriores, y que él mismo alcanzó en la fase 4; él utiliza el reconocimiento del Dueño de casa como dador así como todos los placeres que llegan de parte de Él. De hecho, él utiliza todos los detalles de la Creación, los cuales son él mismo y lo que él percibe del Superior. Aquí no hay ninguna adición sobre las acciones del Creador fuera de una sola cosa –la determinación de la actitud del creado hacia la Creación. El creado empieza a referirse a la Creación a partir de una sola meta – asemejarse al Creador. La recepción con la intención de otorgar al Creador se denomina como “recibir con el fin de otorgar”. La fase 4 llega a esta intención mediante acciones que se le revelan luego del Tzimtzum y de aquí en adelante empezará a implementar su intención en la práctica.

Luego del Tzimtzum (restricción) el invitado quiere otorgar al Dueño de casa, y lo hace recibiendo el placer que le brinda, con la intención que el Dueño de casa disfrute de ello.

Estas acciones del invitado hacia el Dueño de casa, solo serán posible mediante la creación del Masaj o pantalla que es la intención del creado de otorgar por encima de la razón. Es la herramienta con la que el creado puede medir la equivalencia de forma con el Creador: en qué medida me asemejo, puedo beneficiarle, y recibir para beneficiarle. Solo según esto, el creado acepta usar el deseo, Luego del Tzimtzum Alefel Masaj define cuanto recibe en la fase 4 – el placer es recibido solo en el Masaj.

El Masaj se construye de la grandeza de la meta, de la importancia del contacto con el Dador – que es lo que sostiene al creado por encima del deseo.

Podemos preguntarnos aquí ¿Cuál es la diferencia entre el deseo y la intención? – la intención es en el grado del hablante – el deseo es la fuerza que me llevaría a disfrutar del placer del dador completamente en cada momento, y la intención es lo que quisiera hacer con el deseo para darle placer al dador.  La materia que construye los grados inanimado-vegetal-animal es el deseo de recibir crudo en sus 4 niveles. La materia del grado del hablante que quiere asemejarse al Creador, es la intención de otorgar sobre el deseo, allí hablamos únicamente sobre intenciones.

Las acciones del Masaj se realizan sobre el deseo del creado en la fase 4, pero que tiene la intención de ser como el Otorgante. Si llega un placer de acuerdo al deseo, la acción del masaj lo frena, lo restringe y decide que recibirá de Shoresh en la medida que sienta que esta quiere darme – porque disfruta por ello como lo hizo en la fase 3.

Pero, si la Luz se alejó, ¿de dónde vendrá el placer?  La Luz no deja al creado. El creado no quiere sentirlo, pero la Luz, que es el plan de la creación, bueno y benefactor, presiona para entrar al creado y llenarlo, así este lo percibe. Por eso el creado llega a la decisión sobre cómo usarlo.

Para el desarrollo futuro de la Creación, estos tres elementos Vergüenza, Tzimtzum y Masaj son necesarias. El Tzimtzum Alef solo no sirve al plan de la creación ya  que la criatura debe recibir, pero con la intención de otorgar y eso solo se puede realizar a través del Masaj.

En el siguiente diagrama podemos ver los diferentes elementos que componen la acción del Masaj:

Las acciones que realiza el Creado en este momento son las siguientes:

  1. Llega la Luz (Or Yasar-Luz directa).
  2. Rechaza la Luz a través del Masaj (Or Jozer-Luz retornante) expone su deseo de no recibir la Luz como la recibió antes del Tzimtzum, sino no recibirlo con el fin de otorgar.
  3. Finalmente recibe la Luz (Or Pnimit-Luz interna) de acuerdo al cálculo anterior. La recibe con el fin de otorgar.

La medida de la intención se adquiere según los discernimientos que hay en la vasija, de acuerdo a lo que siente en cada fase que es capaz de recibir con el fin de otorgar. Esta sensación o anhelo es un deseo completamente nuevo e independiente de la fase 4 y es desde ese discernimiento que recibirá la Luz.

Estudiaremos más detenidamente este proceso en la próxima clase cuando veamos el Partzuf espiritual.

Cuatro Fases de Luz Directa

Fase de Shóresh (raíz)

El Plan de la Creación es el pensamiento del Creador  de crear al creado con el fin de beneficiarle. Este plan lo conocemos con el nombre de “Luz” o “Fase de Shóresh” (ver Diagrama anterior), y es la raíz de toda la realidad.

Los cabalistas dicen que antes del Plan de la Creación había algo imperceptible llamado “Su Esencia”. No podemos alcanzar esta esencia, está sellada para nosotros. No sabemos nada claro respecto a “Su Esencia”, fuera de que existe.

Probablemente en el futuro, en estados más avanzados, el creado logre acercarse a “Su Esencia”, conocerla y conseguirla. Pero, por ahora, los cabalistas describen al individuo el camino de la corrección sólo hasta su final, hasta equipararse con el Plan de la Creación, y no se ocupan en absoluto de lo que está por encima de esto.

Fase 1

La Luz, Plan de la Creación, es conocida también como “carencia  o “deseo de recibir satisfacción y placer”. Esta es la “Fase 1” (ver Diagrama N° 4). El motivo de crear el deseo de disfrutar es el deseo de la Luz de complacer a alguien. Dado a que desea complacer a alguien, debe crear a ese “alguien” que quiera recibir de ella el placer. Por lo tanto, si en la fase deShóreshdel Plan de la Creación, el creado existe solo en pensamiento y se considera aún perteneciente al Creador, en la Fase 1, la Luz ya es el comienzo del creado.

En la fase 1, el creado no está aún desarrollado. Su deseo proviene del Creador. No se siente deseoso de disfrutar de la Luz, de adherirse a ella. No siente que le falta algo. Por lo tanto, en la fase 1 se denomina a la carencia como “inanimada”. En esta fase, la carencia no exige nada del creado, porque el origen de esta carencia no se encuentra en el propio creado, sino fuera de él. Aún es imposible atribuírselo. No se puede indicar el estado 1 como un creado que existe fuera del Creador, que todo lo que existe en la fase 1 proviene directamente del Creador. En la fase 1, el creado se encuentra en total dominio de la Luz.

Diagrama No. 4

 La Luz llena el deseo que existe en la fase 1 y despierta en él la sensación del Plan de la Creación que es beneficiar a Sus creados. Es decir, la Luz aporta al deseo dos  elementos:

  1. Llenado
  2. La sensación del Dador.

La Luz provee al deseo de llenado, la sensación de la Luz, pero el creado casi no logra percibirlo, porque la Luz es buena. En la fase 1, el creado no siente deseos de la Luz antes de recibirla, y por lo tanto, el recibir la Luz no despierta en él una mejor sensación de la que tenía en su estado anterior, sino que, aparte de sentir esa mínima sensación positiva, la Luz que se expande dentro del creado, le proporciona también la sensación del Dador (ver Diagrama N° 5). El creado comienza a sentir la existencia del Creador. Este percibe que el Creador es el que otorga y el que le brinda lo bueno.

 

La Luz proviene del Creador de forma directa, aunque la sensación del Dador llega a la fase 1 en forma indirecta, como envestida dentro de la Luz (ver Diagrama No 6).

 

Esto es semejante a recibir un regalo: al principio, uno se entusiasma con el regalo en sí. Luego, en una inspección más detallada del mismo, descubre que el presente se ajusta totalmente a su deseo. Como resultado, deduce que quien se lo entregó, lo conoce, lo ama, lo comprende y desea su bien. A partir del regalo, comienza a alcanzar a quien le entregó el presente; es decir, no a quien se lo entrega, sino su actitud hacia él.

Resulta que la primera acción en la creación es alcanzar al Creador, y es la que conduce al ser humano a desarrollarse. Cada uno de los estados del desarrollo del creado, cada cambio, sin importar  cuál, es un paso más hacia el logro de un mayor acercamiento al Creador. Es el juicio respecto a los estados de desarrollo en este mundo, a pesar de que en este mundo, uno es inconsciente de  sus  estados de  desarrollo. La raíz de esto se remonta, como hemos dicho, ya desde la primera acción al principio de la Creación.

Resumen: La fase 1 es el mero deseo – deseo de disfrutar denominado “materia”. Esta fase incluye dos partes: la primera, es la sensación del regalo, y la segunda, la sensación de quien  lo  entrega. En la primer parte, una situación determinada; en la segunda, el motivo por el cual se produjo esa situación. Es decir, en la segunda parte se define la existencia del estado de la raíz de la cual sale el estado 1. Como resultado, comienza el desarrollo.

Fase 2

Cuando la fase 1 identifica las dos partes que hay en su interior, comienza a distinguir cuál de ellas es la parte preferida – la segunda, claro está, que posee atributos más elevados. En la segunda parte, la fase 1 siente al que otorga, al primero en concebir, y como resultado, se despierta en ella el deseo de ser como él.

Por lo tanto, el primer deseo que se despierta dentro del creado es el de la equivalencia de forma – asemejarse al Creador. El deseo de asimilarse al Creador, otorgar, se denomina “fase 2” (ver Diagrama  N° 7). Si al final de la fase 1, el Plan de la Creación era aún forzado, en la 2 se realiza en la práctica. El deseo de la fase 2 es asemejarse en la práctica a la fase de Shóresh(raíz), es decir, ser el otorgante.

Ahora aclararemos cómo puede la fase 2 ser “otorgante”. La fase 2 se desarrolló a partir de la fase 1 – del primitivo deseo de disfrutar. Este deseo es todo el material de la creación. La sensación del Creador dentro del deseo de disfrutar y de asemejarse a Él, son suplementos de ese material, del deseo de gozar que creó el Creador. O sea, que todos los desarrollos y las adiciones al deseo, al material amorfo, el inicial, provienen del reconocimiento del Creador, y del deseo de desarrollarse y ser como Él.

Como resultado  de conocer  al Creador,  la materia  comienza  a crecer y a expandirse. La fase 2, es opuesta a la fase 1 – la fase 1 en su principio desea recibir, y la fase 2 desea otorgar – pero la fase 2 no permite adiciones sobre la fase 1. La fase 2, es del mismo material que la fase 1 (deseo de recibir) que se ha vestido de la forma de otorgamiento. Dentro de la fase 2 se encuentra la fase 1, y dentro de ésta se halla la fase de Shóresh; las fases se van sumando una a la otra. Cuando la fase 2 desea otorgar y ser como el Creador, comienza a pensar: “¿Cómo puedo ser como el Creador? ¿Cómo puedo otorgar, y a quién?” Esta penetra en su estructura interna, evalúa quién es y de qué manera puede asemejarse al Creador. Como resultado, siente que incluye dentro de sí la fase 1 y también la de Shóresh. Pero la fase 2 es de hecho deseo de recibir, y este deseo puede recibir solamente.

Diagrama No. 7

Es decir que aunque en la fase 2 se despierta un deseo de otorgar, no está capacitada a otorgar como el Creador. El propio Creador es el Dador, y el creado, no tiene para dar. Con estas evaluaciones, el creado comienza a comprender que puede utilizar el Plan de la Creación para otorgar al Creador. El Creador lo ama, ya que el Plan de la Creación   es beneficiarle. Por eso, todo lo que el creado debe hacer es recibir, porque el Creador desea darle. Por lo tanto, dentro del deseo de otorgar, se despierta en la segunda  parte de la fase 2 el pensamiento  de otorgar al Creador recibiendo Su Luz. Justamente recibiendo la Luz del Creador, es como el creado va a otorgar al Creador.

Fase 3

En la fase 3, el creado va a realizar su plan de otorgar al Creador a través de la recepción. Del mismo modo que en la fase 1, recibe la Luz del Creador. Él sabe que el Creador creó el deseo y lo llenó de Luz para entregárselo. Pero ahora, él recibe la Luz porque desea asemejarse al Creador como en la fase 2 (ver Diagrama N° 8). La recepción de la Luz para otorgar al Creador se denomina “fase 3”.

Como resultado de la recepción de la Luz para otorgar al Creador, el creado se siente a sí mismo semejante al Creador. En la recepción de la Luz del Creador, el creado, de hecho, otorga al Creador. El creado se siente que otorga como el Creador – siente el nivel del que otorga.

Después de la salida de la fase 3, y las fases 2, 1 y Shóresh que se incluyen en su interior, el creado vuelve a analizar su estado también en la fase 3. El creado es deseo. En la fase 1 su deseo es de recibir – este deseo es su naturaleza. En la fase 2, se le agrega el deseo de otorgar, y en la fase 3 él otorga. El deseo de recibir que existe en el creado proviene del Creador, y su deseo de otorgar, de la sensación del Creador. Resulta que todas las acciones del creado hasta el momento proceden directamente del Creador. El creado en sí, no era más que un activado. Con esto se aclara el motivo por el cual, en la sabiduría de la Cabalá, se conoce al Creador como “la fuerza que actúa en el activado”.

Como resultado de todos estos  cálculos, el  creado comienza  a pensar quién es él realmente. Ya que no es él quien recibió ni tampoco el que se asemeja al Dador. Él sintió solamente en su deseo asemejarse al Creador, pero es el Creador quien implantó en él ese deseo. Es así como el creado descubre que “yo” significa sentir como siente el Creador – es la sensación del creado cuando es independiente.

Fase 4

La sensacióndel “yo” – deseo del creado de disfrutarde la sensación del Creador – comienza a estabilizarse en la parte inferior de la fase  3 y se representa en la práctica en la última fase del desarrollo del deseo, en la fase 4. Esta fase desea en su integridad recibir todo lo que proviene del Creador. No anhela la Luz que procede del Creador en la fase 1, sino que desea disfrutar de ser como el Creador, el que otorga (ver Diagrama N° 9). Al final de la fase 3, esta fase descubre cuál es el significado de estar en el nivel del Creador, y es por eso que ahora, en la fase 4 propiamente dicha, su deseo es el de disfrutar del otorgamiento.

El deseo en la fase 4, es el primer deseo independiente del creado. En todos los períodos anteriores de desarrollo, ya sea directa o indirectamente, los deseos provenían necesariamente del Creador. Pero el deseo en la fase 4, procede del creado. Este comienza a formarse y revelarse al creado a finales de la fase 3, y se establece finalmente en la fase 4. Comparando con las demás fases, sólo la 4 se considera independiente, y por lo tanto, sólo ella merece ser llamada “creado”.

Cuando la fase 4 está completa totalmente se denomina “Ein Sof” (Infinidad) o “Olam Ein-Sof”. En la sabiduría de la Cabalá, “Olam” (mundo) significa estado o sensación del deseo. Por lo tanto, la fase 4 que llena todos los deseos ilimitadamente, se denomina “Olam Ein-Sof”.

 

A veces, los cabalistas describen las fases del desarrollo del deseo a modo de círculos concéntricos, como bulbos de cebolla (ver Diagrama N° 10). El círculo más interno de todos es la fase 4, y el más externo señala a la fase de Shóresh, y el Creador se encuentra por fuera de todos los círculos.

La adición en la fase 4

Entonces, para que el creado alcance una carencia independiente y se sienta como si existiera en ese deseo, debe atravesar cuatro fases de desarrollo del Plan de la Creación. El creado en sí, es la última fase. La fase de Shóresh es el pensamiento del Creador en relación a los creados, y por eso, los cabalistas no la consideran como parte de la Creación propia y tampoco la toman en cuenta junto con las fases 1, 2, 3 y 4 que representan el desarrollo del creado. Además, desde una perspectiva inversa, podemos decir que la fase de Shóresh, 1, 2 y 3 son las fases en las cuales el Creador desarrolla el deseo de recibir con el fin de traerlo a su forma independiente denominada “creado”. Es decir, a veces se enfatiza la fase de Shóresh y otras la fase 4. La fase de Shóresh es el Creador, la fase 4 es el creado, y las intermedias son las fases de desarrollo. Estas fases, desde el Creador hasta el creado, se atribuyen también al Creador – ya que el creado no fue en ellas activo en absoluto. Pero el creado, el cual anhela alcanzar al Creador, logra conseguir también las fases de desarrollo del Creador mismo,  la forma en la cual el Creador dio a luz al creado y lo desarrolla (ver Diagrama N° 11), y conociendo las acciones del Creador, él  logra conseguirlo. Alcanzar al Creador mediante Sus acciones se denomina en la sabiduría de la Cabalá “Mediante Tus acciones Te conoceremos” (canción de la unidad). Es así como los cabalistas investigan la realidad y llegan a comprender al Creador.

La fase 4 disfruta de dos llenados que existen en su interior: de la Luz proveniente del Plan de la Creación, y de la posición  del Creador – su comprensión del significado de ser como el Creador. En el mundo Ein Sof, estas dos formas de llenado la llenan completamente. Estos llenan el deseo de recibir que hay en ella y el deseo de disfrutar por encontrarse en el nivel de otorgante. El deseo de la fase 4 es comparable a un niño que disfruta con lo que recibe de su madre, y de que es ella quien se lo da y se preocupa por él. Él no desea recibir vanamente, sino que sea ella precisamente quien lo llene y lo sirva. En la fase 4, el creado descubre el amor del Creador hacia él, y siente no sólo el llenado sino también el amor, y de ese amor desea disfrutar. Este placer es infinitamente más grande que el propio placer del llenado, el cual se siente en la fase 1 y es el más pequeño. Todos los placeres añadidos provienen de reconocer al otorgante, de la sensación de la importancia del Creador. Si el creado reconoce al Creador como lo más grande e importante, recibirá entonces un suplemento de placer. Por lo tanto, el deseo de recibir que se desarrolló en la fase 4, por encima del deseo de recibir que había en la fase 1, es un agregado que procede del reconocimiento del Creador – de reconocer la brecha que existe entre el nivel del creado en la fase 1 y el nivel del Creador en la fase de Shóresh.

Cuatro fases de la Luz directa

El desarrollo del deseo en sus cuatro fases se denomina “Cuatro fases de la Luz directa”. Cada creado o cada parte del mismo, cada deseo o entidad en toda la creación, deben contener en su interior estas cuatro fases.

La Luz directa, también llamada “Plan de la Creación”, desarrolla la existencia de la ausencia del deseo que se encuentra como si fuera un punto, como un material primitivo. Los cabalistas denominan al deseo que se encuentra en el Plan de la Creación con el nombre: “Existencia de la ausencia”, por ser el punto de partida y no existir ningún estado anterior. Y ese punto se va desarrollando.

Cada pensamiento, cada deseo, cada carencia, cada movimiento o impulso percibidos por el hombre como “soy yo”, son el resultado del desarrollo de cuatro fases que preceden al deseo. Estas cuatro fases no aparecen vanamente en el creado y despiertan en él cualquier deseo, sino que provienen de Arriba, del Creador. De hecho, todo pensamiento que surge en el hombre es el resultado del desarrollo de ciertos estados anteriores, del origen de la Luz, del Creador.

El Nombre HaVaYaH

Entonces, en el creado están incluidos aparte de la fase de  Shóresh, los cuatro niveles de desarrollo denominados “1, 2, 3 y     4”. Se acostumbra señalar los cuatro niveles y la fase deShóreshcon las letras hebreas Yud, Hey,  Vav,  Hey y la punta de la letra Yud  (ver Diagrama N° 12). La punta de la letra Yud  representa la fase   de Shóresh, la letra Yud nos indica la fase 1, la siguiente letra Hey indica la fase 2, la letra Vav indica la fase 3, y la última Hey indica  la fase 4.

La letra Yud, describe el placer que llena el Kli (vasija), y es sentido en el primer deseo de la fase 1. La Letra Hey (o Key), representa el atributo de otorgamiento. La Vav, indica la acción de otorgamiento por parte de la fase 2 en la fase 3. La última letra Hey de la fase 4,   se asemeja en su forma a la Hey en la fase 2, al atributo de Biná, ya que a lo largo del proceso, equipara su forma a la del estado 2. Y es así como logra la equivalencia de forma con el Dador, con la fase de Shóresh.

Sfirot

Cada una de las fases posee un nombre. Estos se denominan “Sfirot” (plural) – “Sapir” (heb, singular: alumbra), ya que hay luz dentro de su deseo, que ilumina por la Luz que lo llena. Las Sfirot   se llaman “Kéter ”, “Jojmá”, “Biná”, “Zeir Anpin” y “Maljut” (ver Diagrama N° 13).

Kéter significa corona, proviene de la palabra hebrea “Koteret” (Título).Kéter es el principio de todo – el Plan de la Creación que corona, que obra y controla toda la realidad, desde el principio hasta  el final.  

Jojmá se llama así, porque en el estado 1 vemos toda la Luz y el Kli que le asignó el Creador a sus creados. La fase 1  contiene en su interior todo el Kli y la Luz que provienen de la fase de Shóresh, en sus formas primarias. Todas las demás fases, no son más que el desarrollo de la fase 1. Si bien en las fases 2, 3  y  4, el creado adquiere entendimientos, atributos y  nuevos estados, pero de hecho, todos ellos existen en potencial ya en la fase 1, y por eso esta es  llamada Jojmá:  del hebreo,  “cierta fuerza“.

Biná” proviene del verbo hebreo “Habaná” (comprensión). En el estado 2, el creado comienza a comprender en cierta medida quién es quien hizo todo esto, cuál es su naturaleza y cuál es su deseo. El Plan de la Creación se revela por primera vez en Biná. Como resultado de reconocer y comprender al Creador, se despierta en Biná el deseo de otorgar. También el hombre, si desea alcanzar el atributo de otorgamiento, debe comprender primeramente qué es: cuán grande es en relación a su deseo, equivalente al deseo de recibir que existe en Jojmá.

Zeir Anpin” (ZA) significa “cara pequeña”. “Cara” es decir: iluminación de Jojmá, lo que el  Creador expone ante  sus creados, Su beneficio. Zeir Anpin se llama “cara pequeña” porque el esmero del hombre de asemejarse al Creador es como el de un niño que desea ser como su padre e imita sus acciones. Maljut (reinado) se llama así porque reina sobre sus deseos. El deseo de Maljut es el primer deseo independiente. Ella misma, en definitiva, es la que llena su deseo, y se siente en él como la receptora y disfruta del regalo y de quien se lo entregó.

Seis Sfirot en Zeir Anpin

Los cabalistas  hablan generalmente  sobre diez  Sfirot  y  no cinco. Esto se debe, a que la Sfirá Zeir Anpin incluye seis Sfirot denominadas “Jésed”, “Gvurá”, “Tiféret”, “Nétzaj”, “Hod” y “Yesod”. Cuando los cabalistas destacan la existencia de diez Sfirot, ya se toman en cuenta las seis de ellas que están dentro de Zeir Anpin, y es como si el propio Zeir Anpin no fuera incluido en la Sfirá (ver Diagrama N° 14). Y uno se pregunta, ¿Si Zeir Anpin significa “Cara Pequeña”, el esmero del creado de ser como el Creador, ¿por qué es él justamente el que incluye otras seis Sfirot?

En cierta medida, Zeir Anpin es similar a Kéter . Este influye sobre todas las fases inferiores, y Zeir Anpin, en su acción, desea otorgar como Kéter . Pero Zeir Anpin desea  otorgar  de  abajo hacia Arriba, hacia el Creador, y para ello debe construir en su interior un sistema como el del Creador (KaJaB – Kéter , Jojmá, Biná). Este sistema son las tres Sfirot de Jésed, Gvurá y Tiféret que se encuentran en Zeir Anpin: Jésed de Zeir Anpin es similar  a Kéter , Geburá a Jojmá, y Tiféret a Biná.

La Sfirá Netzaj de Zeir Anpin es la acción de  Zeir Anpin. La Sfirá Hod es la Maljut de Zeir Anpin – el deseo de Zeir Anpin  de  realizar él mismo la acción de otorgamiento. Y la Sfirá de Yesod es la suma de las cinco acciones de Zeir  Anpin (JaGaT NeH- Jésed, Gvurá, Tiféret, Nétzaj y Hod). Cinco acciones de Zeir Anpin hacia el Creador equivalentes a las cinco fases que incluyen (Kéter, Jojmá, Biná, Zeir Anpin, Maljut).

Con esto nos queda claro el motivo por el cual Zeir Anpin incluye en su interior cinco partes, a pesar de ser pequeño. Es así como realiza su acción de otorgamiento hacia el Creador.

NaRaNJaY

Los deseos en las cinco fases se impresionan de las Luces que los llenan. Kéter es la propia Luz. Nosotros no estamos capacitados para entender qué es la Luz que hay en Kéter, fuera de que es atraída por el Creador. En Jojmá ilumina una Luz llamada “Jojmá”, y en Biná ilumina una Luz llamada “Biná”. En Zeir Anpin, ilumina un poco de la Luz de Jojmá y un poco de la Luz de Biná, ya que Zeir Anpin es el resultado de las fases A y B. Maljut recibe toda la Luz para su propio placer, y la Luz que hay en ella es la de Jojmá. En Maljut, también Biná se transforma en Jojmá, ella realmente desea disfrutar.

De acuerdo a su intensidad, se acostumbra a llamar las Luces     con cinco nombres: “Néfesh”, “Rúaj”, “Neshamá”, “Jaiá”, Y “Yejidá(NaRaNJaY) (ver Diagrama N° 15).

El nombre “Néfesh” deriva de la palabra “Nefishá” (reposo), esta nos sugiere, que el creado aún no siente nada. La palabra “Rúaj” (viento) indica ya algún tipo de cambio,  pero este cambio,  no se      le atribuye al creado. Al igual al viento que pasa y desaparece, es imposible ejercer sobre él, sino sólo sentir el movimiento.

El nombre “Neshamá” (alma) indica algo que existe dentro del hombre y nace en él desde el Superior. El primer contacto del creado con el Creador, según el equilibrio del atributo interno, se efectúa en Biná, y por lo tanto, la Luz que la alumbra se denomina “Neshamá”.

La Luz de “Jaiá” se llama así, porque ilumina cuando la criatura comienza a actuar por sí misma, cuando hace un movimiento independiente. La Luz “Yejidá” alumbra cuando la criatura alcanza la identidad del Creador y desea disfrutar de Su estatus o unirse a Él.

Los cinco nombres de las Luces indican una gama muy amplia de estados y no un solo estado en un solo mundo. Los cabalistas los utilizan para describir estados a lo largo de toda la sabiduría de la Cabalá. Los cinco nombres de NaRaNJaY, nos permiten evaluar en nosotros todos los estados existentes en el desarrollo de las fases de Shóresh, 1, 2, 3 y 4.

Luz de Jojmá y Luz de Jasadim

Como explicamos anteriormente, las Letras Yud (י) – (Hey (ה) – Vav (ו) – Hey (ה) y la punta de la letra Yud, indican la diferencia entre los cinco estados. Los cuatro estados y sus raíces se diferencian entre sí en su forma. Pero si el deseo es diferente, significa que el contenido también lo es, ya que éste depende del deseo. La “Luz directa” que construye las cinco fases: Shóresh, 1, 2, 3 y 4 es atraíada del Creador. Las fases se desarrollan, y de acuerdo a sus deseos, sentirá cada una un llenado diferente al de esa “Luz directa”. La Luz que se extiende del Creador se denomina “Luz simple, circundante o directa”.  Ella construye las cinco fases, y en cada una de ellas ilumina su propia luz.

“Luz de Jojmá” ilumina en la fase 1, “Luz de Jasadím” en la fase 2, las Luces de Jojmá y de Jasadím iluminan en la fase 3, y Luz de Jojmá grande ilumina en la fase 4.

El propio Kli es el deseo de recibir y sus atributos principales son dos: recibir u otorgar. En contraposición a estos dos, pueden propagarse en el Kli dos clases diferentes de placeres: el de recepción, llamado “Luz de Jojmá”, y el de otorgamiento denominado “Luz de Jasadim” (ver Diagrama N° 16). Solemos dibujar el placer por el otorgamiento como una flecha saliendo del Kli en dirección hacia arriba. El dibujo de la flecha hacia abajo, representa la dirección de la acción de otorgamiento y no el placer en sí.

Resumiendo: Si el Kli recibe y siente placer con la recepción, el placer sentido en él se denomina “Luz de Jojmá”; y si el Kli desea ser como el Dador, el placer que hay en él como resultado de equiparar los deseos se denomina “Luz de Jasadim”. En cada una de las fases 2, 3 y 4 existe la sensación del Dador, sensación de otorgamiento por parte del Dador, sensación de recepción del que recibe y sensación de la acción (recepción o entrega) por parte del receptor.

Pero el Klí en sí no puede dar. Puede recibir como en la fase 1 o no recibir y desear dar, como en la fase 2. Aunque la fase 2 desea dar, no da, ya que no está capacitada para hacerlo. Para dar, debe recibir como en la fase 1 y debe hacerlo con intención de otorgar placer al Dador, como en la fase 2. Con esto podemos comprender el motivo por el cual en la fase 3 iluminan en conjunto tanto la Luz de Jojmá como la de Biná.

Resulta que la acción de entrega por parte del creado,  de  hecho es recepción, pero acompañada de intención. La acción de recepción con intención de otorgar se denomina “otorgamiento” (ver Diagrama N° 17). Solo así el creado puede otorgar, porque fue creado de un principio como deseo de disfrutar, recibir y llenarse a sí mismo únicamente.

Por lo tanto, cuando la fase 4 recibe todo, de acuerdo al deseo de otorgar que siente en las fases anteriores y de acuerdo al deseo de recibir que siente en su propia fase, es denominado “Maljut”. La Maljut domina. Ella desea que todos los estados se revelen ante ella, para poder disfrutar de ellos ilimitadamente. No tiene límites en la recepción de la abundancia, y por lo tanto es llamada “Maljut de Ein Sof” (Infinito).

Estructura de la realidad

La realidad completa es el resultado de cuatro fases de la Luz directa y sus raíces, que son: la punta de Yud, Yud misma–HeyVavHey, o diez Sfirot Kéter , Jojmá, Biná, ZA y Maljut, y las Luces, Néfesh, Rúaj, Neshamá, Jaiá y Yejidá que iluminan en su interior.

Más adelante, cuando entremos en cada fase y en cada Sfirá, podremos comprender también sobre todos los seres y criaturas que existen en los cinco mundos, “Adam Kadmón”, “Atzilut”, “Briá”, “Yetzirá” y “Asiyá”. Estos cinco mundos salen de Maljut de Ein Sof, y de Maljut de Ein Sof ylosmundosnacenlasalmasdetodosloscreados. También los creados se dividen en cinco niveles –Shóresh(raíz), inanimado, vegetal, animado y Adam (hombre). Pero el hombre es el único de todas las criaturas que debe corregirse según la equivalencia de forma. El estado en el cual la Maljut es corregida por el hombre atravesando todos los mundos y los creados, se denomina “Gmar Tikun” (fin de la corrección). El hombre corrige también sus estados anteriores, el inanimado, el vegetal y el animado, y en su raíz llega hasta el Creador. No existe otra realidad más que las cuatro fases y sus raíces, Yud –Hey –Vav Hey, o Kéter , Jojmá, Biná, Zeir Anpin y Maljut. Todo el material de aprendizaje dentro de la sabiduría de la Cabalá, todo lo que se nos revele, está incluido en estas cinco fases (ver Diagrama N° 18), en especial en la última de ellos, en Maljut, la cual incluye todas las últimas fases. El deseo de la Maljut, somos nosotros. Si estudiamos la realidad, nuestro deber de llegar al fin de la corrección y los medios para lograrlo, concretaremos el Plan de la Creación y alcanzaremos la integridad y eternidad equiparando la forma con el Creador.

La sabiduría de la Cabalá incluye en su interior toda la realidad,   la Superior y la inferior, todas las criaturas, la manera en que el Creador se manifiesta ante Sus creados, la manera en que los creados comparan sus actitudes con la del Creador, y la actitud del Creador hacia ellos.