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despertar espiritual

¿Cuáles son los principales síntomas del despertar espiritual?

Hemos evolucionado por miles de años y en cierto punto, comenzamos a despertar hacía preguntas acerca del significado y propósito de nuestra vida. Es el primer despertar que recibimos hacia la espiritualidad y se vuelve nuestra principal preocupación en el momento en que comenzamos a elevarnos por encima de nuestra existencia animal.

A diferencia de los animales, nuestros deseos evolucionan de una generación a otra. Sentimos los deseos del siguiente nivel de evolución, nuestra sensación de vacío crece constantemente, nos obliga a buscar nuevos y diferentes tipos de satisfacción. Y gradualmente desarrollamos una pregunta más y más pronunciada acerca del significado de la vida y nos preocupa cada vez más.

Ideas cada vez más nuevas surgen en nosotros y como resultado de nuestros deseos insatisfechos, desarrollamos sistemas cada vez más complejos . La ciencia también se desarrolla en relación a las preguntas que tenemos en cada generación, podemos ver la gran diferencia entre la ciencia de hoy y la ciencia de hace algunos siglos.

Más aún, la pregunta acerca del significado y propósito de la vida se manifiesta primero y antes que nada, en ciertos individuos. En el transcurso de la historia, hemos sido impulsados a descubrimientos en varias áreas, música, literatura, poesía, ciencia y tecnología, Nuestros deseos constantemente crecen de acuerdo a una escala que empieza en las simples necesidades de sobrevivencia -comida, sexo, familia- a deseos sociales -dinero, honor, control y conocimiento. De una generación a otra, nuestros deseos se vuelven cada vez más refinados.

De acuerdo al gran cabalista, Arí (Rav Isaac Luria), la pregunta acerca del significado y propósito de la vida comenzó a surgir en la humanidad como un todo hacia el final de la edad media e inicios del renacimiento. Las revoluciones tecnológicas, científicas y culturales en Europa comenzaron a provocar el surgimiento de una actitud totalmente nueva hacia la vida y la religión. Muchas personas comenzaron a dejar de temer por no ser religiosas y ser castigadas por disidencia, eso señaló que los deseos de la humanidad crecían hasta un nuevo nivel, donde las creencias se quedaban cortas en la nueva exigencia de pruebas que había comenzado a evolucionar.

En el comienzo de la «Introducción al estudio de las Diez Sefirot,» el cabalista Yehuda Ashlag (Baal HaSulam) escribió:

En realidad, si permitimos que nuestro corazón responda una muy famosa pregunta, estoy seguro que todas las preguntas y dudas de si debemos estudiar la sabiduría de la Cabalá se desvanecerán del horizonte y observarás en su lugar y encontrarás que se fueron. Esta indignante pregunta es una que se hace el mundo entero, es decir, ‘¿Cuál es el significado de la vida?´

Podríamos decir que todo lo que se desarrolla en el mundo es porque no encontramos la respuesta a la pregunta acerca del significado de la vida. Podemos ver en qué  se involucra la humanidad y hacia dónde lleva eso al mundo y todo es porque fracasamos en entender para qué existimos.

En su mayor parte deseamos archivar la pregunta acerca del significado y propósito de la vida y en su lugar involucrarnos en placeres más inmediatos y concretos, nos mantenemos ocupados para evitar esta pregunta. Porque si nos involucramos en la pregunta y no encontramos respuesta, nos provoca sufrimiento existencial en adición al sufrimiento que experimentamos en relación a nuestra supervivencia diaria.

Sin embargo, la razón de que Baal HaSulam en su Introducción al estudio de las diez Sefirot, discuta el significado de la vida es porque quiere mostrar que no necesitamos tener ninguna meta elevada ni pensamientos especiales para poder embarcarnos en el camino espiritual. Muy simple, si nos sentimos mal y no sabemos por qué estamos vivos y esas preguntas siguen surgiendo en nosotros, nos hacen sentir incómodos y que necesitamos responder para justificar nuestra existencia, podemos empezar a avanzar en el camino espiritual.

La sabiduría de la Cabalá fue construida específicamente para responder la pregunta acerca del significado y propósito de la vida. Y está abierta para todos, sin importar edad ni género ni antecedentes ni ninguna otra diferencia aparente.

Basado en la lección virtual 31/ene/16, Escrito/editado por estudiantes del cabalista, Dr. Michael Laitman

espiritualidad

¿Por qué es tan elusiva la verdad espiritual?

¿Qué es la espiritualidad? La espiritualidad es la cualidad de amor, otorgamiento y conexión. Por eso es tan elusiva. Está oculta de nosotros pues es altruismo total, en tanto que nuestra cualidad es la opuesta, egoísmo total.

Entonces llega la pregunta: ¿está oculta la espiritualidad de nosotros o nosotros ocultamos la espiritualidad, al no tener interés en reconocer su existencia? De acuerdo a nuestra naturaleza receptiva, deseamos únicamente la satisfacción corporal. La idea de disfrutar exclusivamente al otorgar, sin recibir a cambio nada en absoluto, es ajena a nosotros.

Ese es todo el problema. Nadie ni nada de la espiritualidad está oculta para nosotros. Existimos dentro de una realidad espiritual y si pudiéramos expandir nuestras vasijas de percepción y sensación, veríamos que sólo existe una única fuerza de amor, otorgamiento y conexión. Sin embargo, cuando vemos el mundo a nuestro alrededor, parece una imagen completamente opuesta a aquella de amor puro, otorgamiento y conexión.

Esta oposición es para que desarrollemos un deseo sincero de entrar en equilibrio con la realidad espiritual que nos rodea, para que nuestras relaciones y actitudes hacia los demás, se vuelvan de amor, altruistas y positivamente conectadas, como en la cualidad de la naturaleza misma.  Durante el proceso de adaptación de nosotros hacia la realidad espiritual de amor, otorgamiento y conexión, no cancelamos el ego innato humano ni nuestros deseos corporales. La única transformación que necesitamos hacer es revelar la verdad espiritual en nuestra intención: restringir nuestra intención egoísta de gozar a expensas de los demás y de la naturaleza e incrementar nuestra intención de amar, otorgar y conectar puramente “en favor del otorgamiento”, es decir, sin querer nada a cambio. En otras palabras, para descubrir la realidad espiritual, que se cumple con la cualidad de amor, otorgamiento y conexión, sólo necesitamos transformar nuestra intención, de egoísta a altruista y así entraremos a toda una nueva percepción y sensación de la realidad: aquella que es ilimitada, tranquila y totalmente equilibrada.

Basado en la lección diaria de Cabalá del 17/nov/10, con el tema “La esencia de la religión y su propósito”. Escrito/editado por estudiantes del cabalista, doctor Michael Laitman.

limpieza espiritual

¿Cómo me limpio espiritualmente y como comienzo?

El trabajo espiritual comienza por aceptar las leyes de tu propia corrección.

Para hacerlo requiere:

  • llegar a entender que, elevarte por encima del ego, es de gran importancia y que,
  • conexión con los demás como un todo único, de acuerdo con la regla «ama a tu prójimo como a ti  mismo» es el objetivo espiritual más elevado y también que,
  • lograr este objetivo requiere un entorno de apoyo: apoyo y aliento de las aspiraciones los demás, para alcanzar la meta espiritual.

Después de ponerte en este camino, puedes progresar espiritualmente.

El camino espiritual está lleno de estados contradictorios: euforia en un momento, humildad al siguiente, ascensos y descensos, a veces sentimos que no hay estados ni deseos ni intenciones espirituales ante nosotros, pero si creamos un entorno que nos apoye en nuestro camino, hacia la meta espiritual, eventualmente nos sometemos a la corrección de todas las cualidades egoístas, las convertimos en altruistas, como está escrito, «el amor cubrirá todas las transgresiones».

Someterse a la corrección espiritual significa invertir nuestras cualidades egoístas en cualidades altruistas.

Alcanzar ese estado es descubrir el alma común, donde todos residen y el amor nos conecta a todos.

 

 

Del blog de Laitman.es 

espiritualidad

La espiritualidad está al alcance de tu mano

¿Qué sucede con las personas que se enganchan en juegos de computadora o, se encierran en sí mismas? ¿cómo deberíamos responder y relacionarnos con eso?

La generación actual vive así. No necesita nada más.

Las generaciones previas soñaban con ropa hermosa, con cosas materiales. Hoy, la nueva generación, no lo necesita. Dale una esquina o un cuarto separado, porque no tiene ganas de tratar con nadie. Dale una computadora o un teléfono con una buena conexión a internet, pizza, refresco y déjala sola.

¿Puedes imaginar lo que una persona necesita realmente? Hay pequeños departamentos donde subes, te acuestas y ahí tienes todo lo que necesitas. No se requiere nada más.

Estamos siendo reemplazados por una generación especial, con un tipo de ego particular. No tiene interés en grandes mansiones ni en la riqueza que ves en las películas de mediados del siglo pasado. Recuerdo mi juventud, cuando la gente competía por cosas así.

Hoy todo es distinto. Los valores son virtuales y, está bien. En este tiempo la espiritualidad está al alcance de la mano.

Del blog de www.laitman.es

ego

¿Qué es el ego?

La naturaleza humana es el deseo de disfrutar. El ego es la intención de disfrutar a expensas de los demás.

Nuestro deseo de disfrutar se divide en deseos individuales, sociales y espirituales:

  • · Deseos individuales: comida, sexo, familia y cobijo.
  • · Deseos sociales:  dinero, honor, poder y conocimiento.
  • · Deseo espiritual: o más exactamente, el núcleo de un deseo espiritual (llamado «punto en el corazón») que cuestiona el significado y el propósito de la vida. Comienza a emerger cuando comenzamos a sentirnos cada vez menos satisfechos con nuestros deseos individuales y sociales, y puede convertirse en un deseo espiritual completo.

Cuando hablamos de ego, es decir, de la intención de disfrutar a expensas de los demás, no nos referimos a nuestros deseos individuales de comida, sexo, familia y refugio. Estos son deseos puramente animales que operan en nosotros para preservar nuestra supervivencia como individuos y como especie humana. Es similar a la fuerza que existe en los objetos inertes para que puedan mantener su forma.

El ego se activa en el nivel de nuestros deseos sociales. Comenzando con el deseo por dinero, es un deseo que, fundamentalmente, quiere lo que tiene el otro.

Si consideramos la evolución humana como una sucesión de los deseos antes mencionados, entonces podemos ver cómo, en los primeros días de la evolución humana, es decir, nuestros “días de cavernícolas”, vivíamos y trabajábamos solamente para satisfacer nuestros deseos individuales de comida, sexo, familia y cobijo.

Después de cierto período, comenzamos a querer lo que otros poseían. El deseo de dinero nos instó a separarnos unos de otros, diferenciando nuestra propiedad de la propiedad de otros y desarrollando sistemas de intercambio entre nosotros. Este es el comienzo de la expresión del ego en la sociedad humana.

Cuanto más crece el ego, más queremos disfrutar a expensas de los demás.

Por lo tanto, cuanto más se iba desarrollando la humanidad, más personas asumían posiciones de poder, honor, fama y sobresalían en las ciencias, las filosofías y las artes.

Hoy, hemos llegado a un punto donde nuestros deseos individuales y sociales están saciados. Cada vez sentimos menos satisfacción al operar de acuerdo con el ego y esto es debido al siguiente nivel de deseo espiritual que comienza a despertar en nosotros.

El deseo espiritual está por encima del ego. La naturaleza nos guía a través de un proceso de desarrollo en el que experimentamos muchos años de desarrollo pre-egoísta satisfaciendo solamente las necesidades para la supervivencia y después, miles de años de desarrollo egoísta a través de los deseos de dinero, honor, poder y conocimiento.

En la etapa final del desarrollo de la humanidad, que comienza ahora, en nuestra era, experimentamos la “revelación del mal” en nuestro desarrollo egoísta –ya no podemos llenarnos por medio del disfrute individual a expensas de los demás– y comenzamos a implementar el nuevo deseo espiritual que emerge.

En este período de transición entre el punto máximo del desarrollo egoísta y el desarrollo espiritual, como sociedad, experimentamos crecientes fenómenos negativos, como la depresión, el estrés, la ansiedad o la soledad como individuos; y como sociedad, experimentamos división, conflicto, xenofobia, divorcio, intimidación, abuso, explotación y manipulación. Tales fenómenos aparecen para mostrarnos que ya no podemos satisfacernos y realizarnos, y que nos sentiremos desesperados e indefensos al intentar hacerlo, de acuerdo con nuestra inclinación egoísta innata natural.

Por lo tanto, como los cabalistas han estado debatiendo durante generaciones, en nuestros tiempos actuales, necesitamos experimentar una transformación fundamental de nuestro egoísmo e implementar nuestro nuevo deseo espiritual.

Y realizar ese nuevo deseo espiritual significa elevarse por encima del ego, es decir, aspirar a beneficiar a los demás en lugar de a nosotros mismos. En otras palabras, al cambiar nuestra innata intención egoísta de beneficiarnos a nosotros mismos por una intención altruista para beneficiar a los demás, nos damos cuenta de nuestro deseo espiritual y, por lo tanto, entramos en un equilibrio con la siguiente etapa de evolución hacia la que nos está guiando la naturaleza.

Y cuando entramos en equilibrio con esta nueva etapa de nuestra evolución, la experimentamos como un nuevo estado armonioso y perfecto.

Si no atravesamos esta transición y seguimos obstinadamente tratando de llenarnos a nosotros mismos a expensas de los demás, entonces, continuaremos sintiendo dolores y presiones, lo cual finalmente nos llevará a un mayor sufrimiento y desesperación.

Por lo tanto, espero que nos demos cuenta del método que nos ha sido entregado, la sabiduría de la Cabalá, y entremos en equilibrio con la naturaleza, adquiriendo sabiduría para definir con precisión quiénes y qué somos, qué es este ego que trabaja furtivamente en todo momento en cada uno de nosotros, y aprendamos a elevarnos por encima de él para experimentar una nueva plenitud y perfección.

depresión femenina y sentido de la vida

La depresión femenina y el sentido de la vida

La depresión es una epidemia global. Actualmente, más de 300 millones de personas en todo el mundo sufren de depresión, y el número de mujeres que son diagnosticadas prácticamente dobla el de hombres.

¿Por qué esta brecha de género tan llamativa entre las personas deprimidas de todo el mundo?

Al ponerlo en contraste con los hombres, vemos que la insatisfacción en las mujeres tiene una profunda raíz espiritual. Se halla alojada en la naturaleza femenina.

¿Hay algo que pueda satisfacer plenamente a una mujer?

Según la sabiduría de la Cabalá, sí que lo hay.

El logro espiritual.

La espiritualidad se alcanza cuando la mujer –la fuerza femenina– usa su profundo deseo de impulsar al hombre –la fuerza masculina– para alcanzar un propósito más elevado en la vida. Esa complementariedad entre las fuerzas opuestas, la masculina y femenina, les permite alcanzar juntos armonía y satisfacción.

La capacidad femenina de llevar al mundo a un estado superior se encuentra en los propios fundamentos de la humanidad. Tal como dice el viejo proverbio: «La mano que mece la cuna es la mano que domina el mundo». La naturaleza fue diseñada de modo que la habilidad femenina determinase cómo modificar y dirigir correctamente el mundo, es decir, cómo encontrar la cooperación adecuada entre las fuerzas masculina y femenina para que ambas funcionen juntas de forma solidaria y armoniosa.

La sensación de anhelo en la mujer es evidentemente mucho mayor que en el hombre. Un hombre puede llenarse más fácilmente con satisfacciones terrenales, por ejemplo, participando en actividades junto a sus amigos.

Una mujer desea más profundidad. Desea calor y amor. Empatía y apoyo. Su forma de satisfacción es mucho más compleja que la de los hombres.

Todo comienza y termina con la mujer. Se siente a sí misma como el centro de la realidad, porque de hecho, es el eje sobre el cual gira el mundo. Su sentido de unicidad es un sentimiento natural que ella legítimamente encarna.

«Cuando atraemos esta fuerza, realiza lo que se llama una “corrección” sobre nuestros deseos egoístas, que naturalmente se oponen a la tendencia de unirse. Es el “clic” necesario para que todos nos unamos y experimentemos un nivel más elevado de realidad».

Por qué es casi imposible que las mujeres se unan realmente

Según la sabiduría de la Cabalá, es casi imposible que las mujeres se unan realmente. Su anhelo por una mayor sensación de plenitud solo puede surgir cuando fuerzas opuestas se apoyan mutuamente en un delicado equilibrio.

Por lo tanto, la fuerza masculina y la femenina necesitan un ajuste muy preciso para que entre ellas aparezca una fuerza intermedia: la fuerza del amor, el otorgamiento y la conexión. El estudio de la Cabalá trata principalmente de cómo atraer esta fuerza para unir a las personas y descubrir una realidad eterna y completa en esa conexión. Cuando atraemos esta fuerza, realiza lo que se llama una «corrección» sobre nuestros deseos egoístas, que naturalmente se oponen a la tendencia de unirse. Es el «clic» necesario para que todos nos unamos y experimentemos un nivel más elevado de realidad.

Se dice que «hombre y mujer: la divinidad está entre ellos». La combinación y funcionamiento correctos de la fuerza masculina y femenina es:

1. que la fuerza femenina equilibre a la masculina impulsándola hacia la conexión, y

2. que la fuerza masculina equilibre a la femenina proporcionándole comprensión y apoyo para que la mujer se eleve por encima de su naturaleza.

Esta es la complementariedad que permite que las fuerzas masculina y femenina funcionen armoniosamente.

¿Qué fuerza es la primera en activar al otro: la masculina o la femenina?

La femenina. La necesidad y la solicitud de unificación siempre surge de la mujer. El anhelo de una conexión en lo más profundo de su deseo –el alma– es el origen de la insatisfacción y la depresión en la mujer.

Aunque los hombres piensen que progresan y logran avances gracias a sus propias capacidades, lo cierto es que todas las actividades del hombre son para la mujer, es decir, para conseguir aprobación. Así estamos construidos por naturaleza.

Pero gracias a estas diferencias entre géneros, por encima de las cuales necesitan conectarse en un todo único, se alcanza la perfección. No hay nada en cada uno de ellos que el otro no pueda complementar ya que, en la espiritualidad, la plenitud solo puede existir en complementariedad mutua de acuerdo con el principio: «el amor cubrirá todas las transgresiones».

En otras palabras, en lugar de luchar y centrarnos en las diferencias entre hombres y mujeres, necesitamos encontrar un territorio común de apoyo y comprensión en el que podamos descubrir juntos un propósito más elevado en la vida: descubrir cómo funciona la naturaleza en niveles más unificados y que nuestras relaciones se asemejen a esa fuerza de unificación completa de la naturaleza.

La sensación de alcanzar esa unidad perfecta es una cura para la depresión puesto que trabaja directamente sobre la llave que desbloquea nuestras sensaciones negativas abriéndonos a un tipo de satisfacción completamente nueva: el equilibrio con la fuerza de unidad de la naturaleza que conduce al logro de una vida plena.

 

Artículo de Michael Laitman.

visualizar la conexión

Cómo visualizar la conexión entre nosotros.

Pregunta: ¿Cómo podemos visualizar la conexión entre nosotros?

Respuesta: Aquellos que no han alcanzado la espiritualidad y solo quieren entrar, pueden imaginarla en diferentes formas. La conexión entre nosotros ya existe, simplemente no las vemos. Nos será revelada en la medida en que adquiramos la intención de otorgar.

¿Alguna vez has visto cómo se revelan los rayos láser al usar un spray especial en la habitación?  Después de usar el spray especial, los rayos se vuelven visibles. Pero sin el spray, son invisibles porque no hay nada que los revele.

Esto es exactamente lo que tenemos que hacer porque nuestras conexiones ya existen. Sólo debemos esforzarnos para que nuestras relaciones sean lo más amorosas posible. Y así estos hilos invisibles comenzarán a brillar y sentiremos que realmente existen. De esta manera, podremos descubrir la red que nos conecta y que ya está disponible.

Gradualmente revelaremos la gran y creciente complejidad y veremos que estamos interconectados por multitud de hilos. Estos lazos se volverán más espirituales, es decir, dirigidos al otorgamiento.

Esto sucederá en cada paso, como se dice, «el desperdicio de lo superior es alimento para lo inferior». Es decir, necesitamos mejorarnos constantemente para hacer que nuestras relaciones sean más cualitativas y altruistas.

En última instancia, el mundo entero se unirá a esta red de conexiones porque todos somos una sola vasija espiritual.

De la lección sobre El libro de Zohar 24/dic/17