1. Construyendo la Sociedad Futura
2. La Necesidad Absoluta de Aceptar el Trabajo de Dios
3. Principios de la Sociedad Futura
4. Sumario
1. Construyendo la Sociedad Futura
Hay una alegoría acerca de amigos que están perdidos en el desierto, hambrientos y sedientos. Uno de ellos ha encontrado un asentamiento colmado abundantemente con todos los placeres. Recordó a sus pobres hermanos, pero hacía mucho que se había apartado de ellos y no sabía dónde se encontraban. ¿Qué hizo? Comenzó a tocar muy fuertemente el cuerno; quizá sus pobres y hambrientos amigos oirían su voz, se aproximarían y vendrían a ese abundante asentamiento colmado de placeres.
Así está la cuestión ante nosotros: nos hemos perdido en un terrible desierto junto con toda la humanidad, y ahora hemos encontrado un gran y abundante tesoro, en otras palabras, los libros de Cabalá en el tesoro. Ellos colman nuestras almas anhelantes y nos colma abundantemente con exuberancia y armonía; estamos saciados y hay más.
Sin embargo el recuerdo de nuestros amigos que se fueron sin esperanza al terrible desierto permanece profundamente dentro de nuestros corazones. La distancia es grande, y las palabras no pueden cruzarla. Por esa razón hemos construido este cuerno, para tocarlo fuertemente para que nuestros hermanos puedan escuchar y acercarse y ser tan felices como nosotros.
Sepan, hermanos nuestros, – nuestra carne – que la esencia de la sabiduría de la Cabalá consiste en el conocimiento de cómo descendió el mundo desde su elevado y celestial lugar, hasta nuestro innoble estado. Esta realidad era necesaria, dado que «el fin de una materia está en el primer pensamiento», y Su pensamiento actúa instantáneamente, dado que Él no necesita herramientas prácticas como nosotros. De este modo, fuimos engendrados en el Infinito en total perfección desde el comienzo, y vinimos a este mundo (es decir: en el pensamiento del Creador de hacer el bien a Sus criaturas).
Por lo tanto es muy fácil hallar todas las correcciones futuras destinadas a venir de los mundos perfectos que nos precedieron dentro de la Sabiduría de la Cabalá. A través de ella sabemos cómo corregir nuestro rumbo de aquí en adelante. El mérito del hombre sobre las bestias es que el espíritu de las bestias desciende, lo que significa que sólo ve desde su futuro, sin el intelecto y la sabiduría para hacer memoria y de este modo corregir el futuro.
El mérito del hombre sobre las bestias, es que el espíritu del hombre asciende hacia el pasado. El hombre contempla el pasado como uno se mira en el espejo y ve sus propias imperfecciones para así corregirlas. Del mismo modo, la mente ve lo que pasó y corrige su conducta futura.
Por consiguiente, las bestias no evolucionan; están fijas, en el mismo estado en que fueron creadas, dado que no poseen, como el hombre, el espejo a través del cual ver cómo corregir las cosas y evolucionar gradualmente. El hombre se desarrolla día tras día hasta que se afiance y perciba su mérito. Pero todo esto se refiere a las vías naturales y superficiales, es decir la naturaleza de nuestra realidad circundante, la comida y los asuntos de este mundo. Para esto, la mente natural es totalmente suficiente.
Sin embargo, internamente, en nuestra personalidad, a pesar de que algo evolucionamos, evolucionamos y mejoramos al ser empujados desde atrás a través del sufrimiento y derramamiento de sangre. Esto es así porque no tenemos ningún artificio a través del cual obtener un espejo para mirar dentro del hombre, como lo tuvieron en las generaciones pasadas.
Esto es así aún más con respecto al interior de las almas y de los mundos, y cómo llegaron a la tan terrible ruina de hoy en día; la destrucción es tan grande que no tenemos ninguna seguridad en nuestras vidas. Seremos objeto de todo tipo de masacres y muerte en el futuro cercano, y todos admiten que no tienen ninguna recomendación para evitarlas.
Imaginen, por ejemplo, que hoy fuera encontrado un libro histórico que les reseñe las últimas generaciones, que estarán diez mil años a partir de ahora, que describa el comportamiento de los individuos y la sociedad. Nuestros líderes buscarían cualquier recomendación para organizar la vida aquí en consecuencia, y llegaríamos a «no hay privilegios ni lamentos en nuestras calles». Cesarían la corrupción y el sufrimiento terrible, y todo llegaría pacíficamente a su lugar.
Ahora, distinguidos lectores, este libro se encuentra ante ustedes en un armario. El mismo enuncia explícitamente toda la sabiduría del arte de gobernar y el comportamiento en la vida privada y pública que existirá en el final de los días. Este es el libro de la Cabalá, donde se establecen los mundos corregidos. Ellos surgen perfectos, como se menciona más arriba, la perfección surge primero del Creador, luego la corregimos y llegamos a la perfección completa y permanente en el Mundo Superior.
Esto se origina en el Creador como «el fin de una acción se encuentra en el inicio del pensamiento». Debido a que desde lo completo no se expande inmediatamente lo incompleto, sino de manera progresiva, y dado que no hay ausencia en lo espiritual, todo persiste y se describe en la sabiduría de la Cabalá en su forma e imagen perfecta, en particular y en general.
Abran estos libros y encontrarán todos los buenos comportamientos que aparecerán y el final de los días, y encontrarás dentro de ellos la buena lección a través de la cual ordenar los asuntos de este mundo también hoy. Nosotros podemos examinar la historia y a través de ello corregir el futuro.
Yo he visto todo eso, y ya no puedo restringirme. He resuelto revelar las conductas de la corrección de nuestro futuro concreto que he hallado a través de la observación y la lectura de estos libros. He decidido salir a la gente del mundo con este cuerno (shofar) y creo y estimo que esto bastará para reunir a todos los que sean dignos de comenzar a estudiar e investigar en estos libros. De este modo se someterán a ellos mismos y a todo el mundo a una escala de mérito.
2. La Necesidad Absoluta de Aceptar el Trabajo de Dios
Ya hemos expresado que la naturaleza necesita que la especie humana lleve una vida social. Esto es simple. Sin embargo, debemos examinar los preceptos que la naturaleza nos obliga a seguir como resultado de ese estado, es decir de llevar una vida social.
Hablando en general, hay sólo dos preceptos de los cuales debemos ocuparnos en la sociedad. Estos pueden ser definidos por los nombres «recepción y otorgamiento». Esto significa que cada miembro está obligado por la naturaleza a recibir sus necesidades de la sociedad, y también beneficiar a la sociedad por medio de su trabajo. Si uno quebranta cualquiera de estos dos preceptos, uno debe ser castigado sin compasión.
El precepto de recepción requiere sólo una pequeña consideración ya que el castigo para él se da instantáneamente. De este modo nunca lo desatenderemos. Sin embargo, el castigo para el segundo precepto, el de otorgamiento a la sociedad, no se recoge instantáneamente, sino que nos llega indirectamente.
En consecuencia, este precepto no se observa como debiera, y por ello, la humanidad se está friendo en una terrible sartén, y el hambre, la ruina y sus resultados no han terminado hasta ahora. Es asombroso que la naturaleza, como un juez competente, nos castigue al mismo tiempo que considera nuestro desarrollo. Después de todo, vemos cómo junto con la evolución de la humanidad, el dolor y el sufrimiento provistos para nuestro sustento y bienestar se incrementan.
De este modo tienen ante ustedes una base científica empírica que demuestra que estamos controlados por Su guía a observar el precepto de otorgamiento sobre nuestros semejantes con nuestro corazón y nuestra alma con absoluta precisión. Ni un solo miembro entre nosotros deberá trabajar en menor medida de la necesaria para el éxito de la sociedad y su felicidad.
Mientras seamos perezosos en observarlo en su totalidad, la naturaleza continuará castigándonos y desquitándose en contra nuestra. Además de la golpiza con la que estamos afectados en este tiempo, debemos también tomar en consideración la espada vívidamente desenvainada del futuro. Debemos elaborar la conclusión correcta, es decir que la naturaleza finalmente nos vencerá, y seremos obligados a observar Sus preceptos en la máxima medida requerida de nosotros.
Un adversario aún podría alegar que de este modo he demostrado únicamente que uno debe servir a su semejante, ¿pero dónde está la prueba práctica de que uno debe observar este precepto en beneficio del Creador? De hecho, la historia misma se ha preocupado en nuestro favor, y preparó para nosotros un hecho implacable, suficiente para una evaluación completa y conclusiones incuestionables.
Todos nosotros podemos ver cómo una sociedad tan grande como el Estado de Rusia, con sus cientos de millones y un territorio que supera el de toda Europa, con una posesión casi inigualable de materias primas, ha consentido conducir una vida comunal, y ha abolido efectivamente la propiedad privada. Cada uno de ellos no tiene otra inquietud más que el bienestar de la sociedad, y han adquirido en apariencia la virtud de otorgamiento hacia sus semejantes en todo sentido, tanto como la mente humana puede alcanzar.
Sin embargo, ve y observa en qué se han convertido: donde debieran haber progresado y superado a los países capitalistas, han descendido incluso más abajo. Por ahora, son incapaces de beneficiar la vida de los trabajadores incluso un poco más que en los países capitalistas. Además, no pueden ni siquiera asegurar el pan diario y cubrir sus cuerpos. De hecho, esta es una verdad desconcertante, a juzgar por la riqueza de este país y la multitud de habitantes, uno asume que no tendrían que haber llegado a eso.
Sin embargo, hay un pecado que esta nación ha cometido que el Creador no perdonará: todo este precioso y sublime trabajo de otorgamiento a nuestros semejantes que habían comenzado a perseguir debería haber sido en beneficio del Creador, no en beneficio de la humanidad. De este modo, debido a que no lo hicieron en Su nombre, les fue negado su derecho a existir por la naturaleza misma.
Imaginen si cada persona en esta sociedad estuviera tan ansiosa de observar el precepto del Creador en toda la extensión de las palabras, «Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma, y con toda tu fuerza.» Imaginen también hasta que extremo cada uno estaría atento y preparado para satisfacer las necesidades y deseos de sus amigos en la plena medida impresa en los humanos de satisfacer sus propios deseos, como dice, «Ama a tu prójimo como a ti mismo».
Si el Creador había tenido el propósito de que cada trabajador trabajara en su trabajo por el bien común, y si el trabajador contara con adherirse al Creador, al origen de toda la verdad, bondad, afabilidad y mansedumbre a través de este trabajo para la sociedad, no cabe ninguna duda que en pocos años habrían sobrepasado en riqueza a todas las naciones del mundo juntas. Hubieran sido capaces de utilizar las materias primas que se encuentran en su rico suelo y serían realmente un ejemplo para todas las naciones; serían considerados benditos por el Creador.
Sin embargo, cuando todo el trabajo de otorgamiento a nuestros semejantes está basado únicamente en el bienestar de la sociedad, es una base tambaleante, ¿para quién y qué haría que uno se esforzara por el colectivo? Es imposible esperar que cualquier fuerza inspiradora provenga alguna vez de un principio tan seco y carente de vida. Esto es verdad para los individuos evolucionados, y aún más para la gente no desarrollada.
De este modo no enfrentamos con la pregunta: ¿Dónde tomaría el granjero o el trabajador la fuerza inspiradora que lo impulse a trabajar, cuando la medida de nuestro pan diario no se incrementará o disminuirá al consumir nuestra energía, y ninguna recompensa y pago nos enfrenta? (Fuerza inspiradora: una fuerza, propósito. Es la fuerza que opera y pone cualquier cuerpo en movimiento y le proporciona su cuota de energía para el trabajo como el combustible hace en una máquina.)
Es sabido por los científicos naturalistas que uno no hará ni siquiera el más pequeño movimiento sin una fuerza motivadora, es decir sin beneficiarse en algo. Por ejemplo, cuando uno mueve su mano de la silla a la mesa, es sólo porque piensa que obtendrá mayor placer dejando su mano sobre la mesa. Si no hubiera pensado así, habría dejado su mano sobre la silla inmóvil por el resto de su vida; tanto más en lo que se refiere a mayores esfuerzos.
Si usted dice que este asunto puede resolverse colocando supervisores sobre los trabajadores, castigar al haragán quitándole su pan diario, entonces yo pregunto: «Dígame, ¿dónde encontrarían los supervisores mismos la fuerza motivadora para trabajar?» Estar parado inmóvil vigilando a la gente y motivándola para trabajar también es un gran esfuerzo, ¡quizá más que el trabajo mismo! De este modo, parece como si uno quisiera poner una máquina en funcionamiento sin combustible.
Por lo tanto, están condenados naturalmente al fracaso. Las leyes de la naturaleza los castigarán debido a que no se adaptan para observar sus mandamientos, es decir realizar estos actos de otorgamiento hacia su semejante para beneficio del Creador, observarlo y a través de eso alcanzar el propósito de la creación, es decir la adhesión con Él.
Se ha explicado que esta adhesión viene al trabajador como un placer cada vez más abundante, en la medida deseada para el ascenso en el reconocimiento de Su verdad. Esto se desarrolla hasta que uno adquiere la gran exquisitez implícita en las palabras, «ni ojo alguno ha visto un Dios además de Ti».
Imaginen que el trabajador y el granjero tuvieran este propósito ante sus ojos mientras trabajan para la felicidad de la sociedad. No necesitarían supervisores por encima de ellos en absoluto, dado que tendrían una fuerza inspiradora realmente suficiente para hacer grandes esfuerzos, suficientes para elevar a la sociedad a una exaltación sublime.
Al mismo tiempo es verdad que comprender la cuestión de manera tal requiere gran cuidado y un orden confiable, también es sencillo ver que no tienen ningún derecho de existir desde la perspectiva de la obstinada e inflexible naturaleza. Esto es lo que quise demostrar aquí.
De este modo, he mostrado que desde la perspectiva del intelecto empírico, y a través de la historia real que se revela ante nuestros ojos, no hay ningún remedio en absoluto para la humanidad excepto el tomar sobre sí el mandamiento de la providencia, es decir el otorgamiento a nuestro semejante para ofrecer satisfacción al Creador.
Lo anterior debe ser hecho en el espíritu de dos frases: «Ama a tu prójimo como a ti mismo», el atributo del trabajo mismo. Esto significa que el esfuerzo de otorgar a nuestro prójimo para el bien de la sociedad no debe ser menor que la cantidad marcada en uno para cuidar de sus propias necesidades. Es más, uno debe colocar las necesidades de los demás por encima de las propias.
La segunda frase es: «Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu fuerza.» Este es el propósito que uno debe tener ante sus ojos mientras trabaja para su amigo. Esto significa que uno funciona y se esfuerza sólo para ser apreciado por el Creador, como dice, y harán Su voluntad.
«Si estáis dispuestos y sois obedientes, comeréis el bien de la tierra», ya que los pobres dejarán de serlo, y los torturados y explotados no estarán más sobre la tierra; la alegría de cada persona se elevará cada vez más en grado y medida.
Sin embargo, si aún rechazas y no deseas avenirte al pacto del trabajo del Creador en su máxima medida, como se ha explicado, entonces la naturaleza y sus leyes están preparadas para tomar venganza. No nos pasará por alto, como hemos puesto en evidencia, hasta que nos derrote y aceptemos su gobierno en lo que nos dice.
De esta manera, les he presentado una investigación práctica científica basada en la inteligencia crítica experimental, acerca de la necesidad de que toda la gente tome a su cargo el trabajo del Creador con todo su corazón y con toda su alma y fuerza.
3. Principios de la Futura Sociedad
1. El comunismo es un ideal, es decir que es moral. El propósito «trabajar de acuerdo a su capacidad y recibir de acuerdo a su necesidad» da testimonio de ello.
2. Cada moral debe tener una base que la haga necesaria; la educación y la opinión pública son bases muy imperfectas, y la prueba de ello es Hitler.
3. Dado que cualquier concepto de la mayoría tiene asegurado su triunfo, es innecesario decir que la puesta en práctica del comunismo corregido es por la mayoría del público. De este modo, ellos deben establecer el nivel moral de la mayoría del público que necesite y garantice que el comunismo corregido nunca será corrompido. El ideal predeterminado en los humanos es insuficiente, dado que muy pocos lo poseen, y son insignificantes comparados con la mayoría del público.
4. La religión es la única base segura para elevar el nivel del colectivo al nivel moral de «trabajar de acuerdo a su capacidad y recibir de acuerdo a su necesidad».
5. El comunismo debe alejarse del concepto, «Lo que es mío es mío y lo que es tuyo es tuyo», el cual es una ley sodomita, hacia el concepto, «Lo que es mío es tuyo y lo que es tuyo es tuyo», es decir altruismo absoluto. Cuando la mayoría del público acepte esta ley de hecho, será el tiempo de «trabajar de acuerdo a la capacidad y recibir de acuerdo a la necesidad». El vínculo debe ser que cada uno trabajaría como un trabajador contratado. Por lo tanto, hasta que la mayoría de la gente no esté dispuesta para otorgar a sus semejantes, el régimen comunista altruista no debe ser establecido.
6. Está prohibido nacionalizar la propiedad antes que el público alcance este nivel moral. El colectivo no tendrá incentivo para trabajar antes de que haya un factor moral confiable en el público.
7. Si nos está prohibido explotar a nuestros semejantes, ¿por qué debe permitírsele a una nación explotar a sus naciones aliadas? ¿Qué ocupación justifica que una nación disfrute de la tierra más que las otras naciones? Por consiguiente, debe ser fundado el comunismo internacional.
Así como hay individuos que han sido privilegiados por la perseverancia, oportunidad o herencia de sus antepasados por una participación mayor que los negligentes, exactamente así es entre las naciones. Por lo tanto, ¿por qué la guerra sobre los individuos debe ser más grande que contra las naciones?
En otras palabras, ¿qué privilegio y derecho de posesión de las materias primas de la tierra tiene una nación sobre las otras? ¿Quién estableció las leyes de ocupación, especialmente las que se han obtenido por la fuerza de las bayonetas y espadas? ¿Por qué una nación debe explotar a otra si esto es injusto para cada individuo?
Como conclusión, así como es justo anular la propiedad privada, también es justo para todas las naciones, dado que sólo entonces habrá paz sobre la tierra. Consideren esto: si la posesión y la ley de herencia no concede derechos de propiedad al individuo, ¿por qué debe serle concedido a toda una nación? Además, así como debe haber una división justa entre los miembros de una nación, así también debe haber una división igual internacionalmente en materias primas, medios de producción y la propiedad acumulada de todas las naciones.
No debe haber ninguna diferencia entre blancos y negros, civilizados y primitivos, exactamente como entre los individuos de la misma nación. No debe haber discriminación alguna entre los individuos, una nación, o todas las naciones del mundo. Mientras haya diferencias, la guerra no terminará.
8. El mundo entero es una familia. La estructura del comunismo de acuerdo a la Torá debe finalmente abarcar a todo el mundo con un nivel de vida igual para todos. Sin embargo, el proceso real es gradual. Cada nación en la que la mayoría acepta estos elementos básicos de un modo práctico, y que ya han crecido para otorgar a sus semejantes y tengan una causa firme como incentivo, pueden entrar en la estructura del comunismo internacional inmediatamente.
Todas las naciones que ya hayan ingresado a la estructura del comunismo internacional tendrán los mismos niveles de vidas. El excedente de riqueza o una nación diligente mejorará el nivel de vidas de los que fracasen o las naciones pobres en materias primas y medios de producción.
9. La forma religiosa y económica que garantiza el comunismo será una para todas las naciones. Esto significa que la forma religiosa de todas las naciones debe primero obligar a sus miembros a otorgar a sus semejantes en la forma de «Amarás a tu prójimo como a ti mismo». El propósito es que el talentoso y el afortunado no disfrutarán más de la sociedad que los miembros atrasados. Esta será la religión colectiva para todas las naciones que pertenezcan a la estructura del comunismo, excluyendo las formas religiosas que no tenga que ver con la vida económica.
En otras cuestiones de comportamiento, cada uno tendrá su propia forma, la cual no debe ser cambiada. En otras palabras: excepto por la cuestión «Amarás a tu prójimo como a ti mismo», cada nación puede seguir su propia religión y tradición, y uno no debe interferir con la otra.
10. Las leyes de la religión colectiva, iguales para todos, son:
A. Uno debe trabajar para el bienestar de la gente tanto como pueda e incluso más si es necesario, hasta que no haya una sola persona con hambre o sed en todo el mundo.
B. Uno puede ser diligente, pero ninguna persona deberá disfrutar de la sociedad que el atrasado. Habrá un nivel de vida igual para todas las almas.
C. Aunque haya religión, los símbolos honoríficos deben impartirse de acuerdo a la religión; con cuantos más beneficios uno contribuya a la sociedad, más alta será la condecoración que reciba.
D. El abstenerse de trabajar diligentemente en beneficio de la sociedad motivará un castigo de acuerdo a las leyes de la sociedad.
E. Todos y cada uno está obligado al trabajo de elevar constantemente el nivel de vida de la sociedad mundial, de este modo toda la gente en el mundo disfrutará de sus vidas y sentirá cada vez más felicidad.
F. Lo mismo se aplica para la espiritualidad, aunque no todos están obligados a ocuparse en la espiritualidad salvo sólo la gente especial, dependiendo de sus necesidades.
G. Habrá una especie de corte suprema. Los que quieran dedicar su trabajo para la vida espiritual les será permitido hacerlo por esta corte.
11. El mundo no debe ser corregido en asuntos religiosos antes que esté garantizada la corrección económica para todo el mundo.
12. Debe haber un programa detallado de todas las leyes mencionadas anteriormente y el resto de las leyes necesarias a este sentido. Cualquiera que está bajo la jurisdicción del comunismo debe jurar que observará todo eso porque Dios así lo ha ordenado. Por lo menos uno debe comprometerse a enseñar a sus hijos que Dios así lo ha ordenado.
Los que dicen que el ideal es suficiente para ellos serán aceptados y puestos a prueba. Si es así, pueden ser aceptados. Sin embargo, aún deben prometer no pasar sus formas heréticas a sus hijos, sino poner su educación en manos del estado. Si uno no acepta, no debe ser aceptado, ya que estropearía los esfuerzos de sus amigos y perdería más de lo que ganaría.
13. Primero, debe haber un pequeño establecimiento en el que la mayoría es altruista del modo expuesto anteriormente. Esto significa que trabajarán diligentemente como trabajadores contratados diez o doce horas por día y más. Cada uno trabajará de acuerdo a su fuerza y recibirá de acuerdo a sus necesidades.
Tendrá todas las formas del gobierno de un estado. De este modo, incluso si la estructura de esta institución contuviera a todo el mundo, y el gobierno de la fuerza bruta fuera abolido, nada tendría que ser cambiado, tanto en el gobierno como en el trabajo.
Esta institución será como un punto focal global con naciones y estados rodeándolo hasta los rincones más alejados del mundo. Todo el que ingrese en esta estructura comunista deberá tener el mismo programa y el mismo liderazgo que el centro. Serán como una nación en los beneficios, en las pérdidas y en los gastos de producción.
14. Está absolutamente prohibido para cualquiera de la institución dirigirse a cualquiera de los establecimientos del régimen de la fuerza bruta. Todos los conflictos deben ser resueltos entre ellos mismos, es decir entre las partes interesadas. La opinión pública, que condena el egoísmo, condenará a los culpables de explotar la rectitud de su amigo.
15. El Comunismo Altruista finalmente anulará completamente el régimen de la fuerza bruta, debido a que «cada hombre hizo lo que era correcto a sus propios ojos». Esto no debería sorprendernos, ya que era increíble que los niños pudieran ser educados con explicaciones, sino sólo mediante bastonazos. Sin embargo, hoy en día, la mayoría de la gente lo ha aceptado y ha reducido las reglas drásticas sobre los niños.
Esto atañe a los niños que no tienen ni paciencia ni conocimiento, pero aún más en relación a un colectivo de gente educada y conocedora, educada en el altruismo. Ellos ciertamente no necesitan el régimen de la fuerza bruta. En realidad, no hay nada más humillante y degradante para una persona que estar bajo el gobierno de la fuerza bruta.
Ni siquiera será necesario un palacio de justicia, a menos que ocurra un acontecimiento inusual, cuando los vecinos no influencien un individuo excepcional. Es ese caso, serán necesarios pedagogos especiales para recuperar a la persona a través del razonamiento y la explicación del beneficio de la sociedad, hasta que la persona se restablezca en la línea.
Si alguien es obstinado, y todo es en vano, entonces el público se apartará de la persona como si se tratara de un descastado, hasta que esa persona se reconcilie con las leyes de la sociedad. De otro modo, ella puede corromper también a otros de la sociedad.
Resulta ser que luego que se haya establecido una comunidad de Comunismo Altruista, con una mayoría de gente que haya tomado activamente estas leyes sobre sí mismos, inmediatamente decidirán no llevarse entre sí a ninguna corte, agencia gubernamental o cualquier otro tipo de fuerza, sino que por el contrario todo se hará a través de la persuasión moderada. Por lo tanto, ninguna persona será aceptada dentro de la sociedad antes de ser examinada para ver si es tan burda que no puede ser preparado para ingresar al altruismo.
16. Es un hecho que los judíos son odiados por la mayoría de las naciones, y cada vez son menos gracias a ellos. Esto es cierto para los religiosos, los laicos y los comunistas. No hay ninguna defensa ante esto, excepto promover la verdadera ética altruista dentro del corazón de las naciones.
17. Si vivieses en una isla de salvajes que no puedes aproximarlos a la ley y el orden excepto a través de la religión, ¿entonces dudarías y les permitirías destruirse unos a otros? Es lo mismo con el altruismo: ellos son salvajes y no aceptarán a ningún abogado si no es a través de la religión. ¿Quién vacilaría abandonarlos para que se destruyan unos a otros con bombas de hidrógeno?
18. Hay tres rudimentos para la expansión de la fe:
1) Satisfacción de los Deseos;
2) Prueba
3) Circulación
A. Satisfacción de los Deseos: En cada persona, incluso laica, hay una chispa que exige la unificación con el Creador. Cuando despierta, a veces despierta para conocer al Creador, o para negarlo, lo cual es lo mismo. En otras palabras, la negación de Dios también proviene de esa chispa, ya que sin ella, uno no tendría ningún sentimiento acerca de Dios en absoluto. En lugar de ello la gente viviría sin ningún pensamiento acerca del Creador, bueno o malo.
Si alguien genera la satisfacción de este deseo en esa persona, ella estará de acuerdo en todo. Para eso debemos incluir lo que respecta a la inmortalidad del alma, la recompensa en el otro mundo, la gloria del individuo y la gloria de la nación, es decir que uno será el orgullo de la nación.
B. Prueba: No hay existencia para el mundo sin esto, aún más en una época de bombas atómicas.
C. Circulación: Si se hace diligentemente, también puede reemplazar a la prueba. Por lo tanto, la gente debe ser contratada para divulgar las palabras anteriores al público. Para el propósito de la expansión y divulgación debe mencionarse el sufrimiento, la pobreza, la corrupción y la guerra, también a las viudas y huérfanos en el mundo, que buscan la salvación.
No hay ningún remedio para ellos excepto en el Comunismo Altruista. En un estado así la gente no hallará tan difícil dedicar toda su vida a esto, para salvarlos de la destrucción y de terribles sufrimientos. Esto es aún más de este modo con los jóvenes, cuyos corazones no han sido entorpecidos por sus propias imperfecciones. Indudablemente ellos lo apoyarán con su corazón y su alma.
19. Debido al ansia de posesiones, es imposible que se origine el Comunismo Altruista a menos que primero venga el Comunismo Egoísta, como lo han puesto de manifiesto todas las sociedades que desearon establecer el Comunismo Altruista con anterioridad al Marxismo. Sin embargo, ahora que la tercera parte del mundo ya ha asentado los rudimentos de un régimen Comunista Egoísta, es imposible establecer un Comunismo Altruista duradero basado en una estructura religiosa.
20. Es importante hacer dichas correcciones, que ninguna persona exija sus necesidades de la sociedad. En su lugar, habrá gente seleccionada que examinará las necesidades de cada uno y las cubrirá para cada individuo. La opinión pública denunciara al que reclame algo para sí mismo, como por ejemplo al ladrón y al bribón de hoy en día.
De este modo, los pensamientos de cada uno estarán consagrados al otorgamiento a nuestro semejante, tal como se encuentra en la naturaleza de cualquier enseñanza que la fomente, incluso antes que uno sienta sus propias necesidades.
Todo esto está basado en el hecho de que vemos que somos como cualquier otro animal en nuestro consumo. También, cualquier acto despreciable en el mundo se origina en el consumo. Por otro lado, vemos que todo lo bueno y placentero que actúa en el mundo viene de la propiedad de otorgamiento a nuestros semejantes.
Por lo tanto, debemos rechazar los pensamientos avaros de consumo para sí, y llenar nuestras mentes con pensamientos de otorgamiento a nuestros semejantes, lo cual es posible de la manera expuesta más arriba. Debemos recordar que si queremos saltar sobre una mesa, debemos prepararnos para saltar más alto que la mesa, y luego caer sobre la mesa. Sin embargo, si queremos saltar sólo tan alto como la mesa, nos caeremos.
21. Sin duda alguna, el Comunismo Altruista no es más que un paso en el camino, un tipo de «Desde Lo Lishmá a Lishmá» (desde no para Su Nombre hasta para Su Nombre). Pero yo digo que el tiempo para la segunda fase, es decir el Comunismo Altruista, ha llegado.
Primero debe ser establecido en un país, como modelo. Luego de eso los países en la primera fase lo aceptarán sin lugar a dudas. El tiempo es crucial, debido a que las limitaciones y la fuerza bruta utilizada en el Comunismo Egoísta, desalienta a la mayor parte del mundo cultural a aceptar este método en su conjunto.
De este modo, el mundo debe ser introducido al comunismo perfecto, y entonces la mayoría de los países civilizados en el mundo lo aceptarán sin ninguna duda. Es de suma importancia que el imperialismo elimine al comunismo del mundo, pero si nuestro método perfecto se difundiera realmente, el imperialismo será sin duda abandonado como un rey sin ejército.
22. Es evidente que no es posible una vida social estable y adecuada excepto cuando las controversias entre los miembros de la sociedad se resuelven por la mayoría. Es una consecuencia lógica que no puede existir un buen régimen en una sociedad a menos que la mayoría sea buena. Una sociedad buena significa que la mayoría en ella es buena, y una sociedad mala significa que la mayoría de ella es mala. Como he expresado anteriormente, el comunismo no debe ser establecido antes que la mayoría de la gente funcione con un deseo de otorgar.
23. La falta de circulación puede afianzar un gobierno coercitivo sobre las futuras generaciones, y ni la opinión pública ni la educación ayudarán en este caso, ya que ellas se debilitan naturalmente, a diferencia de la religión, que se fortalece naturalmente. Vemos que a través de la experiencia que las naciones que han aceptado las religiones primero coercitiva y compulsivamente, las observan voluntariamente en la siguiente generación. Además, están dedicadas y consagradas a ella.
Debemos comprender que aunque los padres adoptaron para sí mismos el comunismo porque eran idealistas, no hay ninguna garantía de que sus hijos los sigan en este régimen. No es necesario decir que, si los padres adoptaron el comunismo por coerción, como es el comportamiento en el Comunismo Egoísta, no perdurará durante generaciones, sino que finalmente será doblegado y anulado. Un régimen no puede ser impuesto salvo a través de la religión.
24. Cuando digo que el régimen comunista no debe ser establecido antes de que haya una mayoría altruista, no supongo que dicha mayoría será idealista de buena gana. Esto más bien significa que la cuidarán por razones religiosas, además de la opinión pública. Esta coerción de de un tipo que perdurará durante generaciones, dado que la religión es el impulsor primario.
25. Los mentirosos son los que dicen que el idealismo es un atributo humano natural o el resultado de la educación familiar. Más bien, es una consecuencia directa de la religión. Mientras la religión no se expandió tan ampliamente en el mundo, la mayoría del mundo era bárbaro sin ningún remordimiento de conciencia.
Sin embargo, luego de haber proliferado los trabajadores de Dios, los descendientes de los agnósticos se convirtieron en idealistas. De este modo, los idealistas cuidaron los mandamientos de sus padres, pero este es un mandamiento huérfano, es decir sin un mandamiento. En el caso de que se terminara la religión en el mundo, todos los gobernantes se convertirían en ‘Hitlers’; nada resistirá de esta manera.
La diferencia entre los religiosos y los idealistas es que los actos de los idealistas son infundados. No pueden explicarle a nadie convincentemente por qué prefieren la justicia y quién la necesita. Quizá ésta sea la única debilidad del corazón, como lo afirmó el filósofo Nietzsche. Esa persona no tendría una sola palabra con sentido para expresar, y esa es la razón de que Hitler y Stalin los subyugue. Sin embargo, los religiosos responderán audazmente que este es el mandamiento de Dios y darían su alma por esto.
26. El Comunismo Altruista es algo poco común para el espíritu humano. Por lo tanto, un pueblo más noble, es decir el pueblo de Israel, debe encargarse de dar el ejemplo al mundo. Esto es así porque estamos mejor calificados que todas las otras naciones, no porque somos más idealistas que ellos, sino porque hemos sufrido más que las otras naciones. Por esa razón nosotros estamos más preparados que ellos para ir en busca de consejo para terminar con la tiranía de la tierra.
El Judaísmo debe dar a las naciones algo nuevo; esto es lo que ellas esperan del regreso de Israel a su tierra. No se trata de otras enseñanzas, en las que nunca nos innovamos y siempre fuimos sus discípulos. Más bien, es la sabiduría de la religión, la justicia y la paz. En esto, la mayoría de las naciones son nuestros discípulos, y esta sabiduría es atribuida sólo a nosotros.
27. La nación está en peligro porque cada persona escapará a cualquier parte antes que la economía se estabilice. No todos pasarán la prueba mientras puedan vivir cómodamente en otros países ricos. Lentamente huirán del sufrimiento hasta que no sean una cantidad suficiente para ser llamados un estado, y serán tragados entre los árabes.
Esto es aún más así con los Kibutzim. Toda su existencia está construida sobre el idealismo, que disminuirá naturalmente en las futuras generaciones, dado que los ideales no son hereditarios, y serán destruidos sin duda alguna en primer lugar.
En el método del Comunismo Altruista, el ideal brillara para cada persona, proporcionando razones suficientes para soportar el sufrimiento. También serán capaces de controlar sus almas y reducir su nivel de vida cuando sea necesario. También estarán en condiciones para trabajar duro para asegurar la estabilidad de la economía del estado.
Además, la congregación de la diáspora continuará desde todos los países ya que la inquietud y la lucha por la supervivencia en otros países los motivará a regresar pacífica y justamente a su tierra.
28. Si todo Israel adopta esta religión, será posible reconstruir el Templo, y restaurar la antigua gloria. Esto ciertamente probaría a todas las naciones que es justo que Israel regrese a su tierra, incluso a los árabes. Sin embargo, un regreso secular, como el de hoy en día, no causará buena impresión a las naciones en absoluto; hay una preocupación de que venderán su independencia para satisfacer sus necesidades, más todavía con respecto a la reintegración de Jerusalén.
29. Cualquier método práctico también necesita alimento idealista sobre el que pensar, es decir filosofía. En relación con eso, ya hay una filosofía completa y disponible, aunque esto significa sólo para los líderes, es decir las enseñanzas de la Cabalá.
30. La libertad del individuo debe ser mantenida mientras no sea perjudicial para la sociedad. Sin embargo, el que desea irse a favor de otra sociedad no debe ser detenido de ninguna manera, incluso si es perjudicial para la sociedad, aunque debe ser hecho de manera tal que la sociedad no se dañe totalmente.
4. Sumario
El deseo de recibir impreso en cada criatura está en disparidad de forma con el Creador. Por esta razón el alma fue separada de él como un órgano amputado del cuerpo. Una disparidad de forma en espiritualidad es como un hacha que corta en lo físico.
Por lo tanto es claro que lo que el Creador quiere de nosotros es la equivalencia de forma, momento en el cual nos adherimos a Él una vez más, como antes de que fuéramos creados. Nuestros sabios han dicho «Adherirse a Sus características; así como Él es misericordioso, también tú sé misericordioso.»
Al cambiar nuestras características, que son en principio nuestro deseo de recibir, y adoptando el rasgo del creador, es decir sólo otorgar, todos nuestros actos serán hacer el bien a nuestros semejantes y beneficiarlos todo lo que podamos. De este modo alcanzamos el objetivo «adherirse a Él», lo cual es equivalencia de forma.
Lo que uno hace para sí mismo por necesidad, es decir el mínimo necesario para mantener a nuestra familia, no se considera disparidad de forma, como «la necesidad no se condena ni se elogia.» Esta es la gran revelación que aparecerá en su totalidad sólo en los días del Mesías. Cuando esta enseñanza sea aceptada alcanzaremos la completa redención.
Ya he mencionado que hay dos caminos para revelar la perfección: el camino de la Torá y el camino del sufrimiento. Por lo tanto, el Creador aconteció y le dio a la humanidad la tecnología, hasta que inventaron la bomba atómica y la bomba de hidrógeno.
Si la destrucción total que ellas están destinadas a traer aún no es evidente para el mundo, entonces pueden esperar una tercera guerra mundial, o una cuarta y así sucesivamente. Las bombas harán lo suyo y las reliquias después de la destrucción no tendrán ninguna alternativa salvo tomar sobre sí mismas este trabajo, «que tanto los individuos como las naciones no trabajarán para sí mismos más que lo necesariamente indispensable para sus sustento, y todo el resto se hará para el bien de los demás.» Si todas las naciones del mundo están de acuerdo con eso, entonces ya no habrá más guerras en el mundo, dado que ninguna persona estará preocupada por su propio bien en absoluto, sino sólo por el bien de los demás.
Esta enseñanza de la equivalencia de forma es la enseñanza del Mesías. Acerca de eso se dice, «Acontecerá en los postreros tiempos que el monte de la casa de Jehová será establecido por cabecera de montes, y más alto que los collados, y correrán a él los pueblos. Vendrán muchas naciones, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, y a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará en sus caminos, y andaremos por sus veredas; porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová. Y él juzgará entre muchos pueblos, y corregirá a naciones poderosas hasta muy lejos…» (Miqueas 4).
De esto se desprende que el Mesías enseñará el trabajo de Dios en la equivalencia de forma, la cual es la enseñanza y la ley del Mesías. «Y Él juzgará entre mucha gente», es decir que Él les demostrará que si no toman sobre sí mismos el trabajo de Dios, todas las naciones serán destruidas por las guerras.
Pero si aceptan Sus enseñanzas, está dicho «Y se tornarán sus espadas en arados y sus lanzas en podaderas; nación no alzará espada contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra.» De este modo, es preferible que sigamos el camino de la Torá y aceptemos sus enseñanzas.
Si no lo hacemos, entonces transitaremos el camino del sufrimiento, es decir que se declararán guerras con bombas atómicas y de hidrógeno, y todas las naciones del mundo buscarán un camino fuera de la guerra. Entonces vendrán a Jerusalén, al Mesías y Él les enseñará esta ley.